Hay una isla que es un resto de un continente hundido, donde una guerra entre ratas y lechuzas duró cien años y donde un bicho gigante se escondió una vez y reapareció 80 años después.
Ah, y viven 30 minutos en el futuro.
En #LaBrasaTorrijos de hoy, Lord Howe.
HILO 👇
Ah, y viven 30 minutos en el futuro.
En #LaBrasaTorrijos de hoy, Lord Howe.
HILO 👇
En el mar de Tasmania, a unos 800 km de Sídney se encuentra la isla de Lord Howe que, como dicen los mapas, es una isla con playas y deportes acuáticos.
Vamos, como casi cualquier otra isla.
Vamos, como casi cualquier otra isla.
Como casi cualquier otra isla, LOS COJONES, porque la Isla de Lord Howe, con apenas 14 km2 de superficie es protagonista de unas cuantas peculiaridades como para escribir tres novelas.
Seguidme que nos vamos a divertir.
Seguidme que nos vamos a divertir.
Para empezar, Lord Howe es uno de los pocos territorios que quedan emergidos de Zealandia. Que qué es Zealandia? Pues Zealandia es ni más ni menos que el 7º continente. El continente hundido en el pacífico del que solo asoman cuatro cachos de tierra (y Nueva Zelanda).
La movida es que lo de Zealandia solo tiene 6 años. No el continente, que tiene 80 millones, sino la pelea de geólogos y oceanógrafos asutralianos y neozelandeses porque fuese reconocido como continente, aunque fuese "continente hundido", cosa que paso hace apenas 3 años, en 2017
Esto de Zealandia ya sería suficiente para molar, pero Lord Howe mola muchísimo más.
La isla estuvo deshabitada hasta 1778, cuando unos marineros británicos desembarcaron por primera vez.
La isla estuvo deshabitada hasta 1778, cuando unos marineros británicos desembarcaron por primera vez.
Al llegar, descubrieron que la isla tenía un montón de especies animales y vegetales que no habían visto nunca. Entre ellas, esta palmerita, a la que llamaron Kentia.
La Kentia era tan bonita y con tal facilidad de cuidado que, en seguida, se convirtió en un arbolito muy apreciado en las casas adineradas tanto de Europa como de América.
Aún se pueden comprar casi en cualquier vivero.
Aún se pueden comprar casi en cualquier vivero.
Claro, como la palmerita molaba, la isla dejó de estar en paz y los comerciantes comenzaron a separar las semillas y a "cultivar" la kentia para que no se acabase. También iban y venían en barcos para "desplantar" las kentias y llevarlas por todo el planeta.
En 1918, uno de esos barcos que atracaban regularmente en Lord Howe, además de los marineros y los comerciantes, trajo un pasajero no deseado.
Más bien unos cuantos.
Más bien varios centenares.
De ratas.
Más bien unos cuantos.
Más bien varios centenares.
De ratas.
Cuando las ratas desembarcaron se encontraron que el monte era orégano puro y sin cortar. Es decir, se encontraron con un ecosistema sin depredadores para ellas, así que hicieron lo que mejor se les da: comer y criar otras ratitas que, a su vez seguirán comiendo y criando...
Resultado: en un par de décadas, los roedores eliminaron a cinco especies de pájaro y trece de invertebrados. Entre ellos, este precioso bichito del tamaño de una mano llamado "Dryococelus australis".
Decidle hola.
Decidle hola.
Al bicho en cuestión se le conocía como "salchicha terrestre", "cigala terrestre", "langosta terrestre" y, sobre todo, como insecto palo de Lord Howe porque, al parecer, no les molaba lo de añadir "terrestre" a cada nombre.
Sea como fuere, la pérdida de la cigala terrestre (es el nombre que más mola, no me digáis que no) sería una tragedia porque no es que la eliminasen de la isla, es que SOLO existía en esa isla.
Las ratas la habían extinguido.
Las ratas la habían extinguido.
Sin embargo, lo del bicho les importó muy poco a la gente de la época. Lo que realmente les tocaba las narices es que las ratas también se comían las semillas de la kentia. Y la kentia daba dinero.
Así que los australianos se pusieron serios. Regalaron unas cuantas escopetas a lugareños y expedicionarios y organizaron batidas para eliminar las ratas, ofreciendo 6 peniques por cada rata que exterminasen.
En esta foto se ve a unos cuantos cazarratas de safari por Lord Howe.
En esta foto se ve a unos cuantos cazarratas de safari por Lord Howe.
El problema es que lo de llevar las ratas muertas hasta el puesto del gobernador era un poco guarrada, así que dijeron que con traer las colas de las ratas era suficiente.
Los cazarratas guardaban las colas en cajas de cerillas y, de algún modo, servían como moneda de cambio.
Los cazarratas guardaban las colas en cajas de cerillas y, de algún modo, servían como moneda de cambio.
Pero las ratas eran más y las escopetas no daban para tanto, así que, en 1927, el gobierno de los USA, en la mejor tradición yanqui, decidió mandar un ejército a combatir a las ratas.
Un ejercito aéreo.
Un ejército aéreo compuesto por lechuzas comunes.
Esta majestuosa ave.
