Thread by @MatiMow

Hoy hay elecciones en Uganda, país del centro de África.

¿Por qué son interesantes? Por el nivel de turbiedad y violencia, el protagonismo del arte y las redes sociales y, principalmente, porque tras 34 años en el poder, su presidente podría perder.

Abro hilo

Yoweri Museveni, el actual presidente, es un ex guerrillero que participó del derrocamientos armado del dictador Idi Amín en 1979 y, después de ser Ministro de Defensa del gobierno siguiente, tomó el poder por la fuerza en 1986, convirtiéndose en presidente de facto.

Durante 10 años gobernó como dictador. En el 96 convocó a elecciones pero bajó un sistema de partido único y, recién 10 años después, en 2006, permitió que se puedan presentar diversos partidos, pero con un fuerte aparato militarizado que le dio mayorías superiores al 60%.

El gobierno de Museveni se caracterizó por traer estabilidad económica, un fuerte fundamentalismo religioso, la aplicación de torturas a opositores y la insistencia del presidente por instalar la "kill the gays bill" (ley de pena de muerte para homosexuales).

Si embargo, Museveni fue un gran aliado de los Estados Unidos, lo que le permitió que, a los ojos del mundo, no lo vean taaaaan dictador como Maduro, Al-Asad, Gaddafi y otros. Era un dictador pro-yanqui, así que en las violaciones a los DDHH de Uganda nadie se metía.

¿Que pasó ahora? el crecimiento del Internet en el país generó interesantes movidas opositoras que, no pudiendo salir a la calle, se expresaron por redes sociales y demás plataformas, complicando seriamente la estabilidad política de Museveni.

De ahí sale su principal opositor, Bobi Wine (@HEBobiwine). Un cantante de 37 años, de orígenes humildes, influencer de redes, que usó su visibilidad para promover la resistencia al regimen y difundir las cosas que pasaban.

Bobi Wine reunió detrás de sí a todo el progresismo, el incipiente feminismo, sectores de centroizquierda, la juventud y un poco del honestismo de las grandes ciudades en las que impera el hartazgo del régimen autoritario de Museveni.

Acá tienen una canción de Bobi Wine, por si quieren chusmear.

Lo curioso de esta elección es que el crecimiento de Bobi Wine hizo que, por primera vez, Museveni se sienta realmente amenazado y en peligro. Es por eso que desató toda una serie de maniobras turbias para entorpecer el proceso electoral.

Por ejemplo, firmó un decreto para cortar Internet en todo el país durante las 48 horas previas a la elección. También limitó el número de centros de votación para desincentivar el voto, aunque el nivel de participación que se espera es record.

Este es sólo el final de una campaña violentísima, con represiones a actos de Wine que terminaron con muertos, policías que tiroteaban a Bobi a donde iba y el asesinato de su guardaespaldas.

Con las urnas ya cerradas, sin Internet en el país y sin observadores internacionales (no los dejaron entrar), no se sabe cuándo estarán disponibles los resultados ni que tan confiables serán. Por abajo, se empieza a sentir el pulso de la violencia y los deseos de insurrección.