No somos muy conscientes de lo que ha significado estratégicamente las cinco marchas.
Es puro dominio pacífico del territorio.
Se ha demostrado que se puede movilizar miles, millones de personas.
Se ha demostrado que se pueden bloquear las comunicaciones de una manera continuada.
Se ha demostrado que se puede organizar una marcha en la AP-7, desde Alcanar a la Junquera o viceversa, o dos simultáneas en los dos sentidos.
Ningún estado tiene capacidad para reprimir estas movilizaciones.
Eso supone que los productos agrícolas perecederos de España y Marruecos se pudran en base (más crisis económica para España y presión diplomática de EEUU por sus intereses en Marruecos).
Las marchas también han servido para que los colonos vean una realidad que sus televisiones les tenían escondida.
Ha sido impresionante ver la expresión en sus caras, al pasar por Badalona o Castelldefels.
Es un aviso a navegantes (para los analistas de situaciones de riegos) de las posibilidades de la segunda fase y de la tercera.