Un ejercito aéreo.
Un ejército aéreo compuesto por lechuzas comunes.
Esta majestuosa ave.
El esfuerzo combinado de las escopetas y las lechuzas consiguió parar el crecimiento de las ratas y, en unos pocos años, las plantaciones de kentia volvieron a crecer.
El problema es que las lechuzas TAMPOCO tenían depredador natural y, al final, unas cuantas tuvieron que ser abatidas por las mismas escopetas que habían estado de su lado. Por suerte, no se convirtieron en un problema mayor.
Las ratas siguieron deambulando por la isla, pero más o menos a raya con venenos y lechuzas hasta 2018, cuando se volvió a lanzar un ataque aéreo (esta vez desde aviones) con cebos y venenos que las ha eliminado casi por entero.
Cien años después de llegar.
Cien años después de llegar.
Es lógico que las autoridades australianas hayan querido eliminar a las ratas, pero no por la kentia, que ya crece en todas partes, sino porque tanto la isla de Lord Howe, como la vecina Pirámide de Ball son patrimonio de la Humanidad de la UNESCO por su biodiversidad.
Por eso es una tragedia TAN grande que la cigala terrestre de Lord Howe se haya extinguido.
*carita triste*
*carita triste*
¿Seguro?
Nope!
En 2001, un par de científicos se pusieron a escalar la Pirámide de Ball, que ya hay que tenerlos cuadraos para intentar escalar este pincho amenazador de 90 metros de alto en medio del mar.
En 2001, un par de científicos se pusieron a escalar la Pirámide de Ball, que ya hay que tenerlos cuadraos para intentar escalar este pincho amenazador de 90 metros de alto en medio del mar.
El caso es que escalaron el peñón para hacer sus cosas de científicos y allí, debajo de un matorral, se encontraron con una colonia de 27 cigalas terrestres. Un animal que se creía extinto desde hacía 80 años y que no tiene alas así que a saber cómo coño había llegado allí.
Por supuesto, algunos miembros de la colonia fueron trasladados a instalaciones controladas donde se les cría y alimenta en cautividad.
La salchicha con patas es el gran superviviente de la guerra de los cien años de la isla de Lord Howe.
La salchicha con patas es el gran superviviente de la guerra de los cien años de la isla de Lord Howe.
Afortunadamente, Lord Howe está tan lejos de Australia y es tan pequeña y tan cara que el turismo nunca se ha masificado. Y eso que tienen un pequeño aeródromo que ocupa esencialmente todo el ancho de la isla.
¿Cómo?
¿Qué por qué dije que en la isla viven 30 minutos en el futuro?
¿Qué por qué dije que en la isla viven 30 minutos en el futuro?
Pues porque, al parecer, en Lord Howe no tenían suficientes rarezas con las ratas, las kentias y los insectos-palo y decidieron ser *todavía* más raros.
La isla de Lord Howe es uno de los pocos territorios donde el uso horario no es "en punto" sino "a y media"
Es decir, que mientras en Sídney son las 10:00h, en Lord Howe son las 10:30h.
Es decir, que mientras en Sídney son las 10:00h, en Lord Howe son las 10:30h.
Que tú dices, pues vaya gilipollez. Y lo es, pero es que resulta que hay OTRA GILIPOLLEZ más.
Por razones desconocidas al gobernador de Lord Howe le molestaba lo de no compartir hora con Nueva Gales del Sur, así que decidió que, con el cambio de hora de verano, la isla no adelantaría los relojes una hora, sino solo media.
Así, durante seis meses al año, la isla comparte uso horario con Sídney y durante los otros seis meses van a su bola porque seamos honestos, a estas alturas, a sus 300 y pico habitantes ya todo les parece normal.
Y con estas cuatro imágenes que resumen la isla y la pirámide, nos vamos a ir despidiendo de Lord Howe, de Ball y de #LaBrasaTorrijos de hoy.
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Nos vemos en un nuevo capítulo el próximo jueves a la misma hora.
Si queréis conocer más territorios improbables, recordad que todos los episodios de #LaBrasaTorrijos están archivados en mi tuit fijado, que es este:
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Las imágenes del capítulo de hoy son de:
DestinoInfinito, Lord Howe Museum, Ian Cochrane, Granitethights, Thinkstock, John Game, Australia Navy, Leon&George, Rod Morris, Penn Libraries y Google Maps.
(Fin del HILO 🏝️🐜)
DestinoInfinito, Lord Howe Museum, Ian Cochrane, Granitethights, Thinkstock, John Game, Australia Navy, Leon&George, Rod Morris, Penn Libraries y Google Maps.
(Fin del HILO 🏝️🐜)
(Y en el próximo capítulo, vamos a conocer la historia de unos edificios rotos que no estaban rotos. Hasta que los rompieron)
*Fe de errores: la Pirámide de Ball tiene 561 metros, no 90 como puse antes.
Aprovecho la oportunidad para agradecer a Carabiru, a Marta Catalán y a todos los demás mecenas de mi patreon me permiten seguir haciendo estas cosas todas las semanas. Sé que soy pesado pero si vosotros también queréis ayudarme, ahora lo necesito: patreon.com/pedrotorrijos
