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¿Qué necesitaríamos hacer para poder construir una colonia espacial este siglo? Es mucho trabajo, pero quizá no sea imposible... 
De hecho, nuestro primer trabajo ni siquiera comienza en el espacio, si no aquí, en la Tierra. Debemos preocuparnos por no desaparecer.
Para poder vivir en el espacio de manera regular, necesitamos ayudar a que la ciencia avance en esa dirección y, sobre todo ->
evitar extinguirnos antes de hora. Nuestra mayor prioridad es, literalmente, no destruir la vida en nuestro planeta. Y tengo malas noticias.
Es una batalla que estamos perdiendo. Somos increíblemente eficientes para llevar a la extinción a otras especies con las que convivimos.
El espacio es inhóspito. Especialmente en los alrededores de la Tierra. No hay ningún lugar al que podamos ir y terraformarlo ->
para servir las necesidades de la Humanidad. De hecho, ya hablé de este tema no hace mucho:
Así que el primer paso es solucionar los problemas que afectan a nuestro planeta, como el cambio climático. Y crear un futuro sostenible.
Uno en el que sepamos usar los recursos de la naturaleza, en lugar de explotarla. Si no lo logramos, cuando salgamos al espacio exterior ->
sólo estaremos arrastrando esos problemas con nosotros. Y si el cambio climático ya es un problema aquí, imaginad cómo serían las cosas ->
en un planeta que de por sí ya fuese poco apto para la vida. Sería una mezcla explosiva... y no en el buen sentido.
Para construir nuestra colonia espacial, necesitaremos ser creativos. No es fácil acceder a los recursos en el espacio.
Tampoco podemos recurrir a una cadena de suministro desde la Tierra. Sería lenta, ineficiente y, seguramente, poco fiable.
Necesitaremos producir todo lo necesario de manera local. Por ejemplo, con el uso de la impresión 3D. De esta manera, podríamos extraer ->
los materiales necesarios de los asteroides cercanos a la Tierra. Así tendríamos el material estructural de la colonia, paneles solares...
De los cometas, además, podríamos extraer el agua que se usaría para beber, bañarnos, protegernos de la radiación, e incluso para ->
descomponerla en hidrógeno y oxígeno y crear combustible para cohetes. Pero claro... ¿cómo conseguimos una infraestructura así?
Es posible que el primer paso ya lo estemos dando... el turismo espacial. Sí, seguramente suene extravagante y elitista. Algo que parece ->
destinado a unos pocos ricachones. Pero es que no podemos engañarnos. Al principio, el turismo espacial será así. Valga un ejemplo...
Virgin Galactic pide un pago adelantado de 250.000$ para volar con ellos en los primeros viajes suborbitales. Algo al alcance de pocos.
Pero es una etapa necesaria. Nos permitirá crear una industria de turismo espacial. Eso nos ayudará a expandir las áreas de investigación
Si proliferan los hoteles espaciales, podremos recolectar información sobre cómo funcionan los hábitats espaciales a largo plazo.
De hecho, ya hay alguna que otra iniciativa para construir un hotel espacial. No estarían destinados únicamente a astronautas.
Y ya tenemos una industria espacial comercial para lanzar cohetes al espacio. No hay nada, a priori, que pudiese impedir a compañías ->
como SpaceX enviar a pasajeros, durante un fin de semana, a algún hotel en la órbita baja de nuestro planeta. Puede parecer algo ->
todavía lejano en el tiempo. Pero con los incentivos apropiados, podría suceder bastante rápido. Un hotel espacial, a fin de cuentas ->
es en esencia lo mismo que una estación espacial. Ya tenemos experiencia en cómo construirlas... No es un desafío técnico.
Eso sí, hay otros desafíos a los que hacer frente, que no son solo tecnológicos. Necesitamos entender cómo funcionan los ecosistemas...
La ventaja es que vivimos en el ecosistema más grande que conocemos: La Tierra. Para vivir en un hábitat espacial tendremos que comprender >
cómo funcionan los ecosistemas (y las especies que los componen, nosotros incluidos) desde el nivel más fundamental. Una colonia espacial >
sin ecosistema no nos serviría de mucho. No tendríamos forma de proporcionarnos alimentos. Así que en una colonia de este tipo, no solo >
tendremos que pensar en cómo hacer que los seres humanos estén cómodos. También habrá que preguntarse qué es necesario para otras especies.
