¿Infantes de Marina españoles luchando en las Highlands de Escocia hombro con hombro con los clanes? ¿Una guarnición española defendiendo el castillo de Eilean Donan? Ocurrió en 1719 en la batalla de Glenshiel. En ese valle están el Peak of the Spaniards y Spaniards' Pass.
Al declararse la guerra de la Cuádruple Alianza contra España, el cardenal Alberoni, hombre de estado de Felipe V, decidió apoyar los intereses de los legítimos sucesores del trono de Escocia, los Estuardo. Así, España preparó una flota para expulsar a los británicos de Escocia.
El plan español era realizar un desembarco de distracción en Escocia con infantes de marina españoles para escoltar a James Keith, uno de los principales líderes jacobitas, para levantar a los clanes contra los ingleses. Así, estos se verían obligados a mandar tropas al Norte.
Mientras tanto, el Sur de Inglaterra quedaría desprotegido, donde desembarcaría un contingente español de 7.000 hombres con apoyo de 27 naves de la Real Armada. El mando los ostentaría el duque de Ormonde. Así, los leales a los Estuardo y los españoles marcharían sobre Londres.
Tras tomar la capital inglesa y deponer al rey Jorge, ambos reinos quedarían en manos de Jacobo, con el nombre de Jacobo III de Inglaterra y VIII de Escocia, un rey católico, religión muy mayoritaria entre los clanes de las Tierras Altas. Los planes no fueron según lo esperado.
La primera parte del plan se cumplió sin mayor problema y dos fragatas españolas desembarcaron a 260 hombres al mando del teniente coronel Nicolás de Castro Bolaño cerca del lago Alsh. Sin embargo, algunos clanes no quisieron arriesgarse antes de que llegara el contingente españo
Así, James Keith tuvo que marchar al Sur, donde estableció su cuartel general en el castillo de Eilean Donan, dejando atrás una guarnición de 50 hombres, la mayoría españoles, con un teniente y un sargento al mando. Mientras, el resto de la tropa continuó hacia el Sur.
Desgraciadamente, una serie de tormentas y vientos contrarios dispersaron la gran flota española que había partido de Cádiz, teniendo que regresar las naves a los puertos españoles. Ese contingente nunca llegó a Inglaterra. Sin embargo, los escoceses levantaron 1.000 hombres.
Entre los principales líderes estaba Robert Roy McGregor, el famoso Rob Roy. En las cañadas de Glenshiel, en junio, el contingente aliado se encontró con las tropas regulares inglesas, produciéndose una escaramuza. Tras una serie de combates, los escoceses se retiraron.
En cambio, los españoles del teniente coronel Bolaño continuaron combatiendo cubriendo la retirada escocesa, destacando el mando del sargento mayor Alonso de Santarém con hombres del Regimiento Galicia. Los ingleses tendrían unas 140 bajas, por 100 de los españoles y escoceses.
Sin embargo, al retirarse los hombres del clanes, los españoles quedarían muy sobrepasados en número y se verían obligados a rendirse. Finalmente, serían llevados a Edimburgo junto a los capturados en Eilean Donan y devueltos a España con la paz.
Este sería el último contingente enemigo en pisar suelo británico y batirse en campo abierto en la historia de Reino Unido. En Glenshiel, los escoceses llamaron Spaniards' Pass al lugar por donde cruzaron éstos el río y Peak of the Spaniards donde resistieron los últimos momentos
Bibliografía:
Crespo-Francés, J. A. El último intento de invasión española de las Islas Británicas. La batalla de Glen Shiel. Madrid: Ejército de Tierra.
Láminas:
Mark Churms
Augusto Ferrer-Dalmau
Carlos Parrilla
y otros
Nota: aunque parte de la bibliografía (sobre todo anglosajona) afirma que fueron infantes de marina españoles, la mayoría de la española sostiene que fue infantería de línea embarcada del Regimiento Galicia (1º y 2º Compañía del 1er Batallón).
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Tal día como hoy, 7 de enero de 1579, nacía Juan Manuel Pérez de Guzmán, duque de Medina-Sidonia, y capitán general del Mar Océano. Dirigió en Cádiz la defensa del ataque de una gran escuadra anglo-holandesa de 105 naves y 15.500 hombres. El enemigo se retiró con muchísimas bajas
La ciudad de Cádiz, por su natural posición estratégica, ya había sido objeto de los ataques ingleses de Drake y Essex en el siglo anterior, no consiguiendo sus objetivos. Los espías españoles rápidamente informaron de la llegara de la gran flota enemiga.
