Thread by @hectoralexx

¿Cómo nació el llamado "lopezobradorismo"?

¿De dónde viene?

¿Es una simple ruptura del PRD, que a su vez lo fue del PRI?

No.

En este hilo, motivado por una reflexión con la maestra @violetavr se trata de dar una aproximación, útil para el momento que vivimos.

(Hilo)

López Obrador es un personaje muy estudiado desde diversos ángulos, donde destacan desde luego el periodismo y las ciencias sociales.

En muchos de esos trabajos la pregunta guía es la reflexión de cómo empezó su singular liderazgo político.

¿Fue acaso en 2006 como candidato presidencial?, ¿fue en 2000 cuando comenzó su periodo como Jefe de Gobierno en la Ciudad de México?, ¿fue cuando dirigió al PRD y se tornó en el activista más visible contra el Fobaproa?

La respuesta atraviesa esos episodios, pero va más atrás.

A AMLO se le ha tratado de definir como "caudillo", "mesiánico", "cesarista", etiquetas que aluden a que es un personaje cuyo contacto con la gente carece de intermediarios.

Sin embargo, la evidencia sugiere que es más un político con un liderazgo carismático clásico weberiano.

Su preeminencia en la política se construyó a base de una biografía y trabajo político inusuales, donde uno de los puntos de inflexión es su trabajo como director regional del Instituto Nacional Indigenista en Tabasco, en 1977.

Y lo "inusual" de AMLO consistió en que se trataba de un funcionario hiperactivo, que difícilmente se quedaba en su oficina por preferir el trabajo en terreno y que se le recordó como un funcionario eficaz.

Todo ello, mientras vivía en un lugar modesto "como un chontal más".

Ese trabajo, sumado a los beneficios concretos que implementó en la zona de Chontalpa, le generaron un visto bueno amplio entre habitantes de la zona.

La socióloga polaca Irena Majchrzak, estudiosa de la educación en Tabasco, registró eso en su libro "Cartas a Salomón" en 1982:

A la par de Majchrzak, los biógrafos serios de AMLO (Blanca Gómez, Héctor Zagal, Alejandro Trelles, Jaime Avilés, Jorge Zepeda, Mauricio Merino), más allá de si simpatizan o no con él, coinciden en ese punto: AMLO tuvo un desempeño bien visto en la región en ese periodo.

AMLO en ese momento era priista, sin embargo, fue siempre un sui géneris: llevaba vida inusualmente austera, recorría su estado a ras de tierra, era estudioso de la región. Más tarde, por diversas razones, simpatizaría con la Corriente Democrática del PRI liderada por Cárdenas.

El papel de AMLO en el INI fue inédito, porque con base en él fue que en 1988 un grupo de ciudadanos chontales sugirió a Cuauhtémoc Cárdenas y otros dirigentes que su movimiento electoral postulara a López Obrador como candidato a gobernador de Tabasco.

Ello supuso que AMLO fuera:

-Único candidato a gobernador postulado por FDN en el país.

-Único candidato que hizo campaña a ras de piso.

-Primer opositor competitivo en Tabasco en la historia.

Se le reconoció un 22% de votos, cuando la oposición ahí antes no rebasaba 4%.

Su trabajo como priista sui géneris, su tránsito a la oposición y el impulso que recibió de comunidades chontales, aunado a una campaña inédita para gobernador de Tabasco, ya hablaban de un personaje con liderazgo local, un visto bueno social basado en elementos concretos.

(Por cierto, los que pretenden explicar todo con un "AMLO=PRI" no notan su reduccionismo absurdo. Más allá de las contraluces del tabasqueño, ¿se podría nombrar a otros priistas que trabajaran de ese modo? ¿Alguien imagina a Madrazo o Alito madrugando y viviendo modestamente?)

Después de 1988 AMLO consolidó ese liderazgo. Fue el primer dirigente local del PRD en Tabasco y tornó a ese instituto en un "partido-movimiento" dedicado a dos cosas: denunciar inequidades y trampas electorales y aglutinar movimientos sociales ambientalistas y campesinos.

Su activismo y conexión con movimientos sociales hizo que el PRD tuviera números extraordinarios en Tabasco en la elección intermedia de 1991.

Mientras el PRD no rebasó el 8% de votos a nivel nacional, en Tabasco, con todo y fraudes, alcanzó un 18%.

Ahí AMLO comenzaría a alcanzar notoriedad nacional porque fue de los pocos dirigentes perredistas que hicieron frente contra el fraude electoral.

AMLO llamó a una protesta (el llamado "Éxodo por la democracia") en 1991 para defender triunfos del PRD en el occidente de Tabasco.

