El 6 de diciembre se cumplirá el 90o aniverario de la masacre de las #bananeras 
Para conmemorar la masacre, voy a tuitear durante los próximos meses sobre los momentos claves de la movilización social que culminó en la masacre y sobre los efectos de la masacre. #bananeras90
La masacre de las #bananeras es el sujeto de uno de los capítulos de mi segundo libro. Sería útil trabajar los documentos con todos acá
Si quiere hacer su propia lectura, les recomiendo el libro que compiló Mauricio Archila para el 80o aniversario y el 1r tomo del gran estudio de Renán Vega, Gente Muy Rebelde
Vale la pena consultar además el polémico ensayo de Eduardo Posada-Carbó: publicaciones.banrepcultural.org/index.php/bole…
Imperdible también la obra colectiva de Catherine LeGrand sobre el mundo laboral y las relaciones sociales dentro de la zona bananera
Les recomiendo finalmente el excelente ensayo reciente de @coleman_kevin_p, que está disponible en su sitio web: kevincoleman.org/wp-content/upl…
Comparto acá también durante los próximos meses algunas fuentes primarias
A esta hora el 6 de octubre de 1928, una sesión plenaria de la Unión Sindical del Magdalena hizo una petición de 9 demandas a la United Fruit Co. Sería el primero paso hacia la huelga bananera que culiminaría en la masacre 2 meses después. #bananeras90
Las 9 demandas de la Unión Sindical del Magdalena (USM) se pueden dividir en 3 categorías, las cuales voy a explorar durante las próximas 3 semanas. #bananeras90
Un grupo de demandas (#4–7) tenían que ver con los salarios de los trabajadores y asuntos relacionados: un aumento de 50% en los jornales, el fin de los comisariatos y vales de la United Fruit, pagos cada 7 y no cada 14 días
Para finales de los años 20, habían entre 22 y 25.000 trabajadores de la United Fruit en la zona bananera de Colombia, que tenía 60.000 hectáreas de extensión. (Foto de 1929)
Las exportaciones por Santa Marta llegaron a los 10 millones de racimos por 1a vez en 1926, una muestra de la expansión del sector capitalista en Colombia en los años 20
Un jornalero de la United ganó entre 1.50 y 1.80 pesos diarios. Con fines de comparación, el cónsul norteamericana en Cartagena contó en 1926 que dentro de su distrito, "un trabajador casado y con familia tenía gastos entre 25 y 30¢ diarios por persona, sin incluir la vivienda"
El trabajo asalariado en la zona bananera era así bastante supeditado. Los norteamericanos en Colombia percibían en los trabajadores una pereza intrínsica, que siempre los llevó fuera del sector capitalista
En cambio, podemos leer ese desplazimiento entre la agricultura de subsistencia y el trabajo asalariado como un mecanismo de ganar el capital necesario de mantener la familia y expandir las mejoras, o de complementar un bajo salario. (Foto de 1925)
Más aún, la United dedujo 2% de los salarios para, se dijo, los servivios médicos dentro de la zona bananera. Pero en la práctica, los trabajadores no contaron con la posibilidad de consultar un médico o un hospital de calidad
El establecimiento de un hospital por cada 400 trabajadores, y un médico por cada 200, así figuró entre las demandas de la USM (#9). Volveremos al asunto más tarde
(Las fotos de esta discusión se encuentran en rcientificas.uninorte.edu.co/index.php/memo…)
El segundo grupo de demandas en la petición de la USM del 6 octubre (#1–3, 9) pidió el cumplimiento de las leyes vigentes sobre seguro de trabajo, higiene social, vivienda obrera, descanso dominical renumerado, así como la expansión de los servicios médicos
Muchos de los actores quienes participaron en la movilización obrera en la zona bananera reconocieron el el momento que sus demandas no fueron revolucionarias. #bananeras90
A comienzos de noviembre, unos días antes de la huelga, la USM le envió un telegrama al Congreso, en el cual dijo: “No es política sino justicia, es respeto a lay leyes, lo que solicitan"
Ignacio Torres Giraldo, un importante líder sindicalista y miembro del Comité Ejecutivo Central del Partido Socialista Revolucionario (PSR), también declaró a comienzos de diciembre que la disputa laboral en la zona bananera fue “un conflicto simplemente económico y jurídico"