Necesitamos que, tanto animales como vegetales, puedan adaptarse a ese nuevo ecosistema de la mejor manera posible. No es nada sencillo.
Un ecosistema tiene un equilibrio muy delicado. Por ejemplo, imaginemos que llevamos con nosotros varios ejemplares de un insecto.
Resulta que es útil porque poliniza las plantas de café. Pero claro, tendremos que llevar con él al bicho que mata a ese insecto...
De otra manera, sin control, se convertiría en una plaga. Al mismo tiempo, haría falta traer al depredador de ese bicho...
Y al depredador del depredador del bicho... Todavía falta mucho para comprender todas esas conexiones entre especies, y es un problema.
Al menos para los primeros asentamientos espaciales, porque no podemos pensar en llevar miles de especies con nosotros. Y hay otro factor...
No sabemos ni con qué rapidez, ni dificultad, pueden adaptarse al espacio las especies que llevemos con nosotros.
Por ejemplo, en las Islas Galápagos hay aves que se aparean con diferentes especies. Y especies que aparecen y desaparecen constantemente.
Es posible que una especie, que en nuestro planeta puede expandirse lentamente, lo haga mucho más rápido en el espacio. O que no pueda.
Todo ello son cuestiones que deberemos abordar con el tiempo, para poder establecernos fuera de la Tierra. Porque es algo que será necesario
Bien en una colonia espacial (como las que conté en este hilo):
o bien en la superficie de otro planeta, en una colonia construida, por ejemplo, en la superficie de Marte. Será un movimiento inevitable.
En unos mil millones de años, el aumento de brillo del Sol hará que los océanos se evaporen...
Marte, en ese momento, seguramente estará en la zona adecuada para tener vida. Seguramente será nuestro primer destino (junto a la Luna).
En realidad, ya tenemos una colonia espacial. No es gran cosa, es verdad, pero está ahí... La Estación Espacial Internacional.
Sólo está a 400 kilómetros de distancia del planeta, tiene capacidad para seis personas, y necesita una cadena de abastecimiento continua...
Pero parte de la tecnología desarrollada para la estación (protección contra la radiación, el reciclado de agua y aire), ->
y la recolección de energía solar, son transferibles a asentamientos en el espacio, aunque sean mucho más grandes.
Un hábitat en la superficie de otro objeto celeste, por contra, plantea retos diferentes. Una colonia espacial nos obliga a partir de cero.
Tiene sus ventajas y sus dificultades. Un planeta, sin embargo, nos presenta un hábitat que de por sí es antinatural. Es decir...
el primer requisito para establecer una colonia en Marte, por ejemplo, pasa por crear un hábitat. Un entorno aislado que sea capaz ->
de mantener la presión del aire, su composición, su temperatura... y que pueda proteger a los habitantes de la radiación.
Estamos hablando de una estructura que sería relativamente grande y pesada (aunque con la impresión 3D, esto no sería un problema).
El tamaño aumenta (o disminuye) considerablemente en función de la cantidad de personas que vaya a albergar en su interior.
De hecho, los primeros pasos de la construcción de una colonia en otro planeta podrían hacerse sin intervención humana: con robots.
Y no menciono la impresión 3D por capricho. Hay una impresora 3D en la Estación Espacial Internacional, para demostrar que funciona ->
incluso en un entorno de gravedad cero. Así que supondremos que construimos nuestro hábitat en otro planeta...
Los retos que nos plantea no son demasiado diferentes de los de un hábitat espacial. Necesitará un suministro constante de agua, oxígeno ->
energía y comida para mantener a sus habitantes. Habría que llevar el agua, como he comentado antes, pero también se podría ->
reciclar todos los líquidos residuales. Y todos es, literalmente, todos. Ya se hace en la Estación Espacial Internacional.
Allí no se desperdicia ni un solo líquido. Desde el agua hasta el sudor o la orina. La ventaja de una colonia en superficie es que, quizá ->
sería posible extraer agua de fuentes bajo la superficie del planeta. Otro aspecto es el de la producción de energía...
En este quizá partamos mejor de lo que pensamos. Todo gracias a los paneles fotovoltaicos. Aunque habría que desarrollarlos más...
