HOY, HILO: El Megacono (o Megaabanico) aluvial del Pastaza. Una morfología fluvial única en el Holoceno mundial. 
Los grandes nevados ecuatoriales-andinos vierten parte de su escorrentía, deshielos y sedimentos hacia el Oriente. Esto es muy importante en una región con una de las mayores densidades de ríos por Km2 del mundo y resulta en un elemento modelador del relieve de primer orden.
Las incisiones en los paquetes de sedimentos y las deposiciones de los mismos, a veces a miles de kilómetros, son visibles desde el espacio con mucha claridad, así como los elementos glaciáricos asociados a los nevados.
Estos cauces pasan de una media de 3.000msnm a 200msnm en menos de 100 Km. La enorme cantidad de sedimentos han producido la deposición de centenares de Km³ de material al borde del orógeno desde su transformación en Cuenca de Antepaís.
Al Noroeste, el material se reparte entre los cauces de los ríos Aguarico, Coca, Napo y Payamino. Al Sur, el Pastaza recoge el sedimento producido en el centro de la Avenida de los Volcanes, realizando una hendidura que desemboca la Amazonía.
Cuando llega a su desembocadura Andina, produce uno de los mayores abanicos aluviales de Suramérica, el Megacono aluvial del Pastaza de la Cuenca de Antepaís. El valle del río Upano, que recoge el material del Sangay es subsidiario del río Pastaza.
Los megaconos aluviales se forman como depósitos en forma de abanico de gran extensión (>500Km) y baja pendiente que constituyen significativos volúmenes deposicionales en complejos patrones producidos por las corrientes que arrastran el material.
Se originan en un solo punto conocido como “apex” o ápice salida de una gran red de drenaje proveniente de una cordillera. Aunque los megaconos son similares a cualquier otro abanico fluvial por su forma idéntica, se distinguen de estos por su mucho mayor tamaño.
Los megaconos han sido examinados en detalle en la geomorfología de Suramérica, África e India, casi siempre en cuencas de antepaís. Esto demuestra su formación dinámica no dependiente tanto del clima como de las características fisiográficas de la cuenca que los acoge.
El material sedimentario se deposita en el ápice y se producen grandes barrancos y terrazas fluviales de gran potencia. Los hay terminales, donde el agua se evapora o infiltra en un sistema fluvial produciendo en este caso un abanico fluvial deltáico en el interior de una cuenca.
Ese es el caso del delta del Okavango. También Puede retransformarse en una cuenca propia, como es el caso del delta interior del río Níger o continuar de una forma más habitual, como es el caso de los megaabanicos aluviales de cuenca de antepaís andinos.
Los modernos paisajes de megaconos se encuentran en las principales cuencas de antepaís. Estas son tres regiones además de la del Pastaza: las llanuras del Chaco central en el Norte de Argentina y occidente de Paraguay, como la zona más grande con megaconos seriados;
en las llanuras de Beni y los Llanos de Moxós de Bolivia se constata la existencia de megaconos; la otra región es Los Llanos de la cuenca del Orinoco con algunos pequeños megaconos activos. Por su tamaño son producidos por procesos geomorfológicos diversos y largos en el tiempo.
El del Pastaza tiene a partir de su ápice complejos procesos de avulsión que han modificado la acumulación del sedimento en sentido Sureste. Sus depósitos varían desde arenas y gravas hasta arcillas y limos intercalados, todos de origen volcánico y procesado fluvial.
Se encuentra en regresión frontal. Hay una línea de deslizamiento de 500 m que separa la zona Subandina de la Llanura Amazónica. El deslizamiento en erosión remontante se localiza a todo lo largo de las fallas de corrimiento frontales, cuyo levantamiento se estima en >1cm/año.
El mega-cono aluvial del Pastaza se desarrolla debido a estos procesos hacia la cuenca del Marañón desde mediados del Cenozoico, siendo considerado como uno de los abanicos aluviales continentales más grandes y antiguos del mundo, aún en activo.
Su actual forma tiene que ver con las pulsaciones climáticas cuaternarias sobre el material acumulado por los volcanes. Los cambios climáticos producidos en el Plio-Pleistoceno afectaron directamente la forma y el comportamiento de las morfologías fluviales suramericanas.
Los ciclos Cuaternarios han influido en la magnitud, frecuencia y estacionalidad de las precipitaciones y escorrentías, en la sedimentación en los megaconos de las tierras bajas orientales Andinas y en las llanuras aluviales, así como en la cubierta vegetal de las cuencas.
El Pastaza reduce su velocidad en las inmediaciones de la ciudad de Mera, donde deposita el sedimento. Las avulsiones del cauce son muy comunes y la anastomización es rápida y voraz. Muchas poblaciones tienen problemas de asentamiento en esta zona.
La Formación Mera está muy disectada por el Pastaza y sus terrazas son testigos de esas pulsaciones climáticas Cuaternarias. Está cubierta por depósitos volcánicos datados en 40,580+/-1,030aAP. Mera-Upano y el ciclo de Irion son marcas geomorfológicas de la bioclimatología.
