Thread by @Donvix

Sobre el estribillo feminista "Y la culpa no era mía, ni dónde estaba, ni cómo vestía" y su performance, debo decir que es un feliz y poderoso acierto.

Por donde se le vea, es un hit. Tiene todas las cualidades de un buen ejercicio de comunicación.

En estos tiempos la narrativa es la piedra angular de todo activismo; una buena narrativa (clara, sencilla, breve, emotiva) garantiza la viralidad, la visibilidad y la atención.

La narrativa contenida en ese estribillo es perfecta: cuenta, posiciona y reta en tres frases.

Ese sencillo estribillo contiene, pues, una historia completa. Compite con el cuento brevísimo del colombiano aquel sobre un dinosaurio persistente, en cuanto a maestría en el ejercicio de la brevedad, pero le gana en dramatismo y atracción.

Luego, está el ritmo. Evoca cánticos de grupos deportivos o reclutas de algún tipo, proyectando un mensaje grupal, sonoro, fuerte y solidario. Todo bien.

Para rematar, el tono es de aplomo, de suficiencia, de seguridad en uno mismo; no es un lamento, es un statement.

El resultado es su viralidad: ya lo escuché en media docena de ambientes, con videos variados, y he sido consultado sobre a qué se refiere, de qué habla, cómo empezó, porqué se está haciendo.

Reitero: es un hit limpio, atractivo e inatacable.

Imposible no simpatizar con algo hecho tan a conciencia pero natural, que marca una línea insoslayable en forma legal y por completo respetuosa.

Es un triunfo, feministas, y celebro ser testigo.

Que no les preocupe si muchos lo han convertido en meme: esa conversión es la denominación de origen de un acierto total en comunicación; si algo se vuelve meme es porque es como agua que corre cuesta abajo, incontenible y arrasadora.

Es el caso de su estribillo.

Y gracias a esa cualidad tienen a todo mundo, literalmente, repitiéndolo y llevándolo a cada rincón, incluidos sus muy odiados "machitos".

Ojalá las feministas entiendan que no importa que sea como meme: lo que importa es el ALCANCE.

Ojalá, también, tomen nota de las cualidades de este ejercicio de comunicación que les ha salido tan bien, y las repliquen en otros ejercicios por venir.

Ojalá el radicalismo deje paso a la inteligencia, porque los radicales no son capaces de ganar ni cuando ganan por goliza.

Mientras tanto, yo sigo tarareando el estribillo.

MUY bien jugado, mujeres. Y bien ganado.

#LaCulpaNoEraMia

El estribillo tiene otro derivado valioso: tiene potencial para desarrollar más detalles de la narrativa, por ejemplo:

Y la culpa no era mía,
Ni cómo bailaba,
Ni lo que bebía.

Y la culpa no era mía,
Ni cómo viajaba,
Ni dónde vivía.

Reitero: es un hit.

#LaCulpaNoEraMia