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Un buen ejemplo de cómo está usando el capitalismo verde la doctrina del shock por el cambio climático es la Alemania de Merkel, que ya toma medidas que ensalza la prensa del capital. 
La Alemania de Merkel está sumida en plena recesión y estaba necesitada de un plan de “estímulos” financieros y otras medidas para poder seguir poniendo la maquinaria en marcha.
Y la doctrina del shock del cambio climático ha sido la excusa perfecta para un plan de 54.000 millones de euros que pueda reactivar la economía (verde) del capital en Alemania.
Ese plan trae, por supuesto, subidas en impuestos que toca pagar al currela de a pie y a las familias de la clase explotada, como un incremento del precio del combustible, tan necesario desde el transporte hasta la calefacción.
Es el timo perfecto para seguir explotando a la clase trabajadora desposeída y volver a meter dinero público en los negocios de la gran industria y, de paso, maquillar la recesión con medidas económicas internas en Alemania.
De las 100 empresas que causan el 70% del cambio climático de origen antropogénico nadie quiere hablar y mucho menos pedirles responsabilidades y que se hagan cargo del coste económico de la transición “verde”. decolonialatlas.wordpress.com/2019/04/27/nam…
Es el mismo timo que, cuando empezó la recesión de 2008, los gobernantes como Sarkozy dijeron que había que “refundar el capitalismo”, mientras la clase del capital ha salido reforzada de esa crisis/recesión.
Así que el capitalismo (verde) ha decidido promover el sentimentalismo en torno al cambio climático, incluso utilizando a una menor con síndrome de Asperger, que conmueve más todavía.
No, esto no es ninguna “revolución”, ni "verde", ni "ecológica". Solo es la enésima oleada del capital para revitalizar sus negocios a las puertas de otra recesión, aprovechando un sentimentalismo masivo publicitado.
Hay que aprender de una vez que las luchas parciales (como lo es el ecologismo) no garantizan la lucha contra el capital. Al contrario, el capital sabe perfectamente cómo darles la mano y aprovecharlo en su beneficio y su devastación.