A la distancia que hay entre la Tierra y el Sol, podemos obtener 470W por cada metro cuadrado de células solares. Pero eso aquí...
En Marte, esa cifra es mucho más baja, porque está más lejos y su atmósfera, aunque no es espectacular, oculta parte de la luz del Sol.
Y lo que es aún peor, de manera periódica, Marte sufre tormentas de arena que pueden cubrir toda la superficie durante meses.
Así que tenemos aún menos luz solar que poder recolectar... Un problema que no encontramos en la Tierra.
A todo esto, hay que sumarle que necesitamos que una colonia así sea auto-sostenible. En las primeras etapas, la agricultura será clave.
Además, las cosechas podrán usarse para convertir el dióxido de carbono en oxígeno respirable. Cultivar en la Tierra es muy fácil.
Las plantas llevan millones de años adaptándose a este entorno. Pero hacerlo en otros planetas es una cuestión totalmente diferente.
La temperatura, presión, humedad, nivel de dióxido de carbono, la composición del suelo y la gravedad afectan a la supervivencia y ->
al crecimiento de las plantas. Cada especie lo sufre con diferentes efectos. Ha habido varios estudios y experimentos para intentar hacer >
que crezcan en cámaras controladas, que simulen el entorno de una colonia espacial. Ya se ha hecho algún experimento en este sentido.
Se ha cultivado rábanos, lechugas y cebollas verdes en cultivo hidropónico, con un fluido rico en nutrientes y sin necesidad de tierra.
Pero todo esto nos lleva a un punto en el que se sustenta todo. Para poder conseguir estas cosas, ya sea construir una colonia espacial
o para construir un hábitat en otro planeta, es necesario enseñar a las personas nuestra conexión con el cosmos. No lo digo filosóficamente.
No es fácil hacer ver a los demás por qué debería importarles el espacio exterior, colonizar otros mundos o la órbita baja de la Tierra.
Especialmente si pensamos que, en muchos casos, estamos hablando de proyectos que tendrán décadas de duración y que, inicialmente, solo ->
serán experimentados por una pequeña cantidad de personas de la población total del planeta. Pero, si queremos tener la esperanza ->
de que haya una generación de seres humanos capaz de crecer, vivir y trabajar en el espacio, es necesario recordar a los que estamos aquí >
que tenemos una conexión con el espacio. Estamos conectados no solo con el suelo, también con las estrellas que vemos cada noche en el cielo
Lo que hacemos hoy servirá para definir el futuro. El nuestro y el de los que vengan después de nosotros. Exactamente de la misma manera ->
que los descubrimientos y avances de nuestros ancestros han permitido que el mundo sea tal y como lo conocemos. Hay algún que otro ejemplo.
Que podamos predecir la subida de las mareas es la consecuencia de que en el pasado nos diésemos cuenta de su conexión con la Luna
Nuestros ancestros también crearon calendarios basados en el movimiento de las estrellas. Incluso en la actualidad hay otros ejemplos.
Los astronautas se llevan toda la gloria de estar en la Estación Espacial Internacional. Pero sin la ayuda de los trabajadores que ->
se dedican a construir vehículos, o sin los diseñadores de trajes espaciales, o los técnicos que mantienen las plataformas de lanzamiento...
No serían capaces de viajar hasta la órbita baja de nuestro planeta. Lo mismo sucede en otros ámbitos aún más cercanos a nuestras vidas.
Sin los profesores que enseñan astronomía en sus clases, o sin los miles de divulgadores que hay (de habla hispana y en otros lugares)
no habría personas que, un día, puedan decidir que su objetivo en la vida será poner sus pies en una construcción más allá de la Tierra...
De una manera u otra, todos tenemos algo que decir y aportar en el futuro de la especie. El camino a una colonia espacial, por ejemplo, >
comenzará mucho antes de que los primeros astronautas, robots, o lo que se envíe, comiencen su construcción en el espacio.
Es algo que nosotros mismos, en la actualidad, pondremos a andar. Siempre y cuando, claro, que lo que queramos sea dejar un mundo mejor ->
tanto para nosotros mismos, como para los que vendrán después de nosotros... Igual que hicieron nuestros ancestros.
¡Fin del hilo!
¡Ya está el hilo disponible como Momento de Twitter!
twitter.com/i/moments/9255…
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