Quiero contarles que me tiene SORPRENDIDO la normalización de la corrupción en Colombia. Me invitaron a hacer unas entrevistas de admisión para un doctorado y me encontré con 2 joyitas que les cuento a continuación:
1. Un fulano dice que se graduó de la Universidad en una capital de departamento (no diré cuál) y que era muy amigo del alcalde. Como era tan joven y el alcalde lo quería contratar, lo contrataron con el nombre de otra persona. Y lo dice así, en la entrevista, como si nada.
2. Una fulana dice sin ningún tipo de vergüenza que se pagó la universidad haciéndole los trabajos de las diferentes materias a sus compañeros. Y que eso no es un problema ético porque ella era una mujer trabajadora que lo hacía para salir adelante. Ah bueno.
Y aún así pretenden ser aceptados en un doctorado después de admitir en la entrevista que han normalizado la corrupción en sus vidas. Como si nada hubiera pasado. Así no es.
Tenemos que replantearnos nuestra relación con la corrupción en el día a día. Nos quejamos de los políticos pero ya normalizamos la corrupción en el diario vivir. Se nos olvida que nosotros como sociedad también somos parte del problema de la corrupción en Colombia.
