Thread by @diasasaigonados

La censura educativa que imponen los ultras es política con nitroglicerina: explosiona por agitación.
Donde no existía un problema ni una reivindicación real se crea. Es mezquino, pero es construir un sujeto (los padres expuestos a la Sodoma educativa) contra un Estado (opresor)

Ayer comentábamos en Hora25 que nadie que tenga hijos y participe de la comunidad educativa puede creerse tal embuste. Me temo que ya hay una capa social capaz de negar sus propias experiencias cotidianas con tal de confirmar el sesgo que les instituye como salvapatrias.

La narrativa ultra mezcla un conservadurismo caricaturesco hace apenas unos años con un neoliberalismo radical. Lo que demuestra que con insistencia y un aparato de guerra mediático afín y postrado (Hola AR), se puede sacar de la tumba a cualquier espantajo.

El veto educativo es neoliberalismo radical porque pretende hacer pasar por un problema de libertad lo que es sólo una atomización de las diferencias para quebrar la igualdad. No es educación a la carta, es romper los consensos mínimos que nos constituyen como sociedad.

Para pensar libremente primero hay que aprender a hacerlo. Para ser ciudadanos nos tenemos que poder relacionar intelectualmente en régimen de igualdad. El veto educativo no es libertad, es represión de las posibilidades de ser efectivamente libre desde la igualdad formativa.

Por otro lado se intuye ya una suerte de independentismo de las comunidades gobernadas por la derecha con intención de embarrar al Gobierno central. Si ya se abrió el melón del 155 no hay que desperdiciar la fruta. Mano dura contra quien quiere romper España desde la educación.

Casado es un pelele de los ultras. Va a rebufo y alimenta su opereta. Ciudadanos es un cadáver animado tan sólo por la electricidad del clima de excepcionalidad permanente que la derecha desea imponer. La derecha va a acabar en manos de Vox. Eso que nos ahorramos en maquillaje.

Hay que enfrentar el conflicto pero no comprar sus marcos. No tiene sentido discutir sobre la "propiedad" de los hijos, sí explicar que por su desarrollo y bienestar es una línea roja que reciban una educación científica, socialmente responsable y basada en los derechos humanos.

Resulta sintomático que en muchos libros de texto se den explicaciones sobre el funcionamiento de la sociedad en clave neoliberal y tan pocos levantaran la voz. La derecha siempre deja a buen recaudo el orden económico y de clase incluso en los libros educativos.

Idea clave: este es un ataque contra la educación pública para impedir su normal funcionamiento y llevar a padres temerosos a la privada y la concertada, en manos en gran parte de fuerzas reaccionarias. Los maestros han sido siempre la bestia negra de la derecha española.

La derecha teme a una clase trabajadora educada, a una ciudadanía que sea algo más que una serie inconexa de técnicos y consumidores. Temen perder sus cortijos adoctrinantes.
Si la cosa va a peor que los sindicatos de enseñanza llamen a la población a la calle.
Ni un paso atrás.