Generarte un escenario con distintas alternativas, en el que puedas decidir
El mundo es cada día más complejo. Vivimos en una economía que no podemos entender—ya no digo predecir. Algo no necesariamente malo: A mayor grado de incertidumbre, más oportunidades. Podrás aprovecharlas si consigues darte posición de independencia
1. No puedes planificar el éxito, garantízate libertad de movimientos
2. Abre los ojos, identifica los escenarios positivos que tienes delante
3. Ignora el coste hundido. Ten el coraje de abandonar, cuando no estés en el sitio correcto
Sí. ¿Quieres visitar Japón? Hay dos maneras de hacerlo
Disfrutar sin preocupaciones. Aumenta el confort eliminando la incertidumbre. El problema es que estarás limitado al planning. Me gusta el rollo de Kyoto, ¿puedo quedarme un día más? No, en 5 minutos sale el bus que te llevará a Osaka
Si no puedes saber qué ciudades te gustarán, planifica un viaje de mínimos. Contrata 3 noches en Tokio. Transcurrido ese tiempo, con nueva información, decide si quedarte 3 días más. La decisión viene después, una vez lo has vivido
El dinero compra libertad. Te permite decir que no, tener la última palabra
El dinero compra tranquilidad. Acumula pasta para olvidarte de la pasta
El dinero compra opcionalidad. No podrás experimentar si no puedes pagártelo
Invirtiendo en ti. Formación continua en distintos campos. Desarrollando habilidades únicas y forjándote una reputación. Trabajando la agenda. Priorizando las experiencias, no los títulos
En un mundo en constante cambio no fijarte un rumbo puede ser tu ventaja