Thread by @Bernardieux

¡Ese Personal! Hoy me levanté muy temprano porque hubo #OpenMic de @WeTweetEnergyMX, y me perdí la mitad porque la conexión era más lenta que la erosión, pero tuve chance de hacer un comentario sobre el futuro de la inversión en México considerando el acuerdo este del CENACE que

-en términos exactos- para en seco la generación de energía a partir del aprovechamiento recursos renovables... sí sí... como si vinieran ustedes en bicla y se tiraran de testuz contra una pared... así de seco.

Entonces, les voy a contar en un auténtico hilote

(perdón, pero era necesario) cómo se gesta un proyecto desde cero, usando de ejemplo un desarrollo que se hizo para Wikinger, un proyecto eólico offshore en el Mar Báltico, del que tuve la oportunidad y el orgullo de formar parte. Nomás antes les voy a pedir que procedan a la

sanitización de los apéndices distales de sus extremidades superiores, es decir, que se laven las manos... digo, así todos estamos más tranquilos y todo.

Resulta que, un día allá por el 2002, unos pinches Escoceses locos dijeron -tal como dice el 99% de Escocia los viernes en

la tarde... bueno... todos los días) “mate, vamos por unas chelas”, y ahí en el bar se les ocurrió que el mar báltico era un buen lugar para poner un parque eólico, y en la sexta pinta de Guiness dijeron... “pos... vamos viendo y lo echamos a andar, mate”.

Y a partir de ahí,

todo fue un trabajal. Primero hubo que hacer unos cuantos estudios sobre el báltico, para tener alguna idea sobre varias cosas

- Patrones meteorológicos, para tener idea sobre el comportamiento del clima en general
- Patrones específicos de velocidad, dirección y humedad del

viento, para saber cuál era la zona del báltico más aprovechable, y en donde el viento fuera más útil (estos tres factores influyen en el diseño y la eficiencia de las palas de las turbinas)
- Patrones de dirección, altura y número de golpes de ola, para saber cómo diseñar

cimentaciones y turbinas para que aguanten la operación durante 25 años, que, según la regulación alemana, es el límite de tiempo en el que un parque solar puede operar en el báltico).
- Patrones de corrientes marítimas, para no darle en la torre a la fauna marina ¿Cómo es eso?

Pues esto es fundamental para definir cómo se hacen las pruebas de perforación e instalación de cimentaciones... al final se utilizó una cortina de burbujas para crear una barrera acústica y así no molestar a los peces... ¿cómo les quedó el ojo?... la tecnología es chingona,

no cabe duda.
- Patrones de migración de aves, para saber dónde poner el parque afectando lo menos posible las rutas migratorias (o sea, gestión del impacto sobre los ecosistemas).
- Análisis de residuos y basura de la guerra. Dato interesante, con las batimetrías encontramos

restos de dos aviones, un Me 109 y un Heinkel 111, -caza y bombardero medio, respectivamente- prácticamente enteros, además de 8 Schnellboot, que significa “lancha rápida” (eran unas maravillas de lanchas torpederas), 4 torpedos, y un huevo de minas sin detonar. Ni los aviones ni

las lanchas se recuperaron, porque son cementerios de guerra -3 turbinas se tuvieron que cambiar de ubicación por respeto a éstos. Y los torpedos y las minas que significaban riesgo los detonó la Deutsche Marine, o sea la Armada Alemana... esas detonaciones eran un espectáculo.

El caso es que toda esta información se analizó para tener una idea de la viabilidad del proyecto, y después de años de analizar todo (sí... años), los Escoceses locos se tomaron otras seis pintas -no podía ser de otra forma- y se fueron a Berlín a hablar con el gobierno

alemán -en donde, por supuesto se tomaron otras tantas “bier dunkel” para ponerse en ambiente- para contarles que creían que, después de analizar el asunto, proponían desarrollar un proyecto eólico chido en una zona chida a 75 kilómetros al noreste del puerto de Sassnitz-Mukran,

en la isla de Rugen, que tenía todo el potencial chido para generar hasta 305MW chidos... ¡Qué chido!

Nota chida... a un lado del puerto de Sassnitz hay un restaurante llamado el Café Bäckerei Peters Fährhafen Mukran, que tiene a los meseros más enojados y malos del mundo,

pero que sirve el mejor strudel de manzana del mundo (es tan bueno que vale la pena aguantar el mal humor del personal), y que pidió que los edificios del proyecto no tuvieran más de 2 pisos, porque eso obstruía la visión del mar a sus clientes. Eso resultó en que las oficinas

completas se cambiaran de ubicación... y eso a su vez resultó en que al personal del proyecto le daban descuento en el restaurante, y en el strudel... una situación win-win por donde se la vea, aún a costa del genio del personal del servicio.

