Thread by @AdAbsurdumBlog

🔞¿Sabes qué significa «ajipedobes»?🤷‍♀️🤷

Si lo sabes, ya sabrás la relación que tiene con un supuesto lío de faldas "real" de finales del siglo XVIII. Pero si no lo sabes, te lo contamos:

Seguro que has oído hablar de la supuesta relación entre la reina española María Luisa de Parma, esposa de Carlos IV, y el valido Manuel Godoy.
Durante el mandato de Godoy, buena parte de la población atribuyó su rápido ascenso y su poder a una relación ilícita con la reina.

Al principio no eran más que meros rumores, pero llegó un momento en que no quedaba nadie en Madrid que no tuviera noticias del supuesto triángulo amoroso. Y pronto empezaron a circular coplillas dedicadas al affaire de la reina y el valido.

Curiosamente, entre esas coplillas solía aparecer un término extraño: «ajipedobes». Un ejemplo:

Mi puesto de Almirante
me lo dio Luisa Tonante,
Ajipedobes la doy
Considerad donde estoy.
Tengo con ella un enredo,
soy yo más que Mazarredo.

¿Qué leches significa eso? Pues si no tienes la suficiente agudeza visual, la pista definitiva te la da otra coplilla de la época:

Mira bien y no te embobes,
de bastante ajipedobes.
Si lo dices al revés,
verás lo bueno que es.

¿Todavía no? La misma coplilla terminaba tal que así:

La realeza te hizo
muchos favores
y tú sólo le diste
ajipedobes .
Anda, Luisa,
pronúncialo a la contra;
verás qué risa.

Ya lo tienes, ¿no?

En efecto, la palabra «ajipedobes» se introdujo en las coplillas para hacer una burla del valido y explicar cómo había llegado tan alto haciendo supuestos favores sexuales a la reina.
Ahora bien, ¿qué hay de cierto en todo esto?

Pues muy probablemente nada. Este tipo de relaciones extramaritales eran muy comunes en la época debido a la política de matrimonios concertados. Y no se veía con malos ojos que un hombre o una mujer casada tuviera amantes siempre y cuando lo llevara con una mínima discreción.

Sin embargo, aunque este triángulo tradicionalmente se ha dado por cierto en ese contexto, en realidad los historiadores actuales parecen convenir que no se trataría más que de rumores que hizo circular, sobre todo, el hijo de Carlos IV, Fernando (futuro Fernando VII).

¿Y qué interés podía tener el joven Fernando en ir por ahí hablando de una supuesta relación entre el valido y su madre? Pues básicamente ahondar en la campaña de desprestigio que el príncipe tenía contra su padre, al que consideraba débil, y Godoy, uno de sus mayores enemigos.

Por tanto, no se trataría más que de una fake new, un bulo que hizo volar la imaginación de los españoles y que acuñó un término tan curioso como «ajipedobes».

Así que, solo podemos terminar con «ajipedobes» para todos.