Thread by @manuelhborbolla

México superó los 100,000 muertos por covid-19. A este paso es posible que lleguemos al doble de muertes previstas en el escenario más catastrófico al inicio de la pandemia.

Para tratar de dimensionar lo que esto significa, revisé el último informe semanal de la OMS...

Algo está pasando con el virus que no estamos entendiendo. América tiene una tasa altísima de muertes y también Europa, tanto en cifras totales como en proporción.

El lejano Oriente, en Asia, y todo África, tienen niveles bajísimos de muertes.

¿Es en realidad una crisis global? ¿O el covid-19 es en realidad una crisis del hemisferio Occidental? ¿Por qué? Factores como la temperatura parecen no estar teniendo el mismo impacto al comparar a Europa con Asia, por ejemplo. ¿Existe un factor genético?

Otra arista que me parece ha sido poco explorada, es el tema de la alimentación. ¿Qué tanto está interviniendo este asunto en la magnitud de la pandemia? Los hábitos alimenticios en América y Europa son muy diferentes a los de Asia y África. ¿Es este un factor crucial?

Por la evidencia que tenemos hasta ahora, es muy posible que las COMORBILIDADES sean el factor determinante a la hora de entender el alto número de muertes por covid-19 al comparar los casos de América y Europa frente a las cifras de Asia y África.

"Hay numerosos informes que señalan que la edad, el sexo y la comorbilidad subyacente influyen en la gravedad de la covid-19. Asimismo, hay algunas pruebas de que también existen otros factores de riesgo independientes, como el origen étnico", dijo la OMS en un reporte de agosto

Y en efecto, cada vez hay más evidencia de la correlación entre muertes por covid-19 y enfermedades como la obesidad, diabetes, hipertensión.

sciencedirect.com/science/articl…

Busqué algunos estudios sobre comorbilidades por región, y no encontré gran cosa. Sólo un estudio de 2015, que retoma muestras de diversos países. Creo que mapear la incidencia de comorbilidades a nivel global ilustraría muy bien el fenómeno de covid-19.
ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/P…

Se suele politizar mucho el tema del covid-19.

El artículo de El País referido hoy en la conferencia matutina de López Obrador (de pena ajena ambas posturas, del medio y el presidente) son un claro ejemplo de esta situación.

En el resto del mundo pasa algo similar.

Aunque la politización y las políticas públicas son una constante al revisar el tema del covid-19, en realidad, este fenómeno tiene rasgos de una CRISIS CIVILIZATORIA, de la cual no se habla.

No es casualidad que todo el hemisferio occidental sea el más afectado por la pandemia.

Buena parte de las comorbilidades son consecuencia del estilo de vida promovido en Occidente: comida con muchas calorías, sedentarismo, depresión, etcétera.

Hace falta explorar el fenómeno del covid-19 desde una perspectiva más amplia, que abarque estos factores civilizatorios.

Las cifras indican que, más que una crisis global, el covid-19 es esencialmente una crisis de Occidente. Y la evidencia sugiere que la alta mortalidad en esta región echa raíces en el modelo civilizatorio que se ha desarrollado aquí en los últimos siglos.

Un enfoque interesante, sería abordar las muertes por covid-19 en relación con la concentración de riqueza en el mundo. Creo que saldrían algunas correlaciones interesantes a partir de este enfoque poco explorado.

Quizá sea tiempo de analizar el fenómeno con otros ojos.

El problema, creo, es que los medios y las instituciones emanadas del modelo civilizatorio Occidental, parecieran no advertir estas cosas. Están tan inmersas en su propia lógica y su propia dinámica, que parecieran no advertir estos rasgos de una crisis civilizatoria.

De este modo, creo que el covid-19 podría ser una parte de un problema más amplio, donde se podría incluir a otros fenómenos como la desigualdad, la migración y el cambio climático.

Los efectos sociales del covid-19 son consecuencia de una CRISIS CIVILIZATORIA que muchos no ven.

A muchas personas les gusta nomás quedarse en el golpeteo político, pues les permite sacar sus frustraciones.

Pero si de verdad queremos entender el fenómeno del covid-19 en el mundo, debemos dejar de ver las cosas de manera tan limitada y expandir los alcances del análisis.
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