El concepto de Torres Giraldo sobre la organización sindicalista en la zona bananera refleja el auge de movilizaciones sindicalistas y las reinvidicaciones radicales de la clase obrera generado por la expansión del sector exportador en Colombia en los años 20
En el mes de octubre de 1928, entre la formulación de las demandas de la USM y la declaración de la huelga de las #bananeras, los braceros en el importante puerto fluvial de Girardot se pusieron en huelga
(vean news.google.com/newspapers?nid… y fechas anteriores)
La militancia obrera correspondía en buena parte a su importancia estratégica en los sectores del transporte y las exportaciones: braceros del Río Magdalena, la principal arteria de transporte; trabajadores petroleros y ferroviarios; trabajadoras de los trilladores de café
Este mapa, que se publicó en el New York Times el 6 de diciembre de 1928, dice que se trata de la huelga de las #bananeras. Pero en realidad muestra mucha de la actividad huelguística de los años 20:
por parte de los trabajadores petroleros de Barrancabermeja, en 1924 y 1926 en especial; trabajadores ferroviarios y portuarios de Girardot; trabajadores ferroviarios, La Dorada
A impulsar y organizar estas movilizaciones a nivel nacional vinieron los hombres y mujeres quienes llegaron a fundar el PSR. Hombres como Raúl Eduardo Mahecha, a la izquierda de esta foto con una bandera de los tres ochos del PSR: 8 horas de trabajo/estudio/descanso
El PSR fue establecido en 1926 por Mahecha y otros activistas, en la mayoría bogotanos y medellinenses. El partido fue reconocido por la III Internacional/Komintern en julio de 1928. (Foto 1928, via semanariovoz.com/la-honra-de-to…)
Mahecha (#4 en esta foto) llegó a la zona #bananera en agosto de 1928. Su presencia, como la de otros líderes del PSR, fue decisivo tanto para la subsiguiente representación de la movilización social allá, como para las decisiones tácticas adoptadas antes de la masacre
(Para un análisis de esta última foto, les recomiendo de nuevo leer el excelente ensayo de @coleman_kevin_p sobre la masacre: kevincoleman.org/wp-content/upl…)
La agitación de la clase obrera y de elementos de izquierda a mediados y finales de los años 20 generó una respuesta feroz por parte del gobierno del Partido Conservador. #bananeras90
Los líderes del PSR fueron arrestados y detenidos con frequencia durante la época. Por ejemplo, Mahecha fue puesto en libertad a mediados de 1928. Luego se abrió camino hacia la zona bananera
Alegando la influencia del "bolchevismo" en Colombia, la administración de Presidente Miguel Abadía Méndez (1926–30) emitió un decreto en abril de 1927 que dio a la policía más poderes de detención y estableció más controles sobre las armas de fuego
A esta medida le seguiría unos debates muy fuertes en el Congreso de 1928, sobre un proyecto de ley sobre "defensa social", conocida también como la Ley Heroica
Los detractores advirtieron que la Ley Heroica limitaría las libertades de prensa y expresión, así como penalizar las actividades sindicalistas. (Caricatura del Ministro de Guerra, 26 de octubre de 1928)
Ignacio Rengifo Borrero, el Ministro de Guerra, quien redactó el proyecto de la Ley Heroica, fue el blanco de bastante resentimiento. (Caricatura del 27 de octubre: news.google.com/newspapers?id=…)
Esta campaña contra la Ley Heroica llegó a un punto culminante en octubre de 1928. Entre 10 y 15.000 liberales y socialistas salieron a las calles de Bogotá para protestar
A pesar de tales protestas, así como la oposición de algunos conservadores en el Congreso, la mayoría del Partido Conservador era tal que la Ley Heroica fue aprobada el 30 de octubre
Volveremos al tema, pero hasta donde sé, la Ley Heroica no se aplicó durante la huelga de las #bananeras. Pero su aprobación pocas semanas antes dice mucho sobre el clima político en Colombia en ese entonces
Durante la primera semana de noviembre de 1928, la USM y United Fruit intercambiaron sobre la petición del 6 de octubre. El 6 de noviembre, United Fruit rechazó por 2a vez las demandas de la unión
La negativa de negociar por parte de United Fruit dependía del argumento que los miembros de la unión no eran trabajadores de la compañía, sino de subcontratistas