En aquel momento la plaza tenía 300 hombres y estaba en manos de Fernando Girón de Salcedo, un anciano aquejado de gota, pero que era un veterano soldado y había sido maestre de campo en las guerras de Flandes. Juan Manuel Pérez de Guzmán era el capitán general de Andalucía.
Se dice habitualmente que tras Guerra de Sucesión España no era una potencia militar, pues la realidad es que tras la conquista española de Cerdeña de 1717, para evitar la guerra, se ofrecieron a Felipe V los ducados Parma y Toscana. E incluso Gibraltar.
España se negaría, y el año siguiente llevara a cabo otra campaña en Sicilia, cayendo la isla en poco tiempo. Ambas operaciones demostraron la potencia militar de España, y que el resto de potencias, entre ellas Reino Unido, Francia, Provincias Unidas y Austria, no querían guerra
Es algo que suele omitirse siempre que se habla de la historia de principios del siglo XVIII, cuando finalmente las cuatro potencias, Cuádruple Alianza, le declararon la guerra a España. En esa guerra solo hay que ver las bajas: 11.250 austríacos; 6.000 británicos; 3.000 francese
Tal como hoy, 5 de enero de 1713, nacía uno de los hombres más brillantes no sólo del siglo XVIII sino de la historia naval española: Jorge Juan. Marino militar de gran valía, sería director de la Real Academia de Guardias Marinas, autor de tratados de náutica, científico y espía
Ingeniero naval de gran valía corrigió el tardío sistema español de Gaztañeta-Autrán aplicando innovaciones tecnológicas desarrolladas en Reino Unido, consiguiendo como espía hacerse con planos y expertos constructores, la mayoría irlandeses. Puesto precio a su cabeza.
Llegaría a España disfrazado de simple marinero pero habiendo contratado a más de 50 expertos en construcción naval para desarrollar lo que se llamó sistema inglés o Jorge Juan, del que el poderoso Santísima Trinidad sería la joya.
Si alguna vez han visto la película o leído los libros de la serie Master and Commander sabrán que el barco protagonista era la fragata Surprise. Pues la Real Armada tuvo la fragata Sorpresa, que se batió heroicamente en la batalla del cabo Passaro. Contra 6 navíos ingleses.
En el contexto de la conquista española de Sicilia de 1718, Reino Unido había enviado al almirante Byng al Mediterráneo para apoyar a los imperiales austriacos, sin embargo, el gobierno de Londres reiteraba a España su no beligerancia y actitud mediadora y pacífica.
Tras desembarcar las tropas españolas y dar apoyo en Mesina, la escuadra española del teniente general Gaztañeta navegaba desde la Punta del Faro en dirección al cabo Passaro, cuando se encontró en las inmediaciones a la escuadra británica. Al no haber guerra, les saludaron.
¿El Reino de Navarra tuvo marina de guerra y marineros? ¿Pero qué pasó con ellos? Lo primero es que cabe destacar que el Reino de Pamplona y posteriormente de Navarra tuvieron salida al mar. Así, la armada navarra, propia del rey de Navarra, fue muy importante tecnológicamente.
Para dar contexto, hay que decir que desde la fundación del reino de Pamplona y con su consiguiente extensión terminaría por alcanzar el mar con la costa Cantábrica, lo que actualmente sería Guipúzcoa y Vizcaya, con ciertas pungas con el reino de Asturias/León y luego Castilla.
En estos tiempos los marinos navarros llevaron a cabo un comercio muy importante con Francia, tradicional aliada y apoyo, navegando con asiduidad el golfo de Vizcaya y la costa Cantábrica. De hecho, estos marinos demostraría ser muy buenos y hábiles en esta navegación.
Tal día como hoy, 1 de enero de 1717, nacía Antonio Barceló. ¿Sabían que siendo un brillante marino fue muy discutido en su tiempo? Hubo muchas envidias a causa de su extracción humilde por parte de los aristocráticos oficiales de la Real Armada y contó con más bien pocos amigos.
El hecho de que soliera gritar las órdenes, aunque no hubiera ruido, debido a su incipiente sordera, le dio fama de autoritario entre sus subordinados. Por otro lado, se le consideraba un hombre poco instruido y se dice vestía con despreocupación, siendo eminentemente práctico.
Además, daba poca importancia a las formas y maneras, algo muy valorado por la aristocria y los círculos cortesanos, donde eran habituales los oficiales navales de alto rango. En 1762, había sido herido en un abordaje, recibiendo una bala de mosquete en la mejilla izquierda.