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El fútbol femenil es el arma secreta de Estados Unidos para apoderarse del fútbol que cada día sufre más por no cumplir con las tendencias de consumo. Abro hilo explicando por qué 👇🏽
Históricamente EUA ha querido protagonizar sin éxito el deporte más popular del mundo. Le ha costado mucho trabajo porque ellos no controlan las reglas como sí lo hacen en la NBA, NFL, NHL y MLB
Les interesa el control, no solo por poder, sino para ajustar el fútbol al mismo sistema en que funcionan sus otros deportes que tienen una base universitaria (donde hay mucho dinero) y calendarios diseñados para no encimarse entre sí
EUA entiende los deportes como lo que realmente son: entretenimiento. Por eso sus ligas priorizan eso sobre cualquier cosa. Los deportistas son rockstars y los partidos son shows desde la entrada hasta la salida. La gente paga más por divertirse que por ver ganar a su equipo.
En los 70 creyeron que podían hacerlo sin la FIFA, crearon su propia versión de ‘soccer’ donde por ejemplo los penaltis se cambiaron por shootouts. Beckenbauer y Pele fueron esfuerzos para darles popularidad. No funcionó. Sin la FIFA o sin popularidad, el fútbol no es negocio.
Para alojar el mundial del 94 (otro esfuerzo por ser relevantes) tuvieron que crear una liga afiliada a la FIFA e hicieron la MLS, que desde entonces se basó en buscar éxito en la comunidad latina que vive allá. Chivas USA es un ejemplo de esa fallida idea.
Mientras eso sucedía, el fútbol que sí se adaptó al sistema universitario americano fue el femenil (en contrapuesto a que en las escuelas solo existe el fútbol americano varonil). El ‘soccer’ se volvió un deporte de mujeres en EUA y Canadá.
La MLS siguió apostando por traer estrellas a jubilarse y ahora franquicias de equipos europeos, pero el fútbol varonil en EUA no termina de ser de calidad y/o espectacular. Por negocio, parece que ya se inclinaron más por conseguir lo segundo.
Basta ver un LAFC (con Vela) Vs. LA Galaxy (con Zlatan) con marcadores arriba de los 6 goles por partido. Es raro ver un 0-0 en EUA pero es igual de raro ver a sus equipos ganar un torneo internacional.
El fútbol varonil mundial es un elefante gigante, negocio de millones por lo que moverse le cuesta mucho trabajo. La tendencia de consumo revolucionó con internet pero el fútbol sigue siendo el mismo de hace 70 años.
Pensar que un adolescente que hoy consume todo en segundos y al más mínimo aburrimiento da swipe, va a seguir viendo por 90 min un partido que no te da garantía ni siquiera de un gol es tener mucha soberbia. Esa soberbia la tiene el fútbol.
Por eso, el fútbol se volvió de personalidades y no de equipos. La gente sigue más a Cristiano y a Messi que al Real o al Barca, porque los puede consumir toda su vida en internet y no solo 90 min aburridos cuando los clubes deciden.
En cambio, los deportes gringos cada temporada cambian y ajustan sus reglas en pro del espectáculo, lo hacen porque no le deben pedir permiso a nadie. EUA quiere tener ese poder en el fútbol.
La investigación y arrestos por corrupción de la FIFA por parte del FBI hace unos años fue un golpe de autoridad de EUA para ser tomado en serio, si no deportivamente al menos sí organizacionalmente.
Pero sucede que EUA sí tiene autoridad en el fútbol femenil, el esfuerzo universitario da como resultado a las mejores jugadoras del mundo que ganan mundiales en todas las categorías y olímpicos. No parece relevante hasta hace unos años.
El movimiento feminista empodera el fútbol femenil. Alrededor de todo el mundo empiezan a surgir ligas y equipos, Latinoamérica y Europa empiezan a pensar en ellas. El problema: aún no hay negocio.
Estados Unidos utiliza su gran poder comercial para sumar marcas como Nike y Adidas, o para montar los equipos femeniles en el FIFA 17 de EA. Tienen al mejor equipo y también las marcas correctas para ponerle dinero: tienen poder.
El fútbol femenil es un deporte recién nacido, con muy poco que perder y mucho que ganar. Puede moldearse en pro del espectáculo porque no representa riesgos de pérdidas para nadie.
El futbol femenil es el laboratorio perfecto para encontrar el nuevo fútbol ajustado a las tendencias de consumo. Ahí empezaremos a ver nuevas reglas que hará el fútbol un espectáculo digno del siglo XXI.
Estados Unidos lo empujará hasta el punto en que iguale o supere en importancia al varonil. Así que sí, el futuro del fútbol también is female.
