Guevara era muy torpe en cuestiones militares, y Castro lo tenía medido con precisión: lo dejó solo en Bolivia dando vueltas sin orden, hasta caer en manos del ejército.
¿Por qué transcurrieron dos días entre su captura y su ejecución?
Sencillo: el Presidente Barrientos esperó a que hubiera una respuesta desde Cuba, concretamente de Castro, para canjear a Guevara por alguna concesión exigida al régimen cubano.
A eso se refería Guevara cuando, al ser capturado, dijo "valgo más vivo que muerto". Ingenuo.
Todos creyeron que Castro acudiría en auxilio de su "amigo" y pues... no. Lo dejó solo. Y no fue cálculo político: Guevara, necio y poco pragmático, pero carismático y con gran cartel en Cuba, era un pinche estorbo para Fidel, que llevaba años queriendo sacárselo de encima.
Previo al cagadero en Bolivia, Fidel envió a Guevara al Congo, a establecer un foco guerrillero, con la esperanza de que allá le pegaran un tiro al huevón argentino, y le resolvieran ese tema a Castro y la revolución, pero no sucedió: Guevara pronto pidió volver a Cuba.
Para ello, Ernesto alegó (siendo él mismo un atenido de putísima madre) que "los negros son flojos, indolentes, no quieren hacer la revolución".
Castro no le permitió volver, y lo mantuvo en Europa del Este en un ostracismo culero y ofensivo.
Guevara quería, después de su cagadero horrible en el Congo, instalar un foco guerrillero en Argentina, pero no lo dejaron. A cambio, Castro le ofreció apoyarlo a poner uno en Bolivia, para que luego de ahí "la revolución bajara hasta Argentina". Y Guevara, tan pendejo, aceptó.
Y todo fue mal. Todo. Aún peor que en el Congo, que ya es decir un madral.
Y de apoyo cubano, Guevara recibió puro pito: ni siquiera una declaración pública de solidaridad. Cero. Cartitas culeras y no más.
Eso debió bastarle para entender el panorama, pero era torpe y necio.
Así que cada vez que usted vea la foto de Ernesto Guevara muerto en la escuelita de La Higuera, sepa que a eso lo envió su "amigo" Fidel Castro: a morir como perro callejero, solo y con frío, víctima de la culerez castrista y de su propia estupidez.
Con esos amigos... 💅
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Y sí: los presidentes de la república son fruto de pactos entre grupos, no sólo los tres últimos.
A partir de Zedillo se tuvo que meter a la ecuación a los votantes, para que VALIDEN la decisión del pacto cada seis años, pero siempre la decisión es de los grupos.
Fox ganó con el beneplácito de muchos grupos que antes habían apostado por el Pri.
Calderón ya no recibió ese amplio apoyo priista: muchos migraron hacia López, y sólo uno de gran peso, el de Elba Esther, lo apoyó... y con ese le alcanzó, por 0.5%
Un día entré caminando al estacionamiento de Liverpool, porque no tenía dinero para pagarlo.
Pero hasta hoy no le he dado like a un tuit de Lily Téllez: todavía conservo un centavo de vergüenza.
Respétense, manos, no mamen.
Sí saben que el algoritmo de tuitah avisa a qué le dan like, manos?
Evidentemente cada quien da like con plena libertad a lo que se le inflan las gónadas, pero luego no pregunten que porqué ya no platica uno con alguien, o que cuál mala cara vio.
En la vida (y tuitah es parte obvia y representativa de ella) todos tenemos UN chance más o menos seguro; muy pocos tienen dos, en ciertas circunstancias; y nadie tiene tres.
Esto se debe a que somos un chingo de individuos, y cada vez tenemos más canales para interactuar.
Mi mamá me preguntó si sería conveniente conseguir velas para tenerlas en casa, porque López amenaza con regresarnos a la triste época de los "apagones".
Yo le dije que no: que la #ReversaEnergetica no pasará.
Prácticamente toda la segunda mitad del siglo XX, la necedad del gobierno federal por controlar la generación de energía, impidió el desarrollo de México y su sociedad.
Hasta finales de los años 80, tuvimos gobiernos capaces de entender eso y modernizar el sector, abriéndolo.
Los "apagones" eran necesarios porque el diferencial entre la energía que el país requería y la que el gobiernito culero podía generar, era enorme!
Para "equilibrar", el gobierno sencillamente nos bajaba el switch al atardecer, y lo volvía a subir cuando le daba la puta gana.
Cuando yo era niño, la CFE tenía el monopolio en la generación de energía y no podía cumplirle al país: todas las putas tardes cortaba el suministro, afectando hogares, oficinas y fábricas.
Por qué hay gente como @alitomorenoc considerando un retorno a ese cagadero?
En los años 80, el gobierno acaparaba cada aspecto productivo del país, y quería ser el niño en el bautizo, la novia en la boda, y el difunto en el velorio... sólo consiguió lo último.
Torpe, ineficiente, y estructuralmente incapaz, obstruyó nuestro desarrollo.
Hoy, con estos pendejos a cargo, cada labor a cargo del gobierno federal es más torpe, lenta, incompleta, incapaz, inútil, que antes.
Si a Salinas y su gabinetazo tuvimos que reducirles las labores porque no se daban abasto, con mayor razón a esta piara de pinches ineptos.
Aquí en el autolavado hay un tipo con un ramo de flores en la mano, bien bañado y peinado, hablando por teléfono con alguien a quien le ha prometido, en voz muy alta, que está por llegar... que van a desayunar rico, y que le lleva una sorpresa.
El auto de este amigo es un Ford Escort, tipo vagoneta, ya muy viejito: la pintura no brilla en zona alguna, y la defensa está rota: alguna vez sufrió un percance de consideración, y no fue reemplazada... el chavo del autolavado pasa la franela con muuucho cuidado al secarla.
El mismo chavo pregunta al tipo si quiere que le ponga "almorón" en los interiores, y no sólo en las llantas, y éste pregunta cuál sería el costo; se lo dicen, y queda en silencio, calculando... se decide por el "sí", y el chavo procede.
Lo necesario pocas veces es agradable, pero... posss es necesario.
Nada es más fácil que agradar a las masas: basta con identificar lo que las dispara, y dárselos bien narrado. Con las pavorosas herramientas digitales de hoy, es hasta entretenido, pero poco útil.
Yo perdí mis llaves en una calle obscurísima, y ahí ando, buscándolas... jamás seré tan estúpido como para ir a buscarlas frente a mi casa, sólo porque ahí hay más luz.
Lo necesario no admite sucedáneos: quien lo rehuye, lo lamenta.