Thread by @Damihibibere

CALENDARIO DE ADVIENTO

TERCER LUNES

"Sucedió que en aquellos días salió un decreto de César Augusto para que se empadronara todo el mundo (Lc 2,1)

La noticia del censo llegó a toda Judea, incluída Nazaret. Causó revuelo y preocupación y una fuerte impresión en José y María.

Ellos estaban totalmente absorbidos por el plan de Dios, por lo que estaban pendientes de todo cuanto acontecía, pues lo incluían en dicho plan. El edicto del César era para ellos una hoja de ruta.

los hebreos fueron los primeros en dar a la historia valor de Epifanía.

El tiempo es el encuentro de la revelación con la historia del hombre en una sucesión de acontecimientos que abarcan el pasado, el presente y el futuro, según una dirección y finalidad determinadas.

Hasta el surgimiento de Israel el hombre, atento al ritmo de los astros y de las estaciones (ritmo de nacimiento y muerte), buscaba su seguridad integrándose en ese ritmo y en su repetición anual.

Las religiones de la India, de China, de Persia están centradas en alcanzar una sabiduría, mucho más que en valorar la historia.

Para el hinduísmo el tiempo es cíclico, una eterna repetición (creación, destrucción, reencarnación).

Carece de valor, es un obstáculo que hay que superar para ser liberado.
Para Israel el tiempo es lineal tiene un principio y un fin.

La salvación está vinculada a una sucesión de acontecimientos que se desarrollan según un designio divino y

que se entienden en unod hechós únicos de la historia: la Encarnación, muerte y resurrección de Cristo.

Israel rompió con la concepción cíclica del tiempo, porque encontró a Dios interviniendo en la historia. Este encuentro tuvo lugar un día que cambió por completo su existencia

Si Dios interviene en la historia para manifestar en ella su voluntad, los acontecimientos históricos adquieren una dimensión nueva se convierten en portadores de las intenciones de Dios, dan a la historia un sentido, una dirección.

Otros pueblos no pueden interpretar la historia, porque no conocieron al Dios de la historia: no tienen conciencia del papel que les corresponde, no saben qué actitud tomar en los períodos de crisis.

No es el caso de la Virgen y San José.

Ellos se guiaba por los acontecimientos para conocer la voluntad de Dios, porque esta Voluntad era la encargada de realizar el plan divino y ningún acontecimiento podía alterarlo, más bien, Dios lo introducía dentro de sus planes.

Es cierto que no podemos predecir las intervenciones de Dios en la historia. Todo depende de su libre voluntad. Nadie puede exigir que Dios intervenga en este momento y no en el otro, más a menudo o menos. Es algo libre y gratuito.

Pero Dios sigue interviniendo en la historia,

Porque la historia es la Historia de Dios.

Y nosotros estamos en esa historia. Tenemos un papel en el plan de salvación, por lo que es seguro que Dios guiará ese papel de principio a fin.

Dios es aquel que puede intervenir en cada instante y puede cambiar el rumbo de los acontecimientos está cerca, está ahí, imprevisible en sus intervenciones y en sus efectos. Hay que esperar siempre su venida.

No hay que tener lo que pueda ocurrir y si ocurre,

hay que confiar en que Dios usará ese acontecimiento para que sus planes se cumplan. Por muy extraño que nos pueda parecer, Él se va a servir de ello.

Hoy podrías hacer memoria de los instantes en que Dios entró en tu historia. Aquél hecho que fue decisivo y providencial.

Y confiar en que seguirán ocurriendo otras muchas cosas que te guíen hacia la eternidad.

Oh, Señor, irrumpe en nuestras vidas. Que todo se haga o se deshaga conforme a Tu Voluntad. Márcanos el rumbo y condúcenos ahora y siempre hacia Ti. Amén.