Thread by @suniggurath

Soy una viajera sola por la India, viajo en transporte público, me hospedo con gente local si puedo y este es el hilo de lo que voy encontrando.

La foto de portada se la debo a tres amigas viajeras, bailarinas de danza tradicional tamil, que conocí en Couchsurfing nada más aterrizar en la ciudad de Chennai
Me adoptaron al instante, me regalaron ropa y consejos de viaje.

Todo el mundo me señala que tenga cuidado viajando sola por la India, y así lo hago. También es verdad que cada vez se ven más indias viajando solas o con amigas por el país, y que el sur tiene reputación de ser más seguro, una vía de aclimatación más fácil para el turista novato

En los meses de menos calor y lluvias en buena parte de la India (diciembre, enero, febrero) también hay vacaciones, así que muchos templos y playas están ocupados casi más por turistas locales que extranjeros.

Al viajar por la zona sureste vi que la India es infinita para todos: cada lengua es muy diferente, el hindi y el inglés a veces no servían a mis amigas indias para comunicarse con los mayores de otras regiones (foto de la familia que nos acogió en Couchsurfing en Chennai)

He tenido la suerte de pasar la Navidad en India, además en la costa este, donde por influencia de los mercaderes, comercio de especias, misioneros y colonizadores hay muchas comunidades cristianas, sobre todo entre pescadores

Nochebuena con couchsurfers en Pondicherry, una antigua colonia francesa famosa por sus bonitas calles de casitas blancas (y sus bajísimos impuestos en el alcohol, que por cierto no se puede comprar en tiendas normales sino en licorerías).

En la comida de Navidad fui invitada en la granja ecológica de Gloria Land, asociada a una comunidad espiritual (ashram) de un par de cientos de personas que tratan de vivir de forma verde y autosuficiente (unos son productores de comida, otros profesores, otros médicos...)

Auroville es un pueblo extraño, fundada por la gurú Mirra Alfassa sobre los principios del nacionalista Sri Aurobindo, donde miles de indios y extranjeros (muchísimos, voluntarios) trabajan, estudian desde yoga a masaje ayurvédico y pagan por vivir en supuesto retiro

Me sorprende que tantos viajeros noveles escojan la India como primer destino. Es masiva, las ciudades masificadas, el transporte eficaz pero complejo, el clima extremo. Vietnam, Uzbekistán, Georgia, Armenia... creo que son opciones interesantes, cómodas y asequibles para empezar

Por más congestionado que esté el transporte, por más que tengas que escurrirte para entrar en el tren, en mitad de la nube de polución que se come las ciudades... siempre puedes contar con los jazmines que las mujeres llevan en el pelo para revivir con una vaharada de perfume.

Toda tienda en la India exhibe ristras y ristras de envases de un solo uso de champú, gel, café instantáneo, frutos secos... porque la mayoría de la gente no puede pagar un bote entero.
Los problemas de plásticos asociados son imaginables.
theguardian.com/sustainable-bu…

India está tomada por la basura plástica, así que hay una campaña nacional para evitar bolsas, todas las que te ofrecen se pagan y son de tela.

En la lucha contra el plástico en India lo más logrado me parecen los platos hechos de hojas secas caídas de árboles. Es el patravali, siempre se había usado pero ahora se impone porque es biodegradable.

Millones de mujeres del sur de la India empiezan el día dibujando con harina y tiza complejos patrones a las puertas de sus casas. A lo largo del día se pisan y desdibujan, pero a la mañana siguiente, ellas lavan y dibujan de nuevo.
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Vacas esperando en el paso de cebra para cruzar la carretera en Madurai, India.

Suero de leche, agua, gengibre, hojas de curry, chilli verde y sal. La bebida que representa a la India en mi corazón 😍
(No recomendada para estómagos apocados ni paladares tímidos)

No voy a negar que este viaje a la India es una excusa para que hombres con machete abran cocos para mí, y luego, una vez bebida el agua, lo corten y lo sirvan con una cuchara hecha del propio coco.

La ciudad de Dhanushkodi fue arrasada por un ciclón en el 64 y hoy se pueden ver los restos en el extremo sur de la India, casi en Sri Lanka. Su iglesia se levanta hoy entre tenderetes para turistas.

En las playas indias cada vez hay más locales que se animan a darse a un baño, pero con ropa puesta. También hay vendedores y fotógrafos que te retratan y te dan la foto al momento.

Banana frita: los trozos grandes alargados son dulces, los pequeños redondos un poco salados.
Los dos son DROGA.

Mi banana favorita es roja.
(Sabe solo un poco dulce y tiene una textura firme).
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Más frutas flipantes en India: custard apple.
NO es una chirimoya, sino el híbrido de esta con la manzana dulce, para engendrar a un frankenstein vegetal que es puro azúcar en el interior y amargura en el exterior.

Me he topado ya con protestas contra la Ley de Enmienda de la Ciudadanía que permitiría acoger en India minorías religiosas perseguidas por su fe... salvo musulmanes. Esta manifestación bloqueó la ciudad de Allappuzha durante medio día, pero la violencia se ha visto en el norte

El sur de la India y Bengala es zona de comunistas. Tal vez una de las pocas regiones del mundo donde se ha dado un gobierno democrático pero comunista estable en el tiempo.

