Thread by @ElHombreMalo

Ahem... empecemos

https://twitter.com/ElHombreMalo/status/1375144890913456133

Este señor es Abraham Levitt. Abogado, hijo de un rabino ruso y una señora austriaca. Su papel en esta historia es mínimo pero crucial; creo una promotora inmobiliaria y la llamó Levitt&Sons

Este es el con los susodichos hijos, pero quien nos impora de verdad para esta historia es el de la izquierda, William. Alfred también lo peta... de adolescente ya diseñaba modelos de viviendas para la empresa. Pero William llevó las cosas más allá

Veréis, William sirvió durante la segunda Guerra Mundial en un cuerpo muy particular, los Sea Bees. Los Batallones de Construcción. Construction Batallions.

C B

Sea Bees

Al entrar EEUU en guerra con Japón se encontraron con un problema; los contratistas civiles que se encargaban de hacer cosas en las instalaciones militares de las islas del pacífico eran considerados personal enemigo no uniformado y por tanto no les protegía ninguna convención

Los Japoneses hicieron notar este punto ejecutando a todos los que se encontraban. Así que los EEUU crearon compañías de construcción militarizadas y uniformadas que fueron punteras en el desarrolló de técnicas de construcción prefabricada y en serie. William sirvió en ellas.

Al terminar la guerra William se trajo dos cosas en el petate; una metodología de construcción barata y rápida y el conocimiento de que los millones de veteranos tenían derecho a todo tipo de créditos blandos federales

La compañía de su padre tenía unos terrenos en Long Island y en el 47 consiguió licencia para urbanizarlos. En base a un diseño de una planta de Alfred, William ideó un sistema de construcción en serie que, en condiciones idóneas llegó a producir una vivienda terminada al día

Las cuadrillas (subcontratadas) se seguían según un meticuloso plan las unas a las otras, entrando en las casas para hacer su tarea y marchándose a la siguiente. Una cuadrilla de fontaneros podía hacer varias casas en un día y detrás venían los electricistas, etc.

Eran casas sencillas con un poco de parcela, rodeadas de valla blanca y más casas idénticas. Pero eran tremendamente dignas para una clase trabajadora americana que había crecido durante la gran depresión. Y baratas

¿Cómo de baratas? Entre el bajo coste de producción y los créditos federales, un veterano podía entrar en una con solo 400$ en la mano. Y se vendían amuebladas.

Durante las tres primeras horas, se vendieron 1.400 casas. La promoción inicial de 2.000 viviendas se amplió hasta las 6.000. Y el lugar, originalmente llamado Island Trees, pasó a llamarse Levittown. Había nacido el suburbio americano

Un sucio detalle que no conviene omitir es que solo se vendían casas a blancos. Ni negros, ni hispanos, ni nativos ni asiáticos... No es que William fuese racista 8o no más que la media), es que los créditos mismos estaban condicionados a que los barrios fuesen blancos

(la lógica perversa detrás de esto era que no se quería dar la imagen de que el gobierno metía a los veteranos blancos a vivir con... negros)

El caso es que tras el sonado éxito de Levittown, William siguió innov... ah, que no. Que no innovo. Que hizo exactamente lo mismo a las afueras Philadelphia. 17.311 viviendas unifamiliares en seis años. Seis modelos distintos

Y así hasta seis promociones distintas por varios estados y Puerto Rico durante los siguientes 20 años. La revista Time le llamó "El hombre que cambió la cara de América" y para bien o para mal, es cierto.

En un ejemplo de libro de lo que ahora llaman Integración Vertical, construyó sus propias fábricas de elementos constructivos básicos, como clavos, para mantener los costes bajos y los márgenes altos.

¿Y que tiene eso que ver con una señora de Moratalaz? Nada... aún

Veréis, Levitt&Sons construyó su última gran promoción americana el el 70, pero mientras allí boqueaban, en la España del desarrollismo alguien decidió que ese nombre daría empaque a la naciente suburbia cañí

Las características eran muy distintas, en lugar de clase obrera con créditos militares aquí se buscaba a profesionales bien pagados, a veces con prestamos de sus propias empresas. Vivienda de lujo en terrenos recalificados cerca de las vías de entrada a Madrid

Las calidades eran altas incluso para esas zonas. Los detalles se cuidaban al máximo y pronto, en una zona en la que los recién instalados vecinos empezaban a sentirse una élite respecto a Madrid, los dueños de un Levitt podían mirar un poquito por encima del hombro a los demás

Porque, amigo, sería suburbia pero era CAÑÍ. En unos años y cuando empezó a consolidarse el mercado secundario se empezó a notar que cuando un Levitt salía ala venta había PUÑALADAS por ser el primero en visitarlo

Y eso sigue siendo así hoy, cuarenta años después. Si en idealista en vez de ubicación escribes "Levitt" te salen todos los inmuebles que se publicitan como tales. Los que conocen Madrid sabrán reconocer las zonas, entre las que no está Moratalaz

Y digo que se publicitan como tales porque, tate, hay mucho "Levitt" que en realidad es un (puaj) Pryconsa o vete tu a saber. ¿Por qué pasa eso? ¿Qué define un Levitt a los ojos del vulgo poco vulgar que busca un Levitt no porque sea mejor sino porque es "mejor, ya sabes"?

¿Recordáis la metodología de William? Se basa en la estandarización de procesos y materiales. Pero la gente que compra una vivienda de segunda mano no ve el proceso y de los materiales sabe lo justo. Lo que ve.

El Ladrillo

En España la marca se caracterizó por utilizar durante años el mismo tipo de ladrillo, baldosa y azulejo. Sobre todo ese ladrillo vitrificado cuyo color es irregular y va del caramelo al chocolate.

Y hay gente, no poca, que cree que Levitt es la marca de los ladrillos. En serio

Como la señora de Moratalaz...

Chim Pum

Y aquí os dejo a Joseph Gordon-Levitt con un montón de ladrillos. No, no es familia, pero me ha salido al buscar imágenes y me he reído