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Jesús y los marginados. No pretendo hacer un hilo sistemático y con citas, sino compartir algunos pensamientos que me han venido en la oración y me han consolado. Puede que nos ayude a reflexionar. 
El Ángel del Señor anuncia a los pastores. Ellos son los primeros en recibir la Buena Noticia, en adorar al Verbo hecho carne. Los pastores pertenecían al colectivo de los marginados en tiempos de Jesús.
No tenían buena fama por ser personas solitarias y, por razones de su oficio, no poder cumplir con regularidad los preceptos religiosos. Sin embargo, ellos son los primeros.
Jesús escoge a los Doce entre las personas más sencillas. No elige a superhéroes, ni a personas sin pecados, ni a grandes teólogos. Al contrario, en los Evangelios se nos muestran a los Apóstoles muy humanos, con defectos como los nuestros...
(envidia, impaciencia, tosquedad, falta de comprensión…) y, sin embargo, son elegidos y colmados de gracia. El amor de Jesús no se retiró ni siquiera en medio de la traición y las caídas. Él siguió contando con ellos.
Jesús toca a los intocables, a los leprosos.Come con publicanos y prostitutas,e incluso afirma que ellos preceden a los “muy religiosos” en el Reino de los cielos,porque creyeron y abrieron su corazón a Jesús,aún en medio de su oscuridad.Los que se creían en la luz estaban ciegos
Preciosa es la parábola del fariseo y el publicano. Y que a Mateo, “pecador público”, le dijera en medio de los “puros”, “Ven y sígueme”. ¿Entraría Mateo en nuestro perfil de admisión al sacerdocio? ¿Y San Agustín?
Jesús come con pecadores y prostitutas, no teme perder su reputación, ni que lo acusen de estar poseído, ser un comilón, un bebedor, o ser impuro. Él hace camino en medio de ellos, porque no son los sanos los que necesitan médico...
y su medicina es la misericordia, no la superioridad moral y el rechazo. ¿Actuamos así nosotros?
Una escena muy fuerte es el intento de lapidación de la adultera. Jesús se pone en medio y desenmascara la hipocresía de aquellos “hombres justos”. A ella, antes siquiera de que pueda verbalizar su arrepentimiento, le dice “no te condeno, vete y no peques más”.
¿Cuántos “buenos católicos” se dedican a tirar piedras en las rrss? ¿Tenemos los mismos sentimientos de Jesús? ¿De qué lado estamos? El que esté libre de pecado...
Jesús se enfada cuando ve que los enfermos y personas con dificultades físicas (tullidos, ciegos…) son despreciados y considerados malditos por Dios. Ellos no podían ni siquiera acceder al culto del templo… Y Jesús les devuelve la salud y la dignidad.
La escena del centurión y su sirviente también es conmovedora. Por todo lo que encierra detrás. Jesús no le suelta una filípica, sino que accede a curarlo y afirma que no ha encontrado en todo Israel más fe que la de ese pagano.
Incluso en la cruz, brutalmente martirizado y sufriendo las burlas de las autoridades religiosas y su propio pueblo, Jesús muere perdonando, acogiendo a todos con sus brazos extendidos y el corazón roto de amor.
En fin, cuánto nos queda a nosotros, como Iglesia, aprender de Nuestro Señor. #Fin
