Los millennials quieren vivir de su trabajo. Qué hijos de puta. 
“A ver si vamos espabilando”. “Se creen Dios”. El artículo ya empieza con condescendencia y chulería. A ver si quien se creía Dios (lo de la D mayúscula lo voy a obviar, pero se podría comentar aparte) era la firmante del artículo...
A ti lo que te pasa es que te inyectaron clasismo en vena, puro y sin cortar. Te vendieron la idea de que la dignidad te la daban con el título de la universidad. Del clasismo se sale, pero hay que querer. Y el despertar de ese sueño es duro.
“No me quejaré ni me quejo. ¿Sorprendido?” Siguiente línea: SE QUEJA FUERTE. Efectivamente, los millennials son unos llorones. Tú la primera.
Más condescendencia, que en el encabezamiento no había bastante. Pero el “joven y lozano editor de vídeo de 23 años” tiene bastante más claro que tú que no va a heredar la empresa. No sé si es él quien debería espabilar...
Eeeeeehmmm... SÍ, deberías. Muy posiblemente hayas escrito esta columna fuera de tu horario laboral y te van a pagar un mojón por ella. Tu jefe se está riendo de ti, pero tú sigue riéndote del millennial, que la risa va por barrios.
No voy a comentar otra vez lo de la condescendencia por no repetirme (“Ay, cariño”?!). Y lo de que “todo el mundo” tiene una carrera, un máster y dos idiomas... Pues será en tu mundo de sobrada de la vida.
El siguiente párrafo hay que considerarlo a la luz del “no eres especial” que he resaltado:
TÚ no eres especial. YO soy superespecial, porque mi profesora de flamenco (sin nombre, la pobre mujer) me ponía al fondo. Y Don Federico era uno de esos profesores TAN buenos que necesitan humillarte para que aprendas. Que si no humillas, ni eres profesor ni eres nah.
“En mi época de estudiante”. Que naciste en el 84, me cago en dios.
A los millennials les han hecho creer que son los mejores en todo. No como yo, que he escrito este artículo para contaros que todos los demás millennials están equivocados y la única que tiene razón soy yo.
Ah, mira, por lo menos tiene claro que le están robando. A ver si lo que le jode es que el otro no se deje. Ya lo decía Nietzsche: “cuando miras largo tiempo al millennial, el millennial también mira dentro de ti”.
“Lucha por tus derechos, pero cuando no se note que lo haces, no vayamos a joderla”. Y las huelgas en domingo, no?
Pero bueno, @TribusOcultas, quitando esas dos o tres cosillas el artículo está guay. Muy riguroso.
Y bueno, vamos a ir chapando, que esta gente tan simpática se querrá ir a dormir. Empecé a comentar el artículo para matar el tiempo en el cercanías y se me ha ido de las manos. Sorry for the turra.
HABLEMOS DE LOS MILLENNIALS, COJONES YA.
