Thread by @lmendezgr

Rusia alega «actividades militares biológicas de EEUU en Ucrania» para justificar la invasión.

La campaña de propaganda y desinformación del Kremlin, consistente en una conspiración que ya existía, ha sido impulsada por QAnon y amplificada por la extrema derecha estadounidense.

Parece mentira que algunos no aprendiesen nada de Irak 2003. No existe ningún indicio ni evidencia que sostenga esta idea. Se basa únicamente en la ridícula suposición de que todos los laboratorios que acepten fondos estadounidenses tienen el objetivo de crear armas biológicas.

Sabemos que la financiación de programas y laboratorios de salud pública para investigación de enfermedades zoonóticas (para mitigar estas amenazas) no es secreta. Propagandistas y conspiracionistas se agarran a esto para reforzar la creencia de que EEUU tiene «algo que ocultar».

También intentan sembrar dudas aprovechando que la OMS aconsejó a Ucrania destruir los agentes patógenos de mayor riesgo almacenados en laboratorios. Pero esto tiene fácil explicación. Si las instalaciones fuesen dañadas, toxinas y patógenos podrían propagarse entre la población.

Propagandistas profesionales rentabilizan el desconocimiento de las amenazas biológicas. Su púbico, putinistas nostálgicos del fascismo y desubicados de izquierdas en defensa de la cleptocracia. Necesitan desacreditar, se dedican a intimidar. Indistinguibles de la ultraderecha.

La cooperación transnacional para reducir el riesgo epidemiológico puede adoptar diversas formas. Aquí planteaba una serie de propuestas ante amenazas NBQR en la era post-covid, incluyendo como recursos centros de investigación públicos y privados👇

https://twitter.com/lmendezgr/status/1357379877490589698

Créanme cuando digo que la mayoría de estas personas ni siquiera sabe a qué se dedican estos laboratorios ni que los programas financian instalaciones que realizan pruebas diagnósticas, la creación de laboratorios veterinarios y el desarrollo de estudios de patógenos en animales.

Aquí reflexionaba sobre posibles escenarios de bioterrorismo y agroterrorismo. Estos laboratorios y programas nada tienen que ver con la utilización de agentes patógenos en conflictos de alta y baja intensidad por parte de actores estatales y no estatales.

https://twitter.com/lmendezgr/status/1410640315900387332

El Programa de Reducción de la Amenaza Biológica, como su propio nombre indica, no es una iniciativa dedicada a la investigación ofensiva. EEUU también ha colaborado con países postsoviéticos como Georgia, Azerbaiyán y Kazajstán. Ucrania ha recibido apoyo de EEUU, la UE y la OMS.

Moscú lleva construyendo décadas la narrativa de los biolabs, generando la impresión de que EEUU está desarrollando peligrosos experimentos cerca de sus fronteras. Nada es inocente. La conspiración se reactivó horas después de que Putin comenzara los ataques aéreos en Ucrania.

La conexión Moscú-Extrema derecha global (por más que lo nieguen) es evidente. Apoyo y financiación porque el objetivo es desestabilizar Occidente. Cuentas en ruso en Telegram que hoy difunden propaganda prorrusa previamente animaron a los convoyes anti vacunas en EEUU y Canadá.

@WarClandestine (suspendida) encendió la mecha el 24 de febrero con dos mapas que comparaban ataques aéreos rusos y «biolabs de EEUU en Ucrania». La cuenta pertenecía a un americano pro-Trump que durante años años difundió contenido de QAnon y también apoyó protestas antivacunas.

Este experto en QAnon explica cómo estos influencers trascienden ya la esfera doméstica llegando a modular la percepción del conflicto y en parte, también su desarrollo, y cómo China adapta esta conspiración a sus objetivos geopolíticos👇

https://twitter.com/_MAArgentino/status/1502712169175080960

Según medios serbios la Embajada rusa en Sarajevo apuntaló la conspiración en FB el 27, promovida activamente ahora por medios oficiales de propaganda del Kremlin como RT, canales prorrusos en plataformas no reguladas y desinformadores y tontos útiles de Occidente en Twitter.

Hace 2 semanas todo esto ya se movía en Telegram y 8chan con cientos de miles de visitas diarias y en algunos medios en Serbia y China, donde el portavoz del Ministerio de Exteriores dijo hace un año (también sin pruebas) que EEUU tenía 16 biolaboratorios secretos en Ucrania.

Una variedad de sitios de extrema derecha y conspiracionistas se hicieron eco de publicaciones de Infowars y OpIndia: "r/conspiracy” en Reddit, hashtag #usbiolabs en TikTok y Gettr. Sputnik publicó por tiempo limitado en Telegram unos documentos que tampoco confirman este relato.

También tergiversan la intervención de Victoria Nuland, Subsecretaria de Estado EEUU, en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, preguntada por el republicano Marco Rubio. Ella señaló que «Ucrania tiene instalaciones de investigación biológica» NO lo que dice el Kremlin.

Nuland expresó una preocupación lógica, y es que puedan terminar en manos de los rusos, precisamente por la naturaleza de estas instalaciones y el mal uso que pueda hacerse de ellas. Igualmente preocupa que ocurra un desastre nuclear accidental como consecuencia de los combates.

Ron Watkins (líder de QAnon) y el exasesor de Trump Steve Bannon incluso señalan a Anthony Fauci. Tucker Carlson (Fox News) comentarista de referencia de alt-righters y supremacistas blancos, cargó contra Nuland calificándolo a estas instalaciones de «amenaza existencial».

Los bombardeos podrían ocasionar un incidente biológico sin que se esté buscado ese resultado. Algunos analistas consideran que estas acusaciones podrían ser el pretexto para el uso planificado de agentes biológicos o químicos por parte de Rusia en una operación de falsa bandera.

El Embajador de Rusia en la ONU, Vasili Nebenzia, llegó a decir esto: «El objetivo era estudiar la posibilidad de propagar patógenos de peste, ántrax y cólera a través de pájaros, murciélagos y personas». La ONU no debe convertirse en altavoz de propaganda y desinformación.

Esto de los biolabs viene de lejos. En 2015 Russia Today compartía el titular «US encircling Russia with bioweapons labs, covertly spreads them». No podemos acceder a RT desde la UE pero sí a otros portales que replicaron la noticia. Usaron la misma estrategia en Georgia en 2018.

Unos se aferran a lo que sea para seguir negando la realidad: «No es la justificación de la invasión, se descubrió luego». Ya ven que no, es una justificación a posteriori, pueden sumarla a la desnazificación, luego, reflexionar. Consumen propaganda desde 2014, no «otra versión».

¿Por qué ideas que hasta hace no mucho eran marginales hoy se propagan con esta intensidad? The Reverse Idiot Funnel (RIF) de @broderick da en el clavo:

«La desinformación y las teorías conspirativas más definidas, sin importar el asunto, básicamente comienzan con un idiota».