Thread by @sexsibaritas

¿Deberíamos establecer este lugar como nuestro punto de reunión swinger? Nos hacemos la pregunta mientras nos sentamos en la mesa que hemos reservado. Es la tercera vez que nos citamos aquí para descubrir si nuestros acompañantes ( o acompañante) en turno estarán dispuestos...

... a seguir la reunión en un espacio más íntimo, participando de nuestras fantasías. Corrijo: la cita no la hemos propuesto nosotros y no es una reunión swinger, pero nos encantaría que así fuera. La pareja de amigos con la que hemos de vernos ha propuesto involuntariamente...

...el lugar y ha escogido una noche especial: habrá una cena "sensorial" en un salón privado del lugar. Estaremos con los ojos vendados mientras nuestro olfato, tacto y gusto serán expuestos a aromas, texturas y sabores que iremos descubriendo mientras...

...la plática y un vino espumoso acompañan una experiencia que, además de gastronómica, se antoja profundamente sexual. ¿Será ésta la ocasión ideal para compartirles que somos swingers? De todas las parejas de amigos (no swingers) que tenemos, son en quienes más confiamos,..

...por lo que no tenemos ninguna duda de que mantendrían nuestra "otra" vida en secreto pero, ¿serán ciertas nuestras sospechas de que ellos también son, o están a punto de ser swingers? Las apuestas corren y no hay mucho tiempo de discutirlas porque ellos han llegado ya.

La cena es todo y más de lo que hubiéramos esperado, el único reproche es que no haya durado un poco más. El alcohol, desinhibidor por excelencia, aún no ha hecho el efecto necesario para que nuestra confesión aflore, por lo que aceptamos inmediatamente la invitación...

...para seguirla en su casa. No es, por supuesto, la primera ocasión en que iremos ahí a tomar una, dos o más copas, pero los nervios entre nosotros dos persisten porque hemos tomado ya la decisión de compartir nuestras fantasías y perversiones con ellos.

¿Deberíamos invitarlos al viaje que ya tenemos planeado donde visitaremos varios clubes swinger? ¿O seremos un poco más "recatados" y simplemente nos limitaremos a confesarles lo que hemos hecho y el camino que llevamos recorrido? ¿Nos juzgarán por ello? ¿Se sorprenderán?

Como excelentes amigos y anfitriones que son, nos ofrecen nuestras bebidas favoritas. Ivonne acepta gustosa un tequila y yo me deleito con el aroma del Jack Daniel:s que comienza a llenar mi vaso. La mesa está puesta, literal y figurativamente para compartir nuestro manifesto:

Hace casi cinco años decidimos que queríamos ir a un lugar donde hubiera mucha gente desnuda y cogiendo a nuestro alrededor. No teníamos la más remota idea de si únicamente se trataba una fantasía erótica surgida de la película pornográfica que estábamos viendo en el motel..,

...o si realmente existía un lugar así, por lo que San Google vino a nuestro rescate y descubrimos que ni remotamente eramos los primeros en tener tales sueños húmedos y, en unos cuantos clics, un universo nuevo se descubrió ante nuestros ojos. Después de intentarlo, tropezando..

...en varias ocasiones decidimos dejarlo por la paz hasta que casi cuatro años después nos dimos una segunda oportunidad. Desde entonces llevamos poco más de un año donde nuestro vocabulario a cambiado por completo: sexo, anhelo, deseo, celos y perversión han cobrado..

...significados completamente distintos. Las experiencias vividas que, a los ojos de una educación previa, restrictiva, hubieran sido consideradas "fuertes", hoy las definimos como atrevidas, divertidas. Nos gusta escoger cuando exhibirnos y tenemos el control de decidir...

..si queremos compartir nuestros cuerpos con unos completos desconocidos o si preferimos saber todo de ellos antes de recorrerlos, o dejarnos recorrer, por manos, labios y anhelos. Las posibilidades de placer se han multiplicado y gozamos de la libertad que se nos ha desvelado.

Sabemos que como pareja nada de esto soluciona ninguno de nuestros problemas cotidianos. Estos se resuelven con los pies en la tierra, como habría de ser antes o será después. Lo que sí sabemos es que nos tenemos reservado un espacio donde, si así lo decidimos, nos espera un...

...cúmulo de sensaciones y placeres por descubrir o por repetir. Lo mismo da. Nos tenemos a nosotros más cercanos, mas enamorados, mas comprometidos que nunca y eso sólo significa que somos más felices y que esa felicidad en ocasiones nos desborda y la queremos compartir.

Vemos a todos con otros ojos y queremos descubrir quiénes son swingers o pudieran serlo para acompañarnos en esta aventura. Tenemos a nuestros amigos enfrente, en la misma mesa, a unos centímetros de nosotros y no sabemos como comenzar, como decirles todo esto.

Con las palabras encimadas, sólo podemos formular torpemente la invitación a ese viaje ya planeado y la respuesta nos deja de una pieza...
"¿Pero cuál es su idea? ¿Quieren que sólo vayamos juntos o tienen ganas de hacer un intercambio con nosotros?"

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