Ese hecho sería clave, pues fue un acto de resistencia pacífica efectiva: al final al PRD se le reconocieron triunfos y AMLO estrechó vínculos con personajes como Cárdenas, Salvador Nava o Rafael Landerreche, como ayer recordaba @lhan55 jornada.com.mx/2018/03/10/opi…

AMLO ahondó su papel de denunciador de fraudes electorales y derroches delictivos.

Por su prestigio en ese sentido, el ingeniero Heberto Castillo lo invitó a su campaña al gobierno de Veracruz en 1992; y en 1994 documentó plenamente el fraude de Roberto Madrazo en Tabasco.

La peculiaridad del liderazgo de AMLO es que denunciaba consistentemente esas trampas, buscaba vincular al PRD con movimientos sociales, seguía viviendo modestamente y era militante de la resistencia pacífica.

En 1996 AMLO se convirtió en líder nacional del PRD, donde imprimió ese estilo: no fue sólo un partido electoral sino el gran activista opositor contra atracos como el Fobaproa.

Eso haría que en 1997 ese partido obtuviera los mejores resultados de su historia hasta entonces.

Bajo la dirección de AMLO, el PRD logró:

-Quitar al PRI mayoría en San Lázaro por primera vez en la historia.

-Ser segunda fuerza política nacional.

-Primera vez ganó gubernaturas (tres: Zacatecas, Tlaxcala y BCS).

-Ganar la elección a Jefe de Gobierno, con Cárdenas.

Ahí ya se vislumbraba a un actor político que tenía un amplio liderazgo regional y ahora visibilidad nacional.

Su candidatura al GDF y su gobierno ahí, por su hiperactividad y preocupación inclusiva, consolidarían ese liderazgo ahora a nivel nacional.

En ello influyó no sólo sus programas de gobierno, sino que fue un contrapeso ante Fox, quien de forma antidemocrática ejerció contra AMLO un hostigamiento persistente mediante instituciones públicas.

En democracia son válidas las discrepancias y los conflictos. Siempre que no se usen recursos ilegítimos para ello de por medio.

Fox alentó o inició golpeteos jurídicos y mediáticos contra AMLO en aras de debilitar su creciente aprobación como Jefe de Gobierno.

-En caso Paraje San Juan, panistas hampones querían que GDF pagara 1810 millones de pesos de indemnización a un particular.

-Con el Nicogate, se acusó falsamente que "AMLO tenía chofer que ganaba 60 mil pesos".

-PRI-AN trataron de reformar constitución y quitar recursos al DF.

Después de estas bajezas, vino el gran catalizador del lopezobradorismo: la solicitud de desafuero que hizo la PGR en contra del tabasqueño en mayo de 2004, por "desacato a la orden de un juez de detener una construcción en un predio particular".

La acusación era un fraude total:

-El predio había sido expropiado antes de que AMLO fuera gobernante.

-El fragmento en litigio ni era propiedad del quejoso.

-Los peritos acreditaron que no hubo tal desacato.

Empero, esa acusación podía devenir en que AMLO fuera a la cárcel.

Esa injusticia fue vista como tal por el grueso de los mexicanos. Millones participaron en la resistencia contra ese atropello.

La clave era que esa injusticia se veía como corolario de una cadena previa de hostigamiento.

Los mexicanos se movilizaron porque consideraron que el desafuero era la punta de lanza de una serie sostenida de acoso legislativo y judicial.

Se aclaraba que era un golpe antidemocrático, no una acción "por el estado de derecho".

De esa movilización se derivaría un movimiento político-social que evolucionaría en diversas facetas hasta ganar la elección de 2018.

Por eso el desafuero es la génesis de Morena, pero también fue sólo la consolidación del lopezobradorismo, cuyas raíces datan desde 1977.

López Obrador es un político de contraluces cuya biografía ostenta diversos errores y defectos.

Sin embargo, no se le puede regatear una "inusualidad" en su modo de trabajar y de vivir.

Ello le ha granjeado un liderazgo amplio y también ser blanco de ataques no democráticos.

Por eso su desafuero fue un gran catalizador y un consolidador de un liderazgo previo.

Es una necedad majadera querer comparar ese hostigamiento con los casos actuales de seres políticamente débiles y rotundamente sospechosos de corrupción, como Samuel García o G. Cabeza de Vaca

En dos libros de mi autoría planteo esta tesis: el desafuero es la génesis de Morena como partido.

Pero el movimiento político social que rebasa a Morena y se llama lopezobradorismo, es más añejo y complejo.