Thread by @lmendezgr

¿Qué está pasando con la extrema derecha en Europa? ¿Qué esfuerzos se están realizando para contener su avance y cuáles están siendo sus efectos? ¿Qué diferencias identificamos respecto a España? 🚨🇪🇺

🧵Abro hilo

La extrema derecha no es un fenómeno nuevo en el continente, si bien esta ola lleva fraguándose desde hace más de una década. Habiéndose mantenido (y subestimado) en algunos países desde s. XX como una opción marginal, se asociaba entonces generalmente a grupúsculos violentos.

Los populismos contemporáneos de extrema derecha en Europa han experimentado un crecimiento sostenido al que los países han respondido de forma diversa con aciertos y errores. Aquí vemos cómo ha ido evolucionando el apoyo electoral en cada Estado [2016 vs. 2019]

Hoy la extrema derecha nativista europea encuentra en el elemento anti establishment (exportación de la alt-right) un espacio de encuentro con formaciones de este entorno. Una visión identitaria excluyente adaptada a cada realidad nacional que estaría diluyendo sus diferencias👇

Pese a presentar distintas sensibilidades que en principio implicarían cierto distanciamiento, todas desean un pluralismo limitado con tintes autoritarios y totalitarios en base a su intolerancia ideológica y a su desprecio a las minorías, contribuyendo a un clima de hostilidad.

Aquí encontramos un buen resumen de los Gobiernos de los EEMM y de otros países de Europa (tabla sinóptica + explicaciones detalladas) Se emplea un sistema de clasificación basado en derecha, izquierda y opciones de centro.
cidob.org/biografias_lid…

Francia y Alemania tienen una posición bastante más combativa contra formaciones que no se adaptan a los valores constitucionales y a su Estado de Derecho (en comparación con otros países) aunque en Francia la extrema derecha seguiría teniendo una presencia mediática importante.

En este contexto la extrema derecha seguiría sumando apoyos. Según las previsiones, el margen electoral entre Macron y LePen podría estrecharse peligrosamente y llegar al empate en la segunda vuelta. Mientras tanto, se han producido estos graves incidentes:

Cabe destacar tres sucesos no relacionados entre sí en el pasado mes de marzo, de los que sin embargo podemos extraer una lectura conjunta, en palabras de Alemanno (Cátedra Jean Monnet) pues estos apuntarían a un 'reordenamiento inminente del paisaje político de la UE'👇

1. El Gobierno francés disolvió el grupúsculo Génération Identitaire 2. Los servicios secretos alemanes (Bfv) decidieron poner bajo vigilancia al partido Alternativa para Alemania (AfD) 3. El partido de Viktor Orban salió del grupo parlamentario Partido Popular Europeo (PPE)

De hecho, en Alemania los partidos se han posicionado con firmeza frente a AfD que como principal fuerza de la oposición trata de enturbiar el ambiente político con provocaciones. Respecto a los medios, podría decirse que vendrían marcando mayor distancia con esta formación.

Recientemente Alemania comunicó algo que debería hacer reflexionar a cualquier demócrata, un record de delitos relacionados con la extrema derecha desde el comienzo del registro, incluyendo atentados. Pasando a catalogar a la ultraderecha como la principal amenaza a su seguridad.

Recordemos también que la justicia griega ilegalizó a Amanecer Dorado, formación que había irrumpido con fuerza rentabilizando las anteriores crisis económicas en un patrón reconcible. Esto supuso finalmente el primer golpe importante a esta nueva ultraderecha europea.

En la vecina Portugal el partido de extrema derecha Chega también estaría tratando de ampliar su base electoral tras un acelerado ascenso. Sin embargo, desde la socialdemocracia y el centro democrático se mantienen reticentes a considerarles en ningún tipo de coalición.

En el caso de política italiana, su histriónica extrema derecha ha permeado con facilidad al formarse, en su momento, un gobierno con los ultraderechistas nacionalistas de la Liga y los populistas euroescépticos de Movimiento 5 Estrellas. Un cuadro absolutamente dantesco.

Ahora Hermanos de Italalia (Fdi) aparecen como la principal fuerza de la oposición mostrándose como una orgullosa formación ultraconservadora y ultratradicionalista. Justo hoy desde Vox se ha expresado voluntad por tejer relaciones con estos, frente a sus enemigos comunes.

Incluso en la avanzada Holanda, el Partido por la Libertad (PVV) actúo como muleta del Gobierno de Coalición entre liberales conservadores escorados hacia la cada vez más a la derecha y democristianos conservadores hace ya una década. Hoy es la principal fuerza en la oposición.

Lejos de la idealización de los países nórdicos, lo cierto es que en Suecia la extrema derecha no ha sido ninguna ficción (véase las investigaciones de Stieg Larsson) En el caso de esta formación, en sus inicios, identificándose una vinculación directa a movimientos neonazis.

Con esto, tampoco hay que perder de vista a países como Hungría, Eslovaquia, Rumanía, Bulgaria o Croacia. Ni a una ferviente católica Polonia donde una derecha nacionalista con un discurso anti-inmigración alimenta ese odio como revulsivo ante su particular turbulenta historia.

La figura del 'mitläufer' ciudadanos que entonces miraron a otro lado convirtiéndose en colaboracionistas resulta clave para entender por qué las personas caen en la equidistancia y cómo podemos actuar, por tanto, ante escenarios similares. elconfidencial.com/mundo/europa/2…

Algo fundamental que señala este artículo es la memoria europea, aportando esta lúcida reflexión: 'Hay una correlación entre la presencia y la aceptación de la extrema derecha y el trabajo de la memoria. Allá donde no se ha hecho, es más fácil que la ultraderecha arraigue'

La clave en el futuro estaría, por una parte, en el trato que la derecha mayoritaria decida darle a estas formaciones: Bien aislándolas (cordón sanitario como remedio puntual y temporal) Bien posibilitando que estas sean susceptibles de integrarse en coaliciones de gobierno.

Por otra parte, en las soluciones que la izquierda logre articular como alternativa creíble para contener su crecimiento. En este sentido, esta visión de los verdes europeos (donde la retórica y contranarrativa no puede sustituir al proyeco de gobierno) resulta inteligente👇

Pero al margen de una progresiva (y quizás insuficiente toma de conciencia) todavía no existe una estrategia conjunta europea orientada a abordar el problema que supone la extrema derecha para el continente. Por tanto, muchos de estos esfuerzos podrían estar llegando tarde.