Esta táctica no era nada atípico de las relaciones laborales en Colombia en los años 20. Por ejemplo, las compañías navieras del Río Magdalena usaron la misma lógica en rechazar las demandas de los tripulantes y braceros durante la huelga de octubure de 1928 en Girardot
Una de las demandas de la USM (#7), sobre el establecimiento de la contratación colectiva, tenía que ver con esta cuestión de subcontratistas. Pero es posible percibirlo en toda la petición de la USM
Los delegados de la USM dijeron el 1o de noviembre que "No somos trabajadores de la compañía para reconocernos las prerrogativas de la ley, pero sí lo somos para sacarnos a todos...el 2% por servicios médicos y medicinas, y para explotarnos...con los vales de comisariato"
Como respuesta a la 2a negativa de United Fruit, otra sesión plenaria de la USM el 6 de noviembre de 1928 dio a la United 3 días para discutir las peticiones o los trabajadores se declararían en huelga
Ya falta menos de una semana para el comienzo de la huelga y un mes para la masacre de las #bananeras. #bananeras90
Durante los 2 meses entre la petición de la USM y la masacre de las #bananeras, y durante esta fase inicial en particular, la gobernación del departamento del Magdalena actuó como intermediara entre el sindicato y United Fruit
Me parece curioso que la gobernación no enviara la petición de la USM, aprobada el 6 de octubre, a United Fruit hasta el 28 de octubre. Solo despues de eso comenzaron el intercambio entre los representantes de los trabajadores y la empresa
El 7 de noviembre de 1928, la gobernación pidió a United Fruit que reconociera los delegados de la USM como representantes legítimos de los trabajadores bananeras. El 8 de noviembre, el gerente de la United le envió al gobernador el ultimátum de la USM
El 11 de noviembre de 1928, más de 5.000 trabajadores, entre ellos gente de la zona bananera, hicieron una manifestación en Santa Marta. Ante el gobernador, portaron banderas blancas y proclamaron su apoyo al gobierno. Fue un intento de evitar la huelga
"Pero ya la huelga estaba virtualmente declarada", escribió 3 años más tarde un cronista del Magdalena
Habían llegado el mismo día la noticia de que se estaban preparando la huelga
En el municipio de Sevilla, el comité de obreros le pidió a la policía permiso para organizar una conferencia con los trabajadores. En Aracataca, al sur de la zona #bananera, el alcalde informó que el paro ya se había ordenado
El 12 de noviembre de 1928, los trabajadores #bananeras del Magdalena se pusieron en huelga. Requisaron las herramientas de trabajo, destruyeron algunas de las racimas que se habían preparado para la exportación, pero sobre todo impidieron la circulación de trenes en la zona
(Foto hacia 1906, via fundacionmagdalena.blogspot.com/2017/03/la-hue…)
Productores bananeros y oficiales buscaron una manera de impedir la huelga. El gobernador del Magdalena envió unos 3 telegramas al presidente de la república el día del 12 de noviembre, pidiendo el envío de tropas a Aracataca, donde habían pocas policías
En lugar de dar una respuesta definitiva para solucionar el problema, Presidente Abadía Méndez prometió consultar a sus ministros de industrias y guerra
En cambio, Ministro de Guerra Rengifo fue decisivo. Informó al gobernador que iba a mandar un batallón de la 2a División en Barranquilla, bajo el mando del General Carlos Cortés Vargas
Cortés Vargas llegó a la zona bananera el 13 de noviembre de 1928. Tomó inmediatamente la iniciativa: en su primer día en la zona, sus soldados detuvieron a 413 trabajadores que habían obstaculizado el ferrocarril en el municipio de Riofrio
(Titular de El Tiempo, 17 de noviembre news.google.com/newspapers?id=…)
La respuesta inicial del gobierno, con la vacilación de Abadía Méndez, el mando de Rengifo y la linea dura de Cortés Vargas, encaja en las narrativas contemporáneas sobre la masacre de las #bananeras
A Abadía Méndez se le pintaba como un viejo desafortunado y sumiso al capital gringo, sobre todo United Fruit Co. Esto se ve muy bien en esta caricatura del 19 de marzo de 1929
