En el presupuesto de egresos de la federación 2020, para el Ramo 38 (Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología) se aprobaron $25,658.8 millones de pesos (mdp), con 75.9% ($19,485.1 mdp) para CONACYT, el resto ($6,173.7 mdp) para los Centros Públicos de Investigación (CPIs). /1
De esos recursos, $5,389.2 mdp se emplearon como estímulos del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), para beneficiar a un total de 32,389 investigadores (ya que en 2020 habían 33,165 investigadores registrados en SNI, eso indica que 776 de éstos no cobran estímulo). /2
$1,345.1 mdp se emplearon para mantener el programa de Cátedras CONACYT en 2020, atendiendo a 1,511 plazas distribuidas en todo el país. El problema es que no se han cumplido con los compromisos de generar plazas permanentes en IES o CPIs del país. /3
Y a Becas (nacionales, extranjero, postdoctorales, repatriaciones, retenciones) se asignaron 10,097.1 mdp con la intención de apoyar a un total de 59,190 beneficiarios (habrá que revisar cuántos fueron apoyados en 2020 en este rubro). /4
Un total de $364.5 mdp se destinó al Programa de Fortalecimiento Sectorial de las Capacidades Científicas, Tecnológicas y de Innovación, cuyo plan para 2020 era financiar un total de 14 Convocatorias. ¿Cuántas se abrieron y cuánto se ejerció? /5
Otros $344.6 mdp se destinaron para el Programa de Fomento Regional de las Capacidades Científicas, Tecnológicas y de Innovación para que los sistemas estatales y regionales de CTI pudieran promover actividades de desarrollo económico y social (20 proyectos se esperaban). /6
Para la nueva modalidad de PRONACES (Programas Nacionales Estratégicos de Ciencia, Tecnología y Vinculación con el Sector Social, Público y Privado) se destinaron 211.5 mdp. /7
Y para programas de apoyo a actividades científicas, tecnológicas y de innovación, se destinaron $1,103.6 mdp, con la intención de apoyar 1,818 proyectos estratégicos. Sin embargo, se recortaron recursos para apoyo a Olimpiadas de conocimiento, ferias y sociedades científicas /8
Varios de estos números difieren de lo presentado por el presidente de la República en su informe presidencial, por lo que habrá que tratar de correlacionar con cuidado lo aprobado con lo ejercido.
Me permito compartirles este escrito del Dr. Luis Molina, médico cardiólogo del Hospital General de México (HGM), quien de esta manera hace un homenaje a su hermano: Mario Molina. /1
No cabe duda que lo que se comparte durante la infancia es determinante para el resto de la vida. Los Molina Pasquel y Henríquez éramos 4 hermanos que nos llevábamos muy bien: compartíamos muchas actividades, sobre todo, jugábamos ping-pong en pijama, todos los fines de semana./2
Me acuerdo que había una columna junto a la mesa y que a veces jugábamos “con la columna”, lo que hacía imposible contestarle al contrincante. Roberto, mi hermano, era el más tramposo… aunque he de confesar que los demás no nos quedábamos atrás. /3
Hace unos 8 años hice este análisis sobre la productividad relativa de instituciones de educación superior (públicas y privadas) y su ponderación en términos del número de investigadores adscritos al SNI en cada institución y la calidad científica. /1
Las instituciones públicas dominan en escenario, pero destacan dos IES privadas: el ITESMS y la UDLAP en las posiciones 7 y 20 respectivamente (de acuerdo al número de publicaciones en el periodo de 2005 a 2009). /2
Si comparamos ahora los datos de la tabla en términos de la "calidad científica de sus publicaciones", la UNAM, el CINVESTAV, el ITESM y la UDLAP poseen un índice del 0.8 (20% por debajo de la media mundial), pero el más alto entre las IES mexicanas que hacen investigación. /3
De acuerdo a datos recientes (2020), en México hay 33,165 investigadores que son miembros del Sistema Nacional de Investigadores (SNI). Este organismo reconoce la calidad y la producción científica, a través de un proceso de revisión de pares.
Al cierre del año 2019, de 30,598 miembros registrados, 2,493 eran Nivel III (8.2%), 4,578 Nivel III (15%), 15,988 Nivel I (52.3%) y 7,439 Candidatos. La mayoría distribuidos en instituciones de la CdMx, BC, Gto, Jal, Mex, Mich, Mor, Pue, NL y Ver. /2
En 2020, cerca de 1,500 investigadores están adscritos en instituciones de educación superior privadas (ITESM, UP, Sistema Jesuita, UDLAP, ULSA, ITAM, Ahahuac, CETYS, UPAEP, entre otras). Esto es, 4.5% del total de investigadores registrados./3
Colegas investigadores del ITAM y de la Universidad Iberoamericana han recibido ya la comunicación formal de que CONACYT no continuará otorgando el estímulo al que todo investigador miembro del Sistema Nacional de Investigación tiene derecho de acuerdo al Reglamento del SNI. /1
En el reglamento del SNI 2020 (el nuevo, que aun lo están socializando) dice en su artículo 28 cuáles son los requerimientos para ser miembro del SNI. Mis colegas en universidades privadas los cumplen completamente. El nombramiento es algo que no se retirará. /2
Los criterios de Evaluación se establecen en el Capítulo XII del Reglamento y no son triviales. Son rigurosos, exigentes y resueltas en comisiones por la dictaminación de al menos dos evaluadores para poder recibir alguna distinción como Candidato, Nivel I, II, III o Emérito. /3
Cuando niño leí con sumo interés el libro de Shahen Hacyan titulado "Los hoyos negros y la curvatura del espacio-tiempo". Un libro fascinante, que casi me lleva a estudiar Físico-Matemáticas. Recuerdo tenía mis notas y teorías sobre el tema en una libreta. /1
De hecho, con un ensayo sobre este libro participé en el primer concurso nacional "Para leer la Ciencia desde México". Era 1989. Esta colección del Fondo de Cultura Económica sin duda fue un detonador de mi interés por dedicarme a la Ciencia. /2
Hace más de un año un equipo internacional reportó la primera "foto" de un agujero negro, fue algo emocionante para ese niño interno fascinado con estas extrañas criaturas cosmológicas. Una colega de la Universidad donde hoy trabajo, participó en este trabajo de investigación. /3