Leo a @alekboyd dando la primicia de que @USTreasury sancionó a los propietarios de Derwick. De ser así han pasado siete años, cuatro meses y 20 días de aquel primer reportaje sobre Derwick que escribí en @UNoticias titulado La trampa eléctrica. ¿Será que se hizo justicia?
Ese primer reportaje, publicado el 7 de agosto de 2011, provocó que Leopoldo Alejandro Betancourt López y su asesor Nelson Rivera intentaran convencerme de que ellos eran unos buenos muchachos que hacían un gran bien al país
El segundo reportaje lo publiqué en @unoticias el 18/09/2011. Allí conté que Derwick, Ovarb (Roberto Rincón) y KCT (Blas Herrera) vendieron equipos eléctricos con más de $400 millones de sobreprecio a Bariven.
Luego de ese reportaje un sujeto de apellido Schaffernot, enviado por Gonzalo Morales según dijo el sobornador, me ofreció más de $120 dólares para que no hablara más del caso Bariven, en especial de Roberto Rincón.
En diciembre de 2012, publiqué una nota en la cual alerté que el FBI buscaba información sobre Derwick. La respuesta fue ordenar a funcionario del Sebin intimidar a mi madre y a mí, así como aliarse con Antonieta Jurado y Miguel Henrique para atacarme a través de @ElNacionalWeb
En marzo de 2015, con la ayuda de una persona muy valiosa y querida por mí, @SoyJoseAguilar, en @ArmandoInfo publiqué la filtración de Daniel Rossenau sobre cómo Derwick vendió máquinas viejas con sobreprecio y como si fueran nuevas, traídas de países como Tanzania
El único expediente abierto en contra de Derwick por la Fiscalía de @lortegadiaz, terminó en sobreseimiento. Los tres fiscales que trabajaron el caso se comieron los cuentos de Betancourt y Trebbau, y desestimaron las pruebas que presenté
