Un padre de familia en la medianía del los 30s, amantísimo padre de cuatro hijos, esposo dedicado.
Trabajador dedicado, empeñoso, puntual y cero faltista.
Excelente trabajador.
¿Por qué?
Por las razones básicas de la mayoría: estaba harto de los partidos de siempre, al grado de aprobar al único que le vendió el discurso de que era diferente.
Le dije que iba a votar nulo, que no podía avalar a ninguna de las basuras que me habían dado como opción en la boleta.
Zague me preguntó que pensaba que López Obrador.
Y le dije mi opinión.
¿Y los otros?, me preguntó.
"Los otros son mas de lo mismo, garantizado".
Así pues.
Cada quien hizo sus apuestas en la boleta de elección.
Y ya sabemos los resultados.
¿Cómo te ha ido con tu apuesta con López Obrador? - le pregunté.
Me dijo que un principio mal en su economía por un tema medular al inicio del sexenio: el huachicoleo.
-Subía el gas, la luz, la gasolina, los precios; uno no puede con tanta alza - justificaba.
Cuando el gobierno hizo su torpe estrategia de batalla contra el huacuicoleo, vino la reacción en el bolsillo.
- Está bien que el gobierno acabe con el robo de gasolina, pero eso me afectó, ahora tenía que pagar todo el costro del combustible - me dijo
Fue cuando vino el balance que cambió mi perspectiva, y que es el quid de esta reflexión.
Touché.
Y éste que escribe se quedó sin argumentos.
Perdón.
Pero para el ciudadano simple todos los argumentos salen sobrando cuando la economía familiar cuadra y mejora.
Y la de Zague y, asumo, muchos mas, mejora en la forma antes descrita.
¿Con la renuncia de Medina Mora?
¿Con la sumisión del legislativo?
¿Con la entrega de la educación a los sindicatos?
¿Con el ridiculo diario del Presidente en cadena nacional?
Hay que tener miras, mas allá de la economía familiar, de lo que hace el presidente con el país.
Pero en casa, para muchos, López funciona.
Y cuando en casa los números cuadran, la alta política es el menor de los apuros.
Ponderar la alta política, a la política para la gente de a pié.
Zague sabe poco o nada de macroeconomía, sabe que su dinero le ajusta por apoyos que recibe
- Es la oposición de los que siempre ganaban. Que se acostumbren a perder -me contestó.
Y él corresponde otorgando el beneficio de la duda aun.
A pesar de ver cómo su empresa se contrae productivamente.
Es un tiempo de transición según él.
Para dar otra perspectiva fuera de las redes sociales, y encontrarle un sentido racional a la aprobación de del quehacer gubernamental.
Quizá para muchos sea un sinsentido, pero esos sinsentidos cuentan en el momento de votar.
Pero no debemos encerrarnos en que nuestra burbuja social es la realidad del país completo.
Zague pertenece a otra burbuja, y ésta también vota.
Y de ello deben derivar los argumentos para debatir el futuro del país.
Es otra puesta.
El gobierno lo hace por el petróleo.
Zague lo hace por el presidente.
Y así vamos rumbo al 2021.
Hoy llegó mi gasero de confianza. Tenía los seiscientos pesos que me iba a costar el cilindro.
- Son sólo quinientos pesos, bajó el precio - me dijo.
Hace un mes, llegó el recibo de la luz en ceros.
Y toda la mañana he pensado en Zague y sus apuestas.