🧵🧵🧵 Nos indignamos con la facilidad con la que un joven de 18 años compra un rifle AR-15 en Estados Unidos para masacrar a 19 niños, pero ¿qué tan fácil es hacerlo en CDMX?
Va un HILO con la #NaciónCriminal de esta semana con @LuisCardenasMx en @MVSNoticias.
Va un HILO con la #NaciónCriminal de esta semana con @LuisCardenasMx en @MVSNoticias.
En marzo pasado buscaba a un técnico que pudiera darle a un minisplit una segunda vida.
Un contacto me habló del grupo de WA “Ventas y Servicios GTA”, que prometía tener todo tipo de oficios. En su promoción faltó decir que, entre ellos, se encontraría el de traficante de armas.
Un contacto me habló del grupo de WA “Ventas y Servicios GTA”, que prometía tener todo tipo de oficios. En su promoción faltó decir que, entre ellos, se encontraría el de traficante de armas.
El grupo parecía uno de tantos. Una tierra virtual repleta de cerrajeros, plomeros y modificadores de autos.
Pero en abril llegó un nuevo tipo de ofertante: vendedores de armas de juguete que cualquiera, a simple vista, confundiría con pistolas y revólveres auténticos.
Pero en abril llegó un nuevo tipo de ofertante: vendedores de armas de juguete que cualquiera, a simple vista, confundiría con pistolas y revólveres auténticos.
Luego, el grupo de Whatsapp “Ventas y Servicios GTA” alojó a traficantes de animales exóticos y, finalmente, dio el salto a su última y peor versión: la de traficantes de armas de alto poder.
Poco a poco, la gente de oficios honestos huyó del grupo y dejó esa tierra virtual a gente que se identificaba como supuestos integrantes de cárteles, militares activos de dudosa reputación y policías sucios en retiro.
Nadie era tímido con el arsenal a la venta: abundaban las “matachilangos” —es decir, la escuadra 9 milímetros con la que se cometen 7 de cada 10 homicidios en la Ciudad de México—, así como los calibre 38 y 40, además de marcas como Beretta, Glock y Smith & Wesson.
Esas se anunciaban con entrega rápida. Ese mismo día, si se requería. Pero las otras, las de alto poder, podía tardar en llegar a manos del comprador chilango de entre 3 a 7 días, porque muchas —decían— venían directamente de Estados Unidos.
Para compensar la espera por esa arma usada, los vendedores recudían el precio hasta la mitad en comparación con el valor en las tiendas del otro lado de nuestra frontera.
Esas incluían a la poderosa Barret 50 —la que rompe hasta blindajes nivel 8—, la AK-47 o “cuerno de chivo” y el rifle AR-15, infame en los últimos días porque fue el modelo elegido por el tirador en la masacre de #Uvalde, Texas, que terminó con la vida de 19 niños.
Aquella arma fue adquirida legalmente por el asesino, un joven de apenas 18 años que acudió a un local texano que estuvo involucrado hace 13 años en una operación para dotar de más de 10 mil balas a un cártel mexicano.
En aquel entonces, tres personas compraron en el local Oasis Outback municiones de alto poder para llevarlas hasta Piedras Negras, Coahuila.
Era 2009, año en que Los Zetas eran el cártel fuerte en el noreste mexicano.
Era 2009, año en que Los Zetas eran el cártel fuerte en el noreste mexicano.
Una AR-15 en Texas parece tener altas probabilidades de seguir dos caminos:
uno que lleve a manos de un tirador solitario en Estados Unidos y otro que lo haga parar en manos de un sicario en México.
uno que lleve a manos de un tirador solitario en Estados Unidos y otro que lo haga parar en manos de un sicario en México.
El AR-15 costó al tirador de Texas unos 40 mil pesos, según la prensa local.
Pero en el grupo de WA costaba apenas 30 mil pesos. El vendedor, un tal “Tolteca”, lo ofrecía con garantía: mirilla perfecta y percutidor al 100. Una ganga, decía, para quien busca matar con precisión.
Pero en el grupo de WA costaba apenas 30 mil pesos. El vendedor, un tal “Tolteca”, lo ofrecía con garantía: mirilla perfecta y percutidor al 100. Una ganga, decía, para quien busca matar con precisión.
Aquella arma, marca Ruger engendrada en Arizona, estaba lista para su nuevo dueño.
“Tolteca” aseguró que la tenía guardada en algún lugar en Iztapalapa, cerca de los límites con Valle de Chalco.
“Tolteca” aseguró que la tenía guardada en algún lugar en Iztapalapa, cerca de los límites con Valle de Chalco.
La transacción, dijo, sería rápida: nos veríamos —irónicamente— en el Metro La Paz y cuando él estuviera seguro de que yo tenía el dinero conduciríamos hasta su bodega.
Si quería, para mayor seguridad, podía llevar un acompañante, pero sólo uno y desarmado.
Si quería, para mayor seguridad, podía llevar un acompañante, pero sólo uno y desarmado.
Bastaron 30 minutos para pactar la compra en el oriente de la Ciudad de México de un rifle AR-15.
Sobra decir que no me presenté a la cita: más de 20 llamadas perdidas me hicieron saber que el vendedor no mentía y sí esperaba insistentemente concretar la transacción.
Sobra decir que no me presenté a la cita: más de 20 llamadas perdidas me hicieron saber que el vendedor no mentía y sí esperaba insistentemente concretar la transacción.
Apagué el teléfono con dos certezas apretadas en el pecho.
Uno: que en México nos sorprendemos con lo sencillo que es conseguir armas de alto poder en Estados Unidos sin querer ver la facilidad para hacer lo mismo en nuestro propio territorio.
Uno: que en México nos sorprendemos con lo sencillo que es conseguir armas de alto poder en Estados Unidos sin querer ver la facilidad para hacer lo mismo en nuestro propio territorio.
Dos: que una AR-15 en la capital mexicana sigue esperando dueño, lista para la siguiente masacre.
Dejo acá el enlace al pódcast para escuchar la historia completa:
mvsnoticias.com/entrevistas/20…
Y acá la versión en Youtube:
Nos escuchamos cada miércoles, a las 09:00 en vivo, para una nueva #NaciónCriminal con @LuisCardenasMx.
Fin del HILO. 🧵🧵🧵
mvsnoticias.com/entrevistas/20…
Y acá la versión en Youtube:
Nos escuchamos cada miércoles, a las 09:00 en vivo, para una nueva #NaciónCriminal con @LuisCardenasMx.
Fin del HILO. 🧵🧵🧵
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