HILO. Algunas reflexiones sobre la elección en #Torreón.
1. Morena ganó más de lo que parece. Muchos respiraron aliviados porque perdió la alcaldía pero no ven el fondo: que es la segunda fuerza local y que este resultado lo obtienen a pesar de los problemas con la candidatura.
1. Morena ganó más de lo que parece. Muchos respiraron aliviados porque perdió la alcaldía pero no ven el fondo: que es la segunda fuerza local y que este resultado lo obtienen a pesar de los problemas con la candidatura.
Consideremos: Si Luis Fernando Salazar aprueba la fiscalización del INE, hace dos meses de campaña en lugar de uno, evita problemas internos por la sustitución de candidato y compite frente a los otros candidatos y no de manera indirecta, hubiera cerrado la distancia con el PRI.
¿Cómo lo sabemos? Porque con todos los problemas que tuvo la candidatura, Morena saca más de 100 mil votos. Saca más que el PRI en la elección de 2018. Esta elección no es una derrota de Morena, no cuando desbanca al PAN como segunda fuerza.
Entonces, el avance de Morena no es por los candidatos, sino por la fuerza del movimiento. Es la misma fuerza que explica cómo ganó las gubernaturas en lugares ya hartos de ser gobernados por PRI o PAN. En #Torreón no les alcanzó pero eso no significa derrota.
El PRI recupera terreno perdido en 2018 y se consolida rumbo a 2023. Con más de 130 mil votos, Román Cepeda saca el segundo total histórico, pero en una elección que comienza cerrada entre 3 candidatos (PRI, PAN y Morena). Zermeño sacó 146 mil en 2018, pero Morena no pesó tanto.
El bipartidismo PRI-PAN ha sido sustituido por uno PRI-Morena con el PAN como tercera fuerza que tiene un pero focalizado. Sin embargo, estos reacomodos no son permanentes, el PAN puede tener una recuperación en los próximos años, ya sea a costa del PRI o a costa de Morena.
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