Para revertir una decisión atroz hay que ir contra el acto en sí (tribunales) o sobre quienes la operaron (diputados), NUNCA CONTRA LA INSTITUCIÓN (poder legislativo).
No, no, no, no, no. Asi NO es el pedo, gente.
Las instituciones son ACUERDOS. Brindan certezas a los individuos, preservándolos de los CAPRICHOS DE UN SOLO HOMBRE.
A más y mejores instituciones, menos riesgo de sufrir las cagadas de un solo tipo que se cree infalible.