Todas las viajeras locales y extranjeras con las que hablo coinciden en que el sur es el lugar más fácil para comenzar un viaje por la India.
Kerala es la región más alfabetizada, las mujeres andan a todas horas por las calles y mi sensación personal es de gran seguridad.

Campos de té en Munnar, Kerala, entre los que pasear, hacer senderismo y... protestar.
#minihilo

En Munnar se produce té para grandes compañías como Tata o para cooperativas como esta, KDHPL, donde los recogedores de té son también dueños. Los trabajadores viven en pueblitos en la plantación y a veces cuentan con servicio sanitario gratis. Pero las condiciones son duras.

Las recogedoras de té, que son sobre todo mujeres, organizaron una sonada huelga de 9 días en 2015.
Más aún, rechazaron que los grandes sindicatos hablaran por ellas, porque decían estar cansadas de su corrupción y de que no atendieran los problemas específicos de su trabajo.

Las recogedoras de té pedían una subida de su bono y un salario mejor. Consiguieron buena parte de lo que reivindicaban y, sobre todo, sirvieron de ejemplo para comenzar otras protestas en más plantaciones. Hoy sus logros son el salario estándar.

Con todo y con eso, siguen teniendo problemas como pasar horas de pie cargando con sus bolsas bajo el sol y entre los pesticidas. Pero aquí dejo su historia por si anima a encender otras.
#findeminihilo

Ayer salí a la carretera con mi mochila a ver si el sur de la India pasaba mi prueba de fuego como viajera solitaria. Y sí: en veinte minutos, sin levantar la mano, dos motos y un coche ya se habían parado para ofrecer ayuda o llevarme.
Viajar con sentido común, pero sin miedo.

No es un maestro coctelero, es un camarero sirviendo café con leche en la estación de autobús.
Una ovación a los camareros de Tamil Nadu, India.

Hípsteres del mundo, vivís engañados: el café más espumoso cuesta 20 céntimos de euro y te lo sirven a pie de calle en Tamil Nadu, India.

El carrom es el billar indio, solo que se juega... empujando con los dedos.

En India mis guisos favoritos llevan paneer, queso fresco, como el paneer masala de la cacerola derecha.
(Es sabido que soy pésima instafoodie porque cuando veo comida en el plato, la devoro y luego recuerdo lo de las fotos, ahora voy a optar por fotografiar mientras cocinan 😂)

El miércoles me apeé de un viaje de 12 horas en autobús en India y, sin más, me subí a la scooter de un hombre que no conocía. Me llevó a la casa de una amiga y procedimos a pasar unos días contándonos la vida.
Nada de dinero, es pura hospitalidad (en este caso vía Couchsurfing).

Mayur y yo usamos redes de hospitalidad para albergar y ser albergados. Nos fiamos de las referencias que otros viajeros han dejado de sus anfitriones (yo siempre leo en detalle las reseñas de otras viajeras, para sentirme tranquila antes de contactar a un anfitrión).

Las redes de hospitalidad NO son perfectas y desde luego NO las recomiendo a todo el mundo. Pero en este caso he dado con un anfitrión que me ayuda a entender mejor la India, que me cuida y que ¡me ha impreso en 3D mi propio souvenir!
Twitter @The_Mayur
Instagram @3dfy_creations

Ropa negra, gruesos collares, barbas crecidas. Me los cruzo en todos los templos. Son hombres en sus 41 días de preparación para el peregrinaje al templo de Sabarimala. Es esos días se abstienen de carne, alcohol, sexo, palabrotas, cortarse el pelo... #1

El peregrinaje al templo de Sabarimala, dedicado al dios célibe Ayyappan, es masivo y masculino. Las mujeres de 9 a 50 años (vamos, las que podrían estar en edad menstrual) no pueden acceder al templo. #y2

Hoy me he encontrado con uno de estos devotos haciendo el peregrinaje con su hija pequeña, todavía en edad de acceder al templo de Sabarimala, y me ha parecido muy tierno. #y3

Beware! Coconut Breaking Area!
Comprar, lanzar y romper cocos en los templos hindúes es una forma de devoción muy común.
(Montones de razones: que su dureza representa al ego humano, que el agua y la blanca carne son ofrendas puras, también que es una fruta muy común, etc.)

Ayer hice 12 horas de autobús para llegar a Udupi: un pueblo diminuto pero a reventar de peregrinos al templo de Krishna y de Shiva. Desde las 4 de la mañana el templo abre y las colas para acceder duran todo el día.
Más fotos en Instagram instagram.com/p/B7OALw8Dnj4/…

Yuca frita por las calles de la India. Lo que no debería estar comiendo, lo que no paro de comer 😅

Sé que cacahuete cocido tal vez no suene a manjar, pero hace morder el polvo al cacahuete frito.
Y si te lo sirven con arroz inflado y verduras, como en la India, es banquete celestial.