El gobierno alemán analizó toda la

información, y entonces pidió la ingeniería base y los estudios ambientales, técnicos, de garantía de distribución, y de viabilidad económica, y luego, una vez que quedó demostrado que el parque era viable, que no iba a madrear el medio ambiente, que no iba a significar pérdidas

para el desarrollador, y que le daría electricidad a más de 350,000 casas, el gobierno pidió la ingeniería de detalle, y los conceptos de construcción y de operación/mantenimiento... otro año y medio para revisar, y finalmente dijeron algo así como “Großartige...

schottische Herren ... trinken Sie ein paar Biere und bringen Sie die restlichen technischen Informationen zur Ausführung mit, damit wir sie zur endgültigen Genehmigung überprüfen können” que significa algo así como “sale, esos Escoceses... tómense otras chelas, agarren

y tráiganse la información técnica de ejecución para revisarla y darle el visto bueno final”.

Y ahí, otro rato de identificación de proveedores para fabricación, equipos y materiales, desarrollo de secuencias de trabajo, diseño de detalle cumpliendo todos los standards de

ingeniería, seguridad y medio ambiente, versiones finales de los conceptos de ejecución, operación, emergencias, gestión ambiental, etc., etc. y etc. hasta que las autoridades alemanas dijeron “Gut, schottisch, meine Herren ... das ist cool, also fahren Sie bitte mit allem fort,

was Sie brauchen, um das Projekt wie geplant auszuführen”, que quiere decir “chido, esos escoceses... procedan con lo necesario para ejecutar el proyecto tal como dijeron”. Ya era 2007.

Y entonces, y sólo entonces los escoceses locos pudieron, como los mariachis,

arrancarse con “El Rey”. Las pruebas de perforación y pilotaje empezaron en 2014, la construcción empezó en 2015, y el proyecto se inauguró en 2018. Hoy, gracias al proyecto no se emiten 600,000 toneladas de CO2, y -tal como se dijo- se genera energía para más de 350,000 casas.

Y todo esto se hizo en base a dos cosas: la determinación de la empresa de invertir UNA LANA en desarrollar un proyecto (todo lo que les acabo de contar no le costó al gobierno alemán ni un centavo), y la certidumbre que dio el gobierno alemán después de revisar la información

inicial, que básicamente consistió en decir “invierta usted UNA LANA en demostrarme que esto es viable y tiene beneficios para Alemania, y si me lo prueba, me gusta, y me convence, yo lo dejo invertir en el resto y ganar lana durante 25 años ´Überhaupt kein Problem!

o sea ´sin problema´”. Así de fácil y de difícil.

¿Qué es lo que dice el acuerdo del CENACE? Que todo lo que les acabo de contar (menos lo del strudel) es imposible nomás las bolas de alguien... ¿Y qué genera eso? Incertidumbre... ¿y qué causa la incertidumbre? Pues que, siendo

México uno de los países con mejor potencial eólico y solar del mundo, NADIE va a querer invertir aquí, porque no hay ninguna garantía de que, si ustedes se gastan una lana en desarrollar opciones de generación, vayan a tener la oportunidad de terminar su proyecto siquiera.

Por lo tanto, el acuerdo -entre otras cosas- le cierra la puerta a la IP, y la abre a la generación de los 70, con combustibles fósiles.

Pésimo servicio. ⭐️

Así que, como siempre, eviten comprar humo y espejos, y tangan en cuenta que, lo diga quien lo diga, frenar los

proyectos renovables es un error que a México le va a costar muy caro, y es un error basado en la creencia de que los combustibles fósiles van a garantizar la soberanía energética (cosa que es falsa), y que además contraviene dos principios básicos de desarrollo energético

que el presidente insiste en negar: Energía barata para todos, y medio ambiente sano para todos.

Como siempre, si llegaron aquí les agradezco de corazón la lectura, y como de costumbre, lávense las manos, y aguanten el piano. La ciencia neoliberal encontrará una vacuna y todos

podremos vivir más seguros en el “nuevo mundo” que vendrá después de esto, que es un mundo en el que la 4ª. emasculación no parece querer participar.