Sus detractores liberales comparaban la influencia de Rengifo con la de un gobierno militar. La idea era una afrenta a los autoproclamados ideales democráticos de los colombianos. (Editorial de El Tiempo, el 19 de noviembre)
A Cortés Vargas se lo criticaron por bruto, sobre todo después de la masacre de las bananeras. (Caricatura del 10 de marzo 1929, news.google.com/newspapers?id=…)
Durante las semanas previas a la masacre de las #bananeras, Cortés Vargas tuvo una serie de choques con oficiales departmentales y nacionales. Las tensiones sociales e intrarregionales también influían mucho en el desarrollo y desenlace de los eventos. #bananeras90
Cortés Vargas le pidió al gobernor de Magdalena el traslado de varios agentes de policía, "por ser comunistas." En más que una ocasión, Cortés Vargas se negó a cumplir con las solicitudes del gobernador. Amenazó hasta "retirar las tropas" de la zona bananera
Cortés Vargas también ordenó la detención del agente de la Oficina de Trabajo en Santa Marta, quien tuvo el poder de declarar legal la huelga, además de aplicar asegurar que los dueños cumplan las leyes laborales. Cortés Vargas le acusó de haber instigado la huelga
A pesar de estas diferencias, los oficiales militares y civiles les presionaron a United Fruit y los bananeros independientes para que negociaran con el sindicato. El jefe y un abogado de la Oficina de Trabajo llegaron a la zona bananera el 19 de noviembre
United Fruit nunca abandonó su postura inicial: que los líderes de la USM no eran representantes legítimos de los trabajadores. Pero United reconoció las demandas #6 y 7 de la petición, sobre pagos semanales y el fin de los vales de la empresa (titular de El Tiempo, 21 de nov)
Pero en fin United Fruit, al menos parcialmente gracias a la opinión de las llamados "productores nacionales", no cambió su postura en relación del seguro colectivo, citando "cuestiones de interpretación legal" y perjuicios generales
Tampoco se comprometió con el aumento de jornales y la abolición de las almacenes de la compañía que le había pedido la USM
No es nada sorprendente que la USM no aceptó esta repuesta parcial a sus demandas. El 26 de noviembre, el jefe de la Oficina de Trabajo le informó a Bogotá que las 2 partes "mantienen sus puntos de vista, sin que quieran aceptar fórmula alguna de transacción"
Los diplomáticos norteamericanos reportaron lo mismo: "No hay indicios de que cualquiera de las partes se rinda"
Es importante reconocer que los trabajadores no representaron todo el movimiento contra United Fruit y los productores nacionales. Los comerciantes de la zona bananera, y según se dijo de Cartagena y Barranquilla, aportaron comida y suministros. Un apoyo clave
Para diciembre de 1928, unas 30.000 personas en la zona bananera de Colombia participaron en una masiva suspensión de trabajo y huelga cívica parcial. Era un movimiento multiclasista y multiracial, coordinado en parte por cuadros revolucionarios. #bananeras90
Por esto tenían miedo representantes del estado y de United Fruit. A finales de noviembre, pocos días después de la respuesta negativa de los trabajadores a su primera oferta, la empresa le contó al jefe de la Oficina de Trabajo que concedería a 6 de las 9 demandas de la USM
Después de comunicarse directamente con United Fruit, delegados de la USM llegaron a Santa Marta para firmar un acuerdo. Pero el gerente se desapareció por unos días y el 3 de diciembre, los representantes del movimiento regresaron a Ciénaga. Para mí no esta parte no es tan clara
Alberto Castrillón, un líder del PSR quien había regresado recientemente de Moscú, explicó más tarde que fue una maniobra de United Fruit para dividir el movimiento. Quizás. También dijo que la demora se originó en discrepancias entre United Fruit y los productores nacionales
El ritmo de los acontecimientos en la zona bananera (y así el de estos tuits) se aceleró después del 1 de diciembre
Desmoralizados, los delegados de la USM regresaron a una Ciénaga cada vez más intranquilo. El gobernador y la prensa liberal de Bogotá habían insistido que el movimiento ha sido pacífico (artículo de El Tiempo, 29 de noviembre)
