Thread by @mario_campa

Hilo sobre la crítica coyuntura de Hermosillo:

Veo con preocupación que nuevamente la opción de mayor endeudamiento para el municipio está sobre la mesa. La deuda no es mala por sí misma, pero puede volverse incontrolable.

Hermosillo es el 4to municipio más endeudado del país.

Sea CEMEX o Banobras quien provea los recursos para pavimentar las calles, de cualquier forma el nivel de endeudamiento subirá.

Deuda alta puede llevar a mayores problemas de solvencia y también a un mayor deterioro de la calificación crediticia (conlleva mayores intereses).

Hay que recordar que el 28 de marzo de 2019 S&P´s, la mayor calificadora de riesgo del mundo, recortó la calificación de Hermosillo a BB de A- en escala local.

Además, la Perspectiva Negativa facilita un recorte adicional en la próxima revisión.

Estas son las obligaciones de Hermosillo ante el Registro Público Único de SHCP. (A esto hay que agregar 317 mdp de AguaH.)

Como se aprecia, las últimas dos administraciones son las principales responsables del alto endeudamiento del municipio.

Encima, acusa Moody´s (2da calificadora más grande del mundo) a la anterior administración de opacidad en el uso de la deuda: "Hermosillo no pudo comprobar el uso de 150 millones de pesos de la deuda de largo plazo que contrató por 681.2 millones".

elsoldehermosillo.com.mx/finanzas/escon…

Hay que sumar que el contrato leonino celebrado con un privado para el suministro de alumbrado público y la sustitución de lámparas comprometió el flujo de libre disposición y la liquidez municipal.

Empero, el problema del endeudamiento no se soluciona con más deuda.

Existe también una responsabilidad directa del Gobierno del Estado al no haber actualizado la nueva fórmula de reparto de participaciones (ingreso que viene de la Federación por el pacto fiscal), misma que a nivel federal entró en vigor en 2008. En Sonora conservamos la anterior.

Utilizando datos oficiales del presupuesto 2019, Hermosillo recibió solo el 24.7% de las participaciones federales (Fondo General de Participaciones, Fondo de Fiscalización, Fomento Municipal, IEPS, etc.) de los municipios sonorenses, teniendo el 30% de la población estatal.

Podrá parecer detalle menor, pero 5.3 puntos porcentuales (de 30% a 24.7%) equivalen a 273.4 millones de pesos al año que Hermosillo no está recibiendo si asumimos un reparto demográficamente proporcional de las participaciones.

Se refleja en deterioro de servicios públicos.

Para darle color al número, Hermosillo gastará 125 millones de pesos en pavimentación y bacheo este año.

Hablamos de que se podría invertir más del triple del monto actual.

También podría pavimentar calles de la periferia. Son los más necesitados los que respiran más polvo.

Si bien no sería deseable quitar al resto de los municipios recursos inmediatamente y sí debe haber cierta compensación y distribución, el arreglo actual es inviable.

En la práctica, vemos un círculo vicioso de mayor deuda producto de las crecientes exigencias demográficas.

Un punto crítico es que la fórmula no puede cambiar de golpe. La Federación corrigió esta problemática a nivel nacional tomando promedios móviles para no afectar súbitamente a algunos estados.

En Sonora no hemos actualizado la fórmula y seguimos usando el Censo del año 2000.

Sonora necesita una capital financieramente sólida.

Abandonada a su suerte y en una coyuntura de alto endeudamiento, pudiéramos pronto enfrentar una situación crítica.

Actuemos responsablemente, sin olvidar los esfuerzos de recaudación (predial) y el control de gasto superfluo.