Me queda más la duda, en la retorica ¿que sigue?
Se les están acabando los adjetivos, los denuestos y las palabras q intentan redefinir están sonando ya repetitivas
Son posturas políticas y opciones legales legítimamente reconocidas y válidas. Todas. Unas más efectivas que otras, pero legitimas.
Se empezaron a poner muy creativos cuando salieron con aquello del "golpe blando" y la "guerra híbrida".
"¿Me apoyas?" Bueno.
"¿Me criticas, me exiges, me reclamas?" Malo.
Del terminajo, así mal empleado, es la suma de dos falacias previas.
Curiosamente a diferencia de otras falacias, otros adjetivos, otros denuestos, el concepto de golpismo si es conocido y no es tan simple redefinirlo. El término "golpe de estado".
La audiencia a quién va dirigido estos sinsentidos los asimilan desde el sesgo con el q los formulan y seguramente se irá incorporando al léxico de respuestas absurdas. Como pasó con conservadores, fífis. Con fascistas aunque lo edulcoraron como "fachos".
Cuando empezaron a tildar a todo de fascismo, endulzadito como "facho", solo por no ir en línea con las ideas, ideologías, y más bien en su incongruencia la respuesta recibida es la que tiene tintes de fascismo. Pero.
Así seguramente pasará con "golpismo". Ojalá no.
Son palabras que tienen un pico en su uso por su reacción que causan y luego queda en el léxico regular.
O en su defecto un nuevo estimulo y repetir el ciclo. Así con el lenguaje también.
El inquilino del palacio lo necesita. Es una forma de seguir acotando y reconceptualizando la realidad según le convienen a él.
Por eso también este terminajo, perfecta y absurdamente mal empleado, apareció en la """entrevista""".
El siempre presente poder de las narrativas y su capacidad sobre la percepción y su influencia sobre la audiencia correcta.