Thread by @leogarciamx

Que bello tuit para ilustrar uno de los rasgos más fácilmente identificables del fascismo: el culto exacerbado a la personalidad.

Y del fanatismo: el hombre que es motivo, causa, principio y fin que encarna todas las virtudes que desearía ver en sí mismo, aunque no sean reales.

https://twitter.com/craviotocesar/status/1448041900259352580

De paso, además, implícitamente el desconocimiento al prójimo, todos aquellos que que no concuerdan con sus ideas. Sí acaso existen tales, debajo de la retorica ramplona.

"Nosotros" y "ellos".

Ningún acto de “nosotros” hacia “ellos” está equivocado, ni es una transgresión, una ofensa, mucho menos un crimen. Al contrario, es deber de “nosotros” defender y prevenir las transgresiones, ofensas y crímenes, porque siempre son “ellos” los que los cometen contra “nosotros”.

“Ellos” nunca hacen nada bueno, son malos por origen y naturaleza y no pueden ser diferente de eso ni nunca van a cambiar. O buen, dice el caballero "no los mueve el dinero, los mueve el amor".

¿Amor? El poder de “nosotros” es bueno, justo, digno y honroso. Dicen.

El poder en el líder, siempre que ha sido elegido por “nosotros”, es porque tiene, o recibe, todas las virtudes, méritos, que “nos” representa, q “nos” transfiere el poder como ente colectivo que “lo hemos” puesto en “nuestra” representación y para que ejecute “nuestra” voluntad.

Es tal, la capacidad de esa transferencia, que “nosotros” no pueden ver cuando el líder llegó usándolos y ahora sólo la afinidad la refuerza ofreciendo el exacerbado culto a la propia imagen como una forma de culto a “nosotros”. Para los que se la pasan llamando 'fachos' a todos.

Esa relación simbiótica es irrompible.

Él es el grupo, el grupo es él.
La egolatría de él, es la egolatría de “nosotros”.

Y en consecuencia, de manera ya imposible de corregir llegados a este punto, las taras, defectos de personalidad y patologías del líder, serán las taras, defectos y patologías del grupo.

Las fobias y aversiones del líder, serán las fobias y aversiones del grupo.

Las obsesiones patológicas irreales de un mundo ficticio que guían al líder, serán las obsesiones patológicas irreales de un mundo ficticio que guíen al grupo.

Y es que “nosotros”, el grupo sometido y subordinado, no pueden ver que son explotados psicológicamente, empezando por el emborronamiento de su individualidad y capacidad de juicio crítico.

Somos "todos" o ninguno, dicen.

“Nosotros” creen que el líder es la encarnación del poder que merecen, es el poder que lucha por “nosotros”, aunque esa lucha sea más bien un comportamiento paternalista en una incesante dinámica de premio y castigo.

Para el grupo sometido a la voluble y unipersonal voluntad del líder, “nosotros”, cualquier superlativo virtuoso es poco para describir al líder.

El punto culminante es que se confunda a esta dinámica con AMOR. Por eso, sin duda afirman “Amor con amor se paga”.