La OSTEOARTRITIS se considera una consecuencia del desgaste del envejecimiento atribuible a la obesidad y la inflamación. Sin embargo, los estudios en poblaciones no industrializadas CONTRADICEN este punto de vista y muestran que la OA es una enfermedad por desajuste prevenible.
Un análisis de más de 2500 rodillas de adultos norteamericanos mayores de 50 años durante los últimos 6000 años muestra que la prevalencia de OA de rodilla relacionada con la edad se DUPLICÓ en las últimas dos generaciones a medida que disminuían los niveles de actividad FÍSICA.
Aunque las cargas alteradas generadas por caminar con mayor frecuencia sobre pavimentos duros o con ciertas formas de calzado podrían ser factores, otra posibilidad que amerita más estudio es la INACTIVIDAD FÍSICA, que se ha vuelto epidémica durante la era posindustrial.
Las personas menos activas cargan MENOS sus articulaciones desarrollan cartílagos más delgados con menor contenido de proteoglicanos así como músculos más débiles responsables de proteger las articulaciones estabilizándolas y limitando las fuerzas de reacción articular.
La INFLAMACIÓN crónica de bajo grado se ve exacerbada por la inactividad física, las dietas modernas ricas en carbohidratos altamente refinados y la adiposidad excesiva magnifican y aceleran el daño en los tejidos de las articulaciones.
La actividad física puede ser PROTECTORA porque reduce la inflamación, fortalece los músculos que protegen las articulaciones y ayuda a mantener el volumen del cartílago.
Desde una perspectiva evolutiva, la artrosis de rodilla es una "enfermedad de desajuste" que es más frecuente o grave porque nuestros cuerpos no se adaptan de manera a los entornos modernos.
Otras enfermedades de desajuste como la hipertensión, la cardiopatía aterosclerótica y la diabetes tipo 2, que también se han vuelto epidémicos durante las últimas décadas, están fuertemente asociados con la OA de rodilla, lo que sugiere causas y factores de riesgo comunes.
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"Una mente agitada es una almohada inquieta", Charlotte Brontë. La interrupción del #SUEÑO contribuye a las principales afecciones psiquiátricas, incluidas la depresión, la ansiedad y las tendencias suicidas.
Los seres humanos son la única especie que se priva deliberadamente del sueño sin una ganancia legítima.
Una persona muere cada hora en un accidente de tránsito en EE.UU. debido a un error relacionado con la fatiga. Superan a los causados por el alcohol y las drogas combinados.
Cuando estás dormido no puedes recoger comida. Ni socializar. Ni encontrar pareja y reproducirte. Ni nutrir o proteger a tu descendencia. El sueño te hace vulnerable a los predadores. Es uno de los comportamientos humanos más desconcertantes preservados por la Evolución.
Podríamos comer menos, no habría pandemia de obesidad. Pero NO podemos hacerlo. Porque no solo estamos comiendo más. Estamos comiendo más de algunas cosas y menos de otras. Y es en esas "cosas" donde está la respuesta a porque no podemos comer menos y a la pandemia de obesidad.
La ingesta de carbohidratos refinados aumentó del 40 % al 55 %. Nuestro consumo de FRUCTOSA se ha duplicado en los últimos treinta años y se ha multiplicado por seis en el último siglo.
Una caloría quemada es una caloría quemada, pero una caloría consumida NO es una caloría consumida. La CALIDAD de lo que comemos determina la cantidad y nuestro deseo de quemarlo. ¿Y la responsabilidad personal? Solo otro MITO urbano aniquilado por la ciencia real.
El cuerpo humano está ADAPTADO para cazar mamuts y para combatir infecciones, pero NO las dos cosas al mismo tiempo. Por qué cuando estamos ENFERMOS nos comportamos como "enfermos". ¿Qué es la LASITUD?
Para favorecer la actividad se reduce la inmunidad (cortisol) y viceversa. Activar el sistema inmunitario es energéticamente costoso, debido a los costos energéticos de generar fiebre, la síntesis de proteínas y la producción y uso de otros componentes del sistema inmunitario.
Por cada aumento de 1 °C en la temperatura corporal, la Tasa Metabólica en Reposo aumenta 13 %. Dado el alto costo metabólico, sería imposible mantener la respuesta inmunitaria sin un aumento sustancial del gasto energético o una RECONFIGURACIÓN del presupuesto metabólico.
La codificación predictiva RÍGIDA es una obstáculo para aprender. La apertura o mentalidad abierta mejoran el aprendizaje.¡Aprender es modificar el modelo predictivo!
Los datos problemáticos que requerirán un cambio de visión científica a menudo están a la vista durante décadas o incluso siglos antes de que ocurra el cambio de visión.
El problema no es que no se hayan hecho las observaciones críticas. El problema es que la comunidad no sabe dónde ubicarlas en sus MODELOS mentales, por lo que o bien los ignora o los tergiversa como algo diferente de lo que realmente son.
Una de las consecuencias de la "cultura del riesgo" es la sobreprotección (paternidad paranoide). Las mismas acciones que reducen el peligro razonable impiden el desarrollo de las habilidades necesarias para afrontarlo.
Las conductas de riesgo son HORMÉTICAS: dosis moderadas promueven habilidades de afrontamiento, altas dosis el daño, pero muy bajas dosis inhiben las funciones adaptativas. El mundo se hace confortable y minúsculo.
La activación autonómica y adrenal en la infancia aporta INFORMACIÓN sobre las amenazas y oportunidades del ambiente. Si se repite, esta información se integra a los parámetros (setpoint) generando patrones o modalidades de reactividad ajustadas a su evaluación del mundo.
La medicina cumple la función de legitimar el padecimiento mediante un DIAGNÓSTICO (daño). Los pacientes buscan esa legitimación. Ambos se confirman a sí mismos confirmando un MODELO explicativo con consenso social: "el cuerpo como máquina". Pero ese modelo es FALSO (y peligroso)
La legitimación social del padecimiento permite que lo que se siente encuentre una explicación sin culpa. Sin una diagnóstico el sufrimiento del paciente se considera sospechoso y su situación es una especie de falla moral.
A veces informarle a una persona que sus estudios son NORMALES no es recibido como una buena noticia. Ahora el paciente sigue sufriendo, pero sin la legitimidad de una enfermedad.