Durante el glaciarismo las cumbres se cubren de nieve y quedan congelados los procesos de transporte sedimentario, quedando reducidos los ríos. Con el deshielo, grandes cantidades de material arrasa los cauces y deposita material.
Se produce un ciclo de excavación, inundación, reasentamiento y desecación que dura miles de años (el ciclo de Irion). Los volcanes por si mismos no tienen la suficiente recurrencia para desmantelar los megaconos, pero el período interglacial revitaliza la acumulación y erosión.
El del Pastaza está considerado entre los cinco más amplios en cuanto a superficie de captación con 60-70,000Km² (el primero es el Okavango con 180,000Km² ) y muy similar al del Pilcomayo. La superficie del Megacono del Pastaza es la más grande de la Tierra, con hasta 70,000Km²
Contiene sistemas de canales, lagos, deposiciones, y todo tipo de elementos fluviales de características dendríticas, meandriformes, anastomosadas y avulsionadas, en un ambiente de pluvisilva que no deja en ocasiones visualizar con propiedad sus formas y características.
¿Os acordáis del Sistema Pebas?
Durante el Mioceno al oriente de los protoandes había un conjunto arracimado de megaconos, alguno de ellos de gran tamaño, que se inclinaban y fluían hacia el cuerpo de agua interno, a lo largo de toda la costa.
Durante el Mioceno al oriente de los protoandes había un conjunto arracimado de megaconos, alguno de ellos de gran tamaño, que se inclinaban y fluían hacia el cuerpo de agua interno, a lo largo de toda la costa.
A comienzos del Plioceno la cordillera oriental de los Andes del Norte fue rápidamente levantada y se produjo como consecuencia un aporte sedimentario muy alto. Este aporte fue progresivamente aumentando y generando nuevos megaconos, así como ensanchando el del Pastaza.
El cierre del Istmo de Panamá afectó al clima regional. Las formas fluviales se convirtieron en dominantes y los humedales desaparecieron, así como los megaconos que bordeaban los cratones, completamente eclipsados por el sedimento masivo que colmataba la cuenca desde el Oeste.
En el caso del Pastaza, las formaciones Mesa y Chambira rompieron el dique cretácico en algún momento del Mioceno-Plioceno como consecuencia del cambio del clima más frío y estacional, la constricción de la ZCIT al área del Puyo, el cierre del Istmo de Panamá, y la orogénesis
Se pueden distinguir cuatro regiones diferenciadas: en cabecera, un tramo avulsionado, escabroso, aterrazado y brusco, donde la erosión de la superficie Mera se hace evidente; al Suroeste, un tramo de megacono abandonado; al Sureste otro sistema parcialmente abandonado.
La parte más alejada del ápice consiste en una llanura de inundación compuesta de pantanos y selva con una pendiente aún menor (0,2m/Km). El proceso de erosión sigue muy activo y afecta a las vías de comunicación del valle del Pastaza, dividiendo la zona Subandina de la Amazonía.
El Megacono aluvial del Pastaza es uno de los pocos que aún se encuentra en funcionamiento en el Mundo, y quizá el único que tiene ciclo erosivo-acumulativo en los Andes. En comparación con el Marañón, de quien es tributario, produce la mayoría del sedimento de la cuenca.
Al comparar sus morfologías se comprueba que el Marañón no ha rellenado por completo la Cuenca de Antepaís que le correspondería y quedan al descubierto las formaciones que en el Pastaza subyacen por debajo del sedimento o han sido arrasadas por la acción abrasiva del mismo.
En el Marañón produce una constricción fluvial en las formaciones cretácicas geosinclinales Tiyuyacu y Tena en los Pongos. La cuenca del Marañón no tiene volcanes que añadan material ni el suficiente poder erosivo para romperlos totalmente o cubrirlos.
El estudio de las pulsaciones climáticas permitiría saber más; incluso podríamos conocerlas a partir del estudio de los sedimentos del depósito del abanico submarino del Amazonas. El estudio de otros conos aluviales aportaría datos de cómo se forman y cuál es su ciclo de vida.
Disculpen las imágenes sin fuente y los memes bobos: esto es tuiter. Si quieres saber más, te recomiendo que sigas las publicaciones de Patrice Baby, Räsänen o Isabel C. Bernal Carrera que son las autoridades en la materia, y en menor medida, mi tesis: eprints.ucm.es/57581/
Bibliografía seleccionada
Baby, P. et al. 1997; 2004, Barragán, R. et al. 2004; Bernal Carrera, I.C. 2009; Bernal Carrera, I.C. et al. 2011; Bés de Berc, S. et al. 2004; Buytaert, W. et al. 2006; Clapperton, C.M. 1993a; Dunne, T. & Mertes, L.A.K. 2007; Guyot, J.-L. 1993;
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Hall, M. & Beate, B. 1991; Horton, B. K. & DeCelles, P. G. 2001 Huggett, R. H. 2007; Iriondo, M. et al. 2000; Laraque, A. et al. 2004; Marengo, J.A. 2011; Moquet, J.S. et al. 2018; Räsänen, M.E. et al. 1990, 95; Roddaz, M. et al. 2010 Wilkinson, M.J. et al. 2010;
Muchas gracias por llegar hasta aquí.
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