Previo al anuncio del Plan de Paz para Oriente Medio el próximo 25 de septiembre (2018) ideado por la administración Trump, la situación a día de hoy en Cisjordania, la Franja de Gaza e Israel es la siguiente: (Hilo)
Cisjordania: Rajoub, Tirawi, Faraj y al Alul son cuatro posibles candidatos a suceder a Abbas cuando deje el poder, cuyos grupos están negociando entre ellos y a su vez rearmándose llegado el momento de tomar el control político de la zona mediante las armas.
Franja de Gaza: Ishmael Haniya, líder de Hamás, continúa indeciso entre Al’Aruri, número dos de la organización, quien ha aumentado mucho su poder (responsable de política exterior y presupuesto de Hamás, conexiones Hezbolá/Irán), y Sinwar, líder de Hamás en la Franja de Gaza.
Al ‘Aruri piensa más a largo plazo y mantiene un ambicioso plan estratégico para hacerse con el control de Cisjordania después de que Abbas deje el poder, mientras que Sinwar mantiene una línea más dura en las negociaciones con el fin de recibir más apoyos por parte del pueblo.
¿Qué ocurre en Israel?
Netanyahu espera con cierta preocupación la respuesta de su coalición del Plan de Paz porque sabe que el reconocimiento de EEUU de Jerusalén y el traspaso de su embajada a la capital judía conlleva un elevado coste, como ya advirtió el Presidente Trump.
Netanyahu espera con cierta preocupación la respuesta de su coalición del Plan de Paz porque sabe que el reconocimiento de EEUU de Jerusalén y el traspaso de su embajada a la capital judía conlleva un elevado coste, como ya advirtió el Presidente Trump.
Dicho coste será sin duda la evacuación de todos los asentamientos de Judea y Samaria / Cisjordania respetando aquellos que permanecen dentro de los conocidos como los tres Bloques, un tema que la Autoridad Palestina (AP) lleva al tanto desde hace décadas.
davidyabo.com/index.php/2014…
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Jerusalén queda como una incógnita, y lo más probable que Los Santos Lugares del Islam continúen bajo administración del Waqf jordano como hasta ahora.
La respuesta de la coalición sería la de convocar elecciones en seis meses aunque no es motivo de preocupación para el Primer Ministro porque sabe que volverá a ganar. Esto podría incluso ser favorable para formar una nueva coalición sin partidos radicales / religiosos.
Aceptando un Plan de Paz en el que Israel renuncie a gran parte de Judea y Samaria haría que Benet (Habait Hayehudi) no quisiera formar coalición con Netanyahu, necesitando los votos de Lapid (Yesh Atid) y, de entrar ellos, los partidos religiosos se negarán a formar gobierno.
El Presidente Trump aseguró el mes pasado al rey jordano que si bajo su administración este Plan de Paz no es aceptado ninguna otra administración podrá lograr ningún acuerdo.
Recordemos que Trump es más empresario que estadista, por lo que este acuerdo (en mi opinión) podría estar orientado más en el tema económico que en el territorial, y de tal importancia que será difícil tanto a Israel (seguridad) como a la AP (reconstrucción) renunciar a el.
