Thread by @Miri_Rouch

Saber discernir cuando el problema está en el manejo que hacen los otros sobre la situación y no en el nuestro es una tarea en ocasiones costosa y muchas veces motivo de intervención en terapia.

(HILO sobre asertividad, poner límites y manejo del chantaje emocional...)

En ocasiones podemos sentirnos mal en situaciones en las que nuestra actuación es la adecuada o al menos, la que deseamos llevar a cabo. Sin embargo, nuestros deseos, elecciones o actuaciones a veces chocan con las que otras personas de nuestro entorno esperan/desearían. ...

No siempre son las que les agradan o les vendrían bien, pero eso no quiere decir que sean erróneas, equivocadas o algo por lo que nos debamos sentir mal o retractar. Así que ¡Cuidado! pq todos tenemos derecho a elegir lo q queremos o no hacer, del mismo modo q los demás lo tienen

En ocasiones nos agradará o estaremos de acuerdo o en consonancia con ellos y otras veces no nos quedará más remedio que aceptar su elección. Lo mismo pasa cuando nosotros estamos en el otro lado y somos los que elegimos comportarnos de un modo que al otro puede no agradarle.

¡¡Cuidado aquí con aplicarnos un rasero de medida diferente!! y permitir que el otro nos haga sentir mal al hacer explícito su desagrado o incluso al presionarnos para cambiar de opinión o actuación. ...

En Psicología hablamos de "Habilidades Asertivas" para referirnos a aquellos comportamientos que nos ayudan a defender nuestros derechos, deseos, intereses, opiniones, libertades... al tiempo que respetamos los de los demás...

Y dentro de estos derechos y libertades está el de decidir cómo uno quiere comportarse o qué elección quiere hacer en cada ocasión... aunque esta no sea la que otra persona preferiría...

Pero cuando el otro reacciona mal ante el ejercicio de nuestra libertad, el problema no estaría en nosotros sino en su falta de habilidad para manejar la contrariedad que esto le produce. Es decir, en estos casos el otro no está siendo asertivo, no está respetando nstrs derechos

La asertividad implica dos caras de una misma moneda: Por un lado requiere llevar a cabo conductas de respeto hacia uno mismo y por otro conductas de respeto y aceptación de las libertades de los demás.

Ambos aspectos no siempre son fáciles de llevar a la práctica, pues además engloban multitud de conductas. Podemos ser habilidosos en algunos aspectos de lo que llamamos "Asertividad" (Ej. Saber expresar opiniones o disconformidad sin herir al otro...

...no tener miedo en pedir una información o en transmitir una queja, podemos recibir bien las críticas...) pero no en otros (Ej. Puede costarnos decir que no por miedo a que el otro se enfade, puede darnos reparo hacer una petición ...

...o incluso manifestar al otro cómo nos ha hecho sentir algo que ha hecho, podemos ponernos a la defensiva ante una crítica o reaccionar presionando al otro para que acceda a algo que nos apetece mucho, no respetando su NO..)...

Toda esta diversidad de conductas asertivas pueden aprenderse, modificarse y perfeccionarse.
Volviendo a la propuesta de 72 kilos, recuerda que no debes sentirte mal ante algo que estás decidiendo hacer. ...

Lo único que debes procurar es que aquello que eliges hacer no interfiere con los derechos y libertades de otro.
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Algo que suelo decir en sesión en relación a estos temas es que hay aspectos de la situación que no nos corresponde a nosotros manejar, sino al otro. ...

Su malestar, frustración y desacuerdo respecto a lo q tu haces es suyo... es lícito, pero algo q debe aprender a gestionar. Y si el otro no lo gestiona bien, ya sí entrará en lo q a nosotros compete, gestionar su reacción para q no nos haga sentir mal ni condicione nstra conducta