¿Cómo resumir lo que fue la Real Armada en el siglo XVIII en una anécdota? Ocurrió cuando se había retirado la flota aliada francoespañola a Brest tras no querer desembarcar los franceses en Inglaterra, con las quejas del anciano teniente general don Luis de Córdova. Hilo. 
Debido a lazos consanguíneos dinásticos España se ve aliada con Francia en virtud de los Pactos de Familia, durante la Guerra de Independencia de las 13 colonias, al declararse la guerra a Inglaterra en apoyo a los colonos norteamericanos en junio de 1779.
El anciano don Luis de Córdova, de 73 años, es nombrado comandante de una escuadra española que debía unirse a la francesa en Orvilliers. La escuadra franco-española de 68 navíos entra en el canal de la Mancha en agosto de 1779, con el navío Santísima Trinidad como buque insignia
La escuadra inglesa, ampliamente superada, se refugia en sus puertos, que son bloqueados por la flota borbónica, estrangulando comercio británico. Surgieron entonces algunas diferencias del criterio estratégico que se debía seguir para completar la campaña.
Por un lado el mando francés abogaba por destruir primero la escuadra enemiga para desembarcar después las tropas en Gran Bretaña; mientras que el parecer español era realizar inmediatamente el desembarco y dirigirse a Londres.
Los españoles se apoyaban en la idea de que la escuadra enemiga no estaba en condiciones de presentar batalla, como efectivamente se vio cuando se replegó apresuradamente a sus puertos. Al final prevaleció el criterio francés y no hubo desembarco.
Los ingleses con acciones ofensivas aisladas y en apariencia independientes entorpecieron considerablemente las actuaciones de la flota combinada, ganando tiempo para preparar una defensa eficaz en tierra y que pudieran llegar a tiempo diversas flotillas de otros lugares.
Todo esto unido a la mala mar, al escorbuto y a una epidemia de tifus que diezmó a las dotaciones franco-españolas, la escuadra aliada tuvo que retirarse a Brest, con las continuas quejas de don Luis de Córdova, que en aquella campaña tenía ya 73 años de edad.
Muchos oficiales franceses opinaban que: “si bien en el pasado (don Luis) había sido un buen oficial, ya era demasiado viejo y le fallaba la cabeza”, debido a los desencuentros y diferencias de criterio con don Luis. Una anécdota resume muy bien la frustración del almirante.
El conde de Guichen, almirante francés, siempre replicaba cuando Córdova daba sus órdenes y tomaba sus precauciones de mal tiempo cuando el cielo estaba despejado y, al contrario, mandaba suspenderlas y largar velas cuando todavía se estaba en el final del temporal.
Esto a ojos de los franceses, que lo consideraban el peor momento para hacerlo, demostraba que el viejo almirante español “chocheaba”. En una ocasión preguntó el francés al mayor general José de Mazarredo, 2º de Córdova, de dónde provenía la peregrina previsión del anciano.
Respondió Mazarredo mostrando al francés los nuevos barómetros marinos que los buques españoles habían empezado a usar de dotación, una tecnología punta de la previsión meteorológica, admirándose el francés de ellos, ya que los franceses aún no los conocían.
Breve anécdota del hilo que ya tengo preparado sobre don Luis de Córdova a propósito de la nueva fragata F114.
Nótese el pabellón borbónico prevjo al bicolor, que es de 1785 y todavía no ondeaba.
Láminas del gran Carlos Parrilla.
Gracias por leer.
Nótese el pabellón borbónico prevjo al bicolor, que es de 1785 y todavía no ondeaba.
Láminas del gran Carlos Parrilla.
Gracias por leer.
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