Las confrontaciones se agravaron después del 1 de diciembre por 3 razones. 1o, el gobernador prohibió reuniones en vías públicas, así como la entrada a las fincas sin el permiso de los dueños
En Orihuaca, los huelgistas intentaron impedir la difusión de la orden del gobernador. En Riofrio, la policía mató a un manifestante, lo cual generó más protestas
He aquí la 2a consideración: Cortés Vargas ya había adoptado medidas para reprimir a los huelgistas. El 3 de diciembre, Cortés Vargas mencionó la posibilidad de exiliar a San Andrés a los líderes del movimiento
Cortés Vargas también declaró que los huelgistas iban a atacar a Santa Marta. Así, se aprovechó de las rivaldades intrarregionales que existían dentro de la zona bananera
300 soldados llegaron el 3 de diciembre para reforzar la posición del gobierno. Eran paisas, lo cual indica la desconfianza que les tenía Cortés Vargas a las tropas locales, así como las ideas raciales, sociales y culturales que predominaron acerca de los costeños
Por qué la alianza tan estrecha entre Cortés Vargas y la postura de United Fruit? La respuesta parece axiomática, pero cabe explorar los argumentos contemporáneos
Según los críticos liberales y socialistas, United Fruit cubrió los gastos de mantenimiento de las tropas, organizó fiestas para Cortés Vargas y sus oficiales, y le ofreció a Cortés Vargas alojamiento en una casa de la compañía
El superior de Cortés Vargas confirmó parte de esta última acusación y negó el resto. Pero sabemos, según este documento de abril de 1928 – apenas 7 meses antes! – que la United sí ofreció banquetes para los altos oficiales del gobierno durante sus visitas a la costa
United Fruit no era la única empresa norteamericana que había ganado la animadversión de muchos colombianos. En la política del país en 1928 se veía mucho debate sobre la soberanía nacional y el antiimperialismo. Fue especialmente importante una nueva ley de petróleos
El jinete a la izquierda también hace referencia a una preocupación más amplia durante la huelga de las bananeras: con la creciente debilidad económica a nivel mundial, a Bogotá le preocupaba la confianza inversionista y le interesaba suprimir el movimiento
En este ambiente cargado, United Fruit y el gobernador del Magdalena dieron un tercer paso importante hacia la confrontación el 3 de diciembre: ordenaron la reanudación de la cosecha de bananos, bajo la protección de la policía y el Ejército
Los encuentros entre los huelgistas y los trabajadores que no participaron en el paro habían sido tensos, pero ahora su ámbito se amplió bastante
El 4 de diciembre, tanto el gobernador como la United percibieron "un giro [en] la huelga". Con esta información, el cónsul norteamericano en Santa Marta concluyó que existía "la posibildiad de un levantamiento" en la zona bananera
El gerente de United Fruit compartió con Bogotá noticias sobre ataques contra los productores y su propiedad. La Sociedad de Agricultores le avisó a Abadía Méndez que la huelga había causado 1 millón de pesos en pérdidas económicas y amenazó arruinar a 400 productores
El momento más importante del 4 de diciembre mostró el potencial del movimiento y la capacidad de violencia por parte del estado. A las 4 de la tarde, cerca de Sevilla, huelgistas les demovilizaron a unos 25 soldados
Fue la demostración más fuerte y clara hasta ese momento de la posibilidad de solidaridad entre los soldados rasos y la clase obrera de la zona bananera
Cortés Vargas se enfureció (titular de El Nuevo Tiempo, 13 de diciembre). En particular, el teniente de los soldados se fugó, en vez de cumplir el "orden de disparar antes que caer"
"He ordenado concentrar toda la fuerza y sigo inmediatamente a batir por fuego a amotinados" le escribió Cortés Vargas al Rengifo, el Ministro de Guerra, quien "aprob[ó la] determinación". (Titular de El Diario Nacional, Barranquilla, 4 de diciembre, con informe consular)
El 6 de diciembre de 1928, un día como hoy, a las 1:30 de la mañana, 300 soldados abrieron fuego contra una multitud de 4.000 personas congregadas alrededor de la estación de tren en Ciénaga. ¿Cómo llegamos a este momento, la masacre de las #bananeras?
