1/ Una de las peores cosas que nos puede ocurrir a lo largo de nuestra vida es ser diagnosticados de cáncer. Pero si hay algo peor es ser diagnosticados de cáncer en un país sin sanidad universal ni gratuita.
Hoy, Estados Unidos, cáncer y bancarrota.
2/ El caso de EEUU es único en el mundo: sin sanidad universal, la mayoría de la población debe procurarse un seguro privado de salud. Pese a esto, el gasto público en salud es uno de los más altos del mundo.
3/ La sanidad "pública" comprende, fundamentalmente, dos modelos: medicare y medicaid, el primero destinado a mayores de 65 años (y otros enfermos como pacientes con fallo renal terminal), el segundo destinado a las rentas más bajas. Entre ambos cubren al 35% de la población.
4/ Pero incluso así, no es suficiente. Medicare, que engloba a un 20% de la población, solo cubre, de media, la mitad de los gastos médicos de los pacientes (la otra mitad la deben pagar ellos "out of pocket".
Alrededor del 10% de estadounidenses no tiene seguro médico.
5/ De este tema se ha hablado largo y tendido y estoy seguro de que hay mil hilos que lo pueden contar mejor que yo. Pero hoy voy a hablar de qué ocurre en un caso concreto: los pacientes de cáncer.
Y es que el tratamiento de esta enfermedad no es precisamente barato.
6/ Muchos seguros, de hecho, tienen un tope de gastos a cubrir, a partir de lo cual es el paciente quien debe hacerse cargo de las facturas. Y esto, para muchas personas, solo puede significar la ruina.
7/ En 2018 un estudio del American Journal of Medicine descubrió que el 42,4% de los nuevos enfermos de cáncer perdían todos sus ahorros en los 2 primeros años de tratamiento: bigthink.com/politics-curre…
8/ (recordemos que en EEUU los ahorros de tu vida incluyen, en muchos casos, la pensión de jubilación)
9/ Además de perder todos los ahorros, otro metaestudio descubrió que, entre los supervivientes, el 33% acababa incurriendo en deudas médicas, y el 3% acababa en bancarrota. De los que se endeudaban, un 13% incurría en deudas superiores a los $50.000: healthaffairs.org/doi/10.1377/hl…
10/ Ah, por cierto, la inmensa mayoría (85%) tenía seguro médico privado:
11/ El estrés financiero, además, supone un riesgo de muerte añadido para estos pacientes de cáncer. Este otro estudio determinó que aquellos enfermos que se declaraban en bancarrota tenían un riesgo de morir 1,79 veces superior a los que no: pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26811521/
12/ En una sociedad donde la sanidad no es universal, ni entéramente pública, ni gratuita para el paciente un diagnóstico de este tipo significa, en gran parte de los casos, la ruina económica y el endeudamiento por decenas de miles de dólares.
13/ Y no es que el cáncer sea una enfermedad rara, precisamente. Se estima que, a lo largo de su vida, 1 de cada 2 hombres y 1 de cada 3 mujeres estadounidenses serán diagnosticados de cáncer: cancer.org/cancer/cancer-…
14/14 Cuando vengan a venderos las bondades de la sanidad privada, cuando os digan que con lo que pagamos en impuestos podríamos contratar un seguro privado, recordad esto. Recordad lo que está en juego.
Peace out! ✌️
• • •
Missing some Tweet in this thread? You can try to
force a refresh
Aprovecho para dar las gracias a toda la gente que me sigue y que comparte mis hilos :)
El mes que viene cumpliré 14 años aquí en tuiter, pero lo de este pasado año ha sido una locura; he pasado de 11.000 seguidores hace justo un año a 75.000. Todavía me cuesta creerlo.
1/ El caso de la Torre Grenfell es el prefecto ejemplo de las consecuencias del neoliberalismo; delegar las responsabilidades del estado en el propio sector privado, dejando que sean las constructoras quienes certifiquen las medidas de seguridad.
2/ Pero el caso del famoso edificio londinense no es el único ejemplo de esto. ¿Recordáis cuando los gobiernos de todo el mundo paralizaron todos los vuelos del Boeing 737 MAX, dejando en tierra a toda la flota?
3/ Resultó que el modelo de avión en cuestión tenía un fallo de diseño en el software de vuelo (MCAS). ¿El resultado? Dos accidentes en apenas seis meses que provocaron 346 muertos.
1/ Esta es la historia de una epidemia que ha dejado cientos de miles de muertos, de conspiraciones farmacéuticas y de oligarcas construyendo un imperio sobre el dolor. No, no os hablo del coronavirus.
Hoy vengo a hablar de la epidemia de opiáceos en Estados Unidos.
2/ Mucha gente no es consciente de la cantidad de personas que viven con dolor crónico. Se calcula que entre el 20 y el 30% de los estadounidenses convive con el dolor cada día. Para muchos de ellos los analgésicos y antiinflamatorios comunes no son suficientes.
3/ Hasta mediados de la década de los 90 los médicos en EEUU eran reacios a prescribir opiáceos por ser potencialmente adictivos y crear tolerancia. Pero entonces algo cambió y los facultativos del país empezaron a prescribir estas sustancias como si fuesen caramelos.
Este vídeo tiene más red flags que un circuito de Fórmula 1. Que si EsPaña (con acento en la P) necesita un capitán, que si todos los políticos son iguales, que si la hostelería y los empresarios... amén del tufilloa vídeos similares de Ucrania o Venezuela.
Indaguemos un poco.
La chica del vídeo es una tal Tatiana Ballesteros, escritora y criminóloga que trabaja en el ámbito audiovisual. Según la biografía de su página web empezó su andadura en los medios en el programa de radio "Noche de autos":
Noche de autos se emitía en una emisora llamada "Radio Ya". Una visita a su página web nos ofrece sutiles pistas de qué pie cojean: