No todos mis historias acaban bien (lo que ocurre es que es más fácil obtener consentimiento para divulgar aquellas que sí). Hoy os traigo un #NuevoCasoDeInformáticaForense que acabó mal... pero del que creo que muchos podremos aprender.
Juan es el padre de Ramón, un niño de 13 años que ha sido contactado por un groomer en TikTok.
Juan ha descubierto el intento porque Ramón le ha contado que un tipo le insiste en que le envíe “un pack” (para saber qué es, consulta este artículo). pduchement.org/2020/12/05/dif…
Juan ha puesto el grito en el cielo, claro.
Consulta a un profesional que le dice que solo hay un delito consumado (el asociado al grooming), porque el resto no ha conseguido llevarlo a cabo.
Claro que su abogado tiene un problema: debe demostrar que ha habido una intención predatoria en el acercamiento del groomer (así lo exige la ley).
Es por eso que se pone en contacto conmigo y pasamos a la...
Fase de investigación:
Juan me da acceso temporal a la cuenta de Ramón y analizo las conversaciones con el groomer.
No voy a dar detalles, para evitaros las arcadas. Pero queda claro lo que busca, lo que pide y lo que intenta. Ha realizado “actos conducentes”.
No cobro a Juan mis honorarios (nunca lo hago cuando es un peritaje sobre delitos perpetrados contra menores víctimas de agresiones en RRSS o bullying, y esto es solo sostenible en el tiempo gracias a mis mecenas de Patreon). patreon.com/pduchement
Las conversaciones son:
✔️Documentadas
✔️Validadas bajo mi firma
✔️Certificadas digitalmente al amparo del @_minecogob
✔️Sometidas a cadena de custodia
✔️Recogidas en el informe pericial
El tiempo que ese tipo ha estado comiéndole la cabecita a Ramón es tal que, solo en certificaciones de conversaciones, el coste aumenta a 700€.
Afortunadamente, el importe es sufragado al 80% por los donativos al fondo de ayuda a familias que hacéis: pduchement.org/donaciones/
El groomer ha facilitado tanta información en las conversaciones que no me cuesta identificarlo y localizarlo. Incluso ha enviado fotos normales en las que se ve su cara.
Parece un caso atado y bien atado, ¿no?
Vamos a avanzar meses en el tiempo. Juan, su abogado y yo a la espera de entrar en el tribunal...
y la parte defensora aparece con su propio perito informático 😦
No pasa nada: siempre que voy a defender un informe, me preparo para una contrapericial. Me jacto de ostentar el récord de 0 peritajes tumbados.
¡Que me suelten lo que quieran! Las pruebas están documentadas: Nadie podrá poner en duda que el groomer es él y que dijo lo que dijo.
Salgo a defender.
¿Qué está pasando?
El perito de la parte contraria no me discute.
¡No me ha contraperitado!
HA PERITADO OTRA COSA.
Termino mi defensa. Su Señoría no tiene duda: el acusado es el interlocutor de Ramón y sus actos embaucaban al menor para facilitarle material sexual.
Está ganado...
¿O no?
Le toca al perito de la parte defensora.
Antes incluso de que el abogado defensor haga las preguntas capciosas, solo con las pruebas que aporta (sin conclusiones), ya me veo venir por dónde va la estrategia:
El perito del abogado defensor certifica el tiempo que hace que Ramón tiene una cuenta en la Red: Según la normativa, con ese tiempo de uso y con las restricciones de edad de la plataforma, Ramón habría tenido más de la edad que ampara el art. 183ter del CP SI NO HUBIESE MENTIDO
El niño falseó datos para crearse su cuenta en TikTok, asegurando que tenía más edad de la que en realidad tenía para poder registrarse en una Red que, de lo contrario, no se lo permitía (más información sobre política de edad de TikTok aquí). pduchement.org/2020/11/26/tik…
El resultado es que, dadas las restricciones, la supuesta edad de Ramón y el tiempo que llevaba la cuenta abierta, de estipula que el groomer tenía buenos motivos para creer que “el niño era lo suficientemente mayor como para afrontar la naturaleza de aquellas conversaciones”.
Y así, gracias a la apertura prematura de cuentas, a los menores que mienten con su edad para poder registrarse y a las familias que no vigilan estas cosas y educan para prevenirlas, es cómo muchos groomers se libran de asumir las responsabilidades de sus actos.
¿Lo sabías?
Pues yo lo descubrí de la peor de las maneras, cuando vi que mi trabajo no sirvió para nada y que aquel tipo salió a la calle.
Hoy, ese tipo sigue libre para continuar con “lo suyo” en TikTok.
☢️¿Tu hij@ tiene cuenta en esa Red?
☢️¿Sabes que sí tiene menos de 18 años y no está en la zona restringida, es que ha mentido con su edad?
☢️¿Sabes que sí tiene menos de 13 años, no puede estar en TikTok?
🤷🏼♂️🤷🏼♂️🤷🏼♂️
Los usuarios en TikTok:
⁉️Si tiene cuenta, >13
⁉️Si manda mensajes, >16
⁉️Si publica vídeos, >18
O si no... ha mentido.
Así de simple (y de peligroso).
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Me apetece sortear GRATUITAMENTE 5 de mis libros entre las donaciones que reciba hoy el fondo para familia con menores víctimas de agresiones en las RRSS y bullying. Por cada € donado, una posibilidad de que te mande un libro firmado y dedicado 🥰
Recuerda que todo lo aportado será para el fondo de familias con menores víctimas de agresiones en RRSS y bullying 🥰

Publicaré los ganadores el martes, en este mismo hilo 😊 (protegiendo datos personales, claro).
🥰Participan por ahora: MJL, VDC, PMC, IAM, JCP, EMS, DMS e ITJ 🥰
Y este... me sabe a gloria, porque es la típica agresión que hemos “normalizado” como sociedad, que no tiene nada de normal y que estamos acostumbrados a que acabe impune... pero que esta vez tuvo un final feliz 😊
¿Preparados?
Fase de contacto:
Me manda aquí una solicitud Rufino, el padre de una niña de 13 años con cuenta en IG.
“Estimado Profesor Duchement, le escribo preocupado.
Mi nombre es [Rufino] y quisiera poner en su conocimiento que [Lucía], mi hija de 13 años, ha recibido en su cuenta de IG una fotopolla.
Quisiera solicitar su ayuda para actuar al respecto.
Lamentablemente, no tenemos recursos”
Tenemos nuevo #CasoDeInformáticaForense, y este es de lo más surrealista 🤦, porque empieza con un groomer DENUNCIANDO AL PADRE DE SU ÚLTIMA VÍCTIMA 🤷🏼♂️🤷🏼♂️🤷🏼♂️
¿Preparados?
¿Cómo creéis que me llega el peritaje?
Lo pide...
El cliente contacta conmigo en un estado bastante desesperado:
Se llama Curro y tiene un hijo de 10 años que recientemente ha sufrido grooming.
Lucho cada día contra la LGTBIfobia y, recientemente, uno de mis informes periciales ha conseguido un hito: que un delito de amenazas sea juzgado como delito de odio:
Hoy hablaremos de Cintia, una adolescente de 14 años que sufre ciberbullying.
Este caso me gusta porque, aunque mi informe no arrojó un resultado unívoco, fue suficiente para dar pie a las autoridades.
Fase de contacto:
El colegio profesional recibe una solicitud y, automáticamente, activa a tres forenses de su Cuerpo Oficial de Peritos para que le hagamos un presupuesto y el cliente escoja.
La petición habla de una menor y de ciberbullying, así que no incluyó en la factura mis honorarios profesionales y, del resto de los gastos del peritaje, descuento una parte (amortiguándola con un trocito del fondo para víctimas de agresiones en RRSS que sabéis que gestiono).