La cuestión del poder/representación narrativo ("agency", en inglés) es fundamental para entender los eventos del día anterior a la masacre, el 5 de diciembre. #bananeras90
En la versión más común de por qué los huelgistas y sus familias llegaron a la estación de tren de Ciénaga, ellos parecen ser ingenuos, United Fruit tiene demasiado poder
Esa narrativa también ignora las tensiones entre el gobernador del Magdalena y Cortés Vargas, así como el papel de los líderes del PSR
Según esta narrativa, el gobernador atrajo a Ciénaga a los trabajadores con la promesa de una actualización sobre las negociaciones con United Fruit. Esto contrasta con lo que considero la más convincente relación: la de Castrillón, cuadro del PSR (escrita 1929, reeditada 1974)
Castrillón explicó que él y los otros líderes del PSR convocaron una manifestación en Santa Marta para el 6 de diciembre. Millares de personas llegaron a Ciénaga el 5 de diciembre, con la idea de continuar hacia Santa Marta la mañana siguiente
“Hacia las 12 del día, Ciénaga presentaba el aspecto de una ciudad en fiestas," contó Castrillón. La muchedumbre se entusiasmó aún más a las 2 de la tarde, cuando llegó la noticia que el gobernador y el gerente de la United iban camino a la ciudad. (Foto Ciénaga, años 20)
Meses después, Castrillón ofreció la opinión que el movimiento de los trabajadores bananeros se había convertido en “una lucha cívica sin ejemplo en nuestra historia, pues la huelga había entrado en su quinta semana”
Pero en el transcurso de la tarde, cambió el talante en Ciénaga. Cuando quedó claro que el gobernador no iba a llegar, "las multitudes asaltaron la casa donde funcionaba el comité ejecutivo de la [USM]...[lo acusaron] de haber traicionado la causa de los trabajadores"
Castrillón escribe en otra parte de su relato que el gerente de la United había paralizado las negociaciones a finales de noviembre con el propósitode dividir el movimiento. Esta opinión le concede demasiado mérito a la compañía. Pero en fin sí tuvo suerte
El 5 de diciembre, un coronel en Santa Marta le informó al Ministro de Guerra que los comunistas estaban en "todos corregimientos", y que "4.000 hulegistas armados hanse concentrado Ciénaga"
Mientras tanto, el gerente británico de United Fruit envió una serie de telegramas desde Santa Marta a Bogotá. Uno, al Ministro de Guerra, advirtió que los asaltos por parte de los huelgistas habían aumentado y que toda la producción de la zona estaba al punto de perderse
Otro telegrama, a un representante de la United en Bogotá, prácticamente dijo que la compañía debía pedir la intervención estadounidense para proteger sus intereses en la zona bananera. Esto (uno de los momentos más graciosos de esta historia) no le hizo gracia al representante
Estas noticias de "un plan subversivo" le convencieron actuar al gobierno. El 5 de diciembre, a las 5 de la tarde, el Consejo de Estado aprobó la declaración de un estado de sitio para la provincia de Santa Marta. La libertades civiles fueron suspendidas,
El gobierno recibió además el poder constitucional de gobernar por decreto; a Cortés Vargas se le invistió con autoridad civil y militar. Los huelgistas serían considerados y castigados penalmente como participantes en "casos de asonada o tumulto"
La noticia de la declaración del estado de sitio se escuchó en Ciénaga a las 10 de la noche. Un grupo de productores colombianos había logrado poco antes convencer a los huelgistas que les dejaron salir para Santa Marta, para obtener la firma del gerente de United Fruit
Por ese entonces habían 4.000 personas en la estación de tren de Ciénaga. No era posible a esa hora dispersarse; muchos decidieron dormir al aire libre. Cómo ya conté, el ejército llegó en las primeras horas del 6 de diciembre
