Me encanta cuando solitos ponen los datos con los que se les puede responder su retorica baratita. Por ejemplo el gran timonel, eterno preocupado de su imagen. Nada importa en su vida más para él, que su propia imagen.
Nunca olvidar. Su plural es el del narciso, así, casi siempre cuando pluraliza se refiere a él mismo. Plural mayestático.
Entonces acá su plural es "gobierno". ÉL es "el gobierno".
Esta es la gráfica que hace girar su corazoncito megalómano. Por dos puntitos esta arriba de Scott Morrison de Australia.
¿en serio quería vender su apoyo en redes, trayendo más de 16,336 (36.40%) seguidores que no han hecho absolutamente nada en 6 meses? Sin mencionar ese curioso "valle" en sus primeros 10,000 seguidores... 😏
Entre el seguidor 3,000 y 7,500 (aprox), tiene puro mueble por seguidor 😂
Un rasgo de los narcisos megalómanos es su escasa, o nula, empatía: no hay identificación con el prójimo, no hay auténtico interés ni ven al otro como su similar.
Pero además son excelentes histriones, fingen algo parecido a la empatía para encontrar ellos SU satisfacción.
Su histrionismo es siniestro, a partir de simular su comportamiento saben como aparentar algo que no sienten, pero sirve para satisfacción de su ego y mantener el estímulo en su audiencia. Manipulación pura y dura.
Lo de hoy se llama jajaganda.
Esos que renunciaron a ser críticos, a juzgar con dureza y certeza, a exigir, a evidenciar, a exhibir, y pasaron a ser porristas, zalameros, paleros. Propagandistas. Publirrelacionistas.
CÓMPLICES del régimen.
Esos.
La risa, constituida en burla, ejercida como ejercicio de denuesto por parte del PODER, es una forma de cooptar y atacar.
Ante la audiencia correcta la humillación, trasvestida de risa mediante la burla, "salta" resistencias cognitivas y la recibe sin repelar. Sin oponerse.
El efecto pernicioso de la burla como ejercicio de escarnio, denostación y humillación, dirigido a objetivos específicos es parte del constante ejercicio de “combate” ideológico que busca ridiculizar y burlarse de quienes no comparten la afinidad o simpatía. Los "adversarios".