Vaya cuadro.
Y todo por un Gobierno socialdemócrata atado desde la UE.
El primero: el fascio nace sin bozal ni correa. Se ha proporcionado una coartada moral a lo más zorrocotroco del país, la de que el Gobierno es ilegítimo y que todo vale para salvar al país de una supuesta quiebra.
Las desgracias se cuecen a fuego lento.
Ojalá el país no se vaya al precipicio pero, atiendan señores y señoras de la derecha, cuando un país se va al precipicio no lo hacen solo sus enemigos políticos. Para ustedes también hay billete. Si nos vamos, nos vamos todos.
Así que con calma.