Mis palabras no son para contradecirla, en absoluto, por eso pido que no le respondan en negativo.
La acción depende de la capacidad de organizar eventos y movilizar personas a esos eventos. Esos dineros y logistica no los tenemos hoy; y que los que desean participar no pueden asumirlos por su propia realidad.
Muchos dicen que los venezolanos claudicamos y somos sumisos, eso no es cierto. Lo que sí es cierto es que nadie se va a arriesgar en peores circunstancias que las anteriores para obtener el mismo resultado. La única motivación es ganar
Más allá del comentario político es la convocatoria de una acción lo que pesa. Sin medios de comunicación, sin electricidad, baja conectividad y segmentación social no es posible enviar un mensaje que unifique a la mayoría social.
Los venezolanos bajo represión y secuestro perdimos temporalmente la capacidad de incidir en los estamentos de poder, donde se toman las decisiones. De momento, la única presión viable es la denuncia política para aumentar los costos.
Esto engloba lo anterior, cualquier solución a lo más mínimo, desde el servicio de agua hasta los grupos armados solo es solucionable con el cambio de régimen; para esto se necesitan poderes que no tenemos por sí solos.
La dirigencia y activismo político es de múltiples posiciones y tendencias; pero lo que define la incidencia es el nivel de poder. La mayoría de dirigentes, líderes y activistas políticos perdimos la influencia en ascenso con esta estrategia del 233.
No incidimos, no participamos.
Seguir desde donde se pueda intentando romper las limitaciones.