1. ¿Puede la derecha treparse al carro del paro del 9 de marzo y aprovecharse del feminismo? Es un tema que están discutiendo muchas personas, y hay un par de errores severos en el planteamiento del dilema. Te lo explico.
2. El primer error severo es pensar que cuando hablamos del paro del próximo 9 de marzo, estamos hablando de un evento "feminista". El segundo, creer que la derecha se puede trepar al carro del feminismo. Ahora vamos por orden.
3. El problema que está generando el paro del 9 de marzo es la violencia criminal contra las mujeres, y la irresponsabilidad del gobierno actual que no está haciendo nada por controlarla o contrarrestarla. Eso, en estricto, no es asunto exclusivamente feminista.
4. Por supuesto que es un tema que impacta de lleno en la agenda feminista, y creo que no exagero si digo que las activistas feministas son quienes más le están dedicando esfuerzos al asunto, pero tal y como ya se ha dicho, la violencia de género no respeta banderas.
5. A las mujeres asesinadas no se les preguntó si eran feministas o no. A sus deudos que han conocido el horror de perder de ese modo a sus seres queridos tampoco se les preguntó si estaban de acuerdo o no con el feminismo. Simplemente, se cometió el crimen.
6. Por eso, hay muchas mujeres que no se definirían como feministas, o no militantes en el activismo feminista, o que ni siquiera les importa la etiqueta, que de todos modos van a unirse al paro. Y está bien. Estos son los momentos en que hay que aglutinar, cohesionar.
7. Es obvio que el liderazgo natural en estos casos corresponde a las activistas feministas. Pero ese liderazgo sólo será real en la medida en la que incluya a las mujeres que, sin considerarse feministas, hoy están en la misma sintonía y protestando por las mismas causas.
8. Lo más tonto sería comenzar a restringir la posibilidad de participar bajo premisas como "no piensan como yo, así que no tienes derecho a indignarte". De hecho, ese es el deleznable y abyecto discurso de López. Lo que menos se debe hacer es replicarlo.
9. Pero entonces ¿no se deja abierta la puerta a que la derecha se apropie de esta lucha? Honestamente, yo creo que no. Cierto: No deja de ser paradójico que los grupos provida que normalmente se oponen a las luchas liberales en pro de las mujeres, ahora se quieran unir. Pero...
10. Repito: Seguro que entre muchas personas provida y similares también hay víctimas, o familiares de víctimas de violencia de género. Tienen todo el derecho de indignarse y unirse a la protesta.
11. Pero ¿podrán lucrar políticamente con esto? Obvio que sí. ASÍ ES LA VIDA POLÍTICA. Todos los grupos políticos, sin excepción, lucran con todas las situaciones de la vida pública. Así que es ocioso pelearse por ese tema.
12. Ahora véanlo de este modo: En principio, la derecha nunca se va a poder aprovechar del feminismo. Feminismo y Derecha van en sentidos opuestos, así que se trata de un contubernio imposible. Ahorita estamos ante una coyuntura en donde los dos grupos pueden coincidir, pero...
13. No pasa de allí. Cuando el debate salga del tema de la violencia de género y entre a asuntos como salud reproductiva, aborto, derechos laborales, etc., las agendas de derecha y feminismo evidenciarán otra vez sus profundas diferencias y seguirán, cada uno, por su propia ruta.
14. Para evitar una intromisión o manipulación de las cosas, el feminismo sólo tiene que ser coherente con sus ideales. La derecha, de manera natural, se mantendrá alejada de eso. Entonces, vamos poniendo los puntos sobre las íes.
15. UNO: No se preocupen por la raja política que cada grupo pueda o intente sacarle a esto. Es parte de la política (odioso, sin duda, pero inevitable), y al final dependerá de la habilidad de cada partido para traducir esto (y todo lo demás) en votos.
16. DOS: Este no es un asunto de derechas o de izquierdas, porque la violencia de género afecta a todas las mujeres por igual. Es un espacio donde convergen la indignación de derechistas e izquierdistas, y ni modo. Tienen que hacer el esfuerzo por ir de la mano por esta ocasión.
17. TRES: Tampoco es un asunto de feministas o no feministas. Es lo mismo: La violencia de género ataca sin distingos ideológicos. Así que feministas y no feministas también deben entender que en esta lucha específica, van juntas.
18. Por supuesto -y ya lo dije- se espera que el liderazgo natural en este asunto sea feminista. Y justo es una oportunidad única para que el feminismo demuestre que se puede poner al frente de las grandes luchas a favor de las mujeres, lo cual significa que...
19. Puede ir a la vanguardia no nada más de las feministas, sino de toda la sociedad. Así que, en resumen, no tiene sentido discutir si tal o cual persona o grupo tiene o no derecho a unirse a la protesta. El problema afecta a todas, así que todas tienen que protestar.
20. Si esto se maneja adecuadamente, se pueden lograr muchas cosas. Una muy importante es ponerle el alto a López y su indiferencia ante la situación. Confrontar al gobierno y obligarlo a que asuma su responsabilidad, o que se atenga a las consecuencias (electorales, por cierto).
21. Pero la otra, más importante a mi modo de ver, es que se dé un paso gigante en la lucha por los derechos de las TODAS las mujeres a tener una vida libre de violencia. Eso va más allá de partidos, políticos, filias o fobias personales o grupales.
22. Concluyo reiterando que el reto enorme es para el feminismo. Es la coyuntura donde su liderazgo es indispensable.
Confío en que estarán a la altura del reto. Las soluciones urgen. Ya no es momento de callar.
Confío en que estarán a la altura del reto. Las soluciones urgen. Ya no es momento de callar.
