Podrá sonar trillado, pero realmente como podemos cambiar todo esto que a diario vemos.
No voy a prometerte nada, por principio de cuentas: No soy político por lo mismo no quiero que votes por mí, ni me pagan por endulzarte los oídos y decirte que La Luna es de queso. Sólo quiero que pienses, por un momento.
Sabíamos que muchas noticias no llegaban a los medios de comunicación masiva.
Volviendo a mi punto inicial, la única manera que veo de cambiar las cosas es tratar de poner un pequeño grano de arena cada día.
Con pequeñas acciones, te doy ejemplos sencillos:
I) No hagas cosas, que no te gustaría que te hicieran a ti. Esto es clave.
II) Siempre que puedas ayuda a alguien de la tercera edad, a cruzar la calle, invítale algo de comer siempre que puedas, no te va a quitar nada y en una de esas hasta una bendición bien intencionada te llevas. Que por otro lado nunca está de más.
III) Cuando hagas algo bueno, no esperes nada a cambio. No al menos de esa persona a la que decidiste ayudar. Puede que no tenga manera de pagarte, sólo con gratitud.
IV) El mismo es redondo y rueda, por eso es mejor hacer cosas buenas que malas.
V) A veces es mejor alejarte de alguien toxico que buscar ponerte a mano, en muchas ocasiones las cosas se mueven solas. Tarde o temprano te enteras.
VI) Tu única obligación es ser feliz, busca serlo si no lo eres. Cambia lo que no te guste.
VII) Si alguien te hace un favor, quizá no lo puedas pagar. Hazle entonces un favor a alguien más. Sí, te hablo de una cadena de favores.
VIII) ¿Tienes pareja?
IX) Si encuentras algo que no es tuyo, devuélvelo, puede que alguien lo necesite y mucho.
X) Haz cosas buenas, las buenas acciones se multiplican.
A diario vemos cosas malas, pésimas y de la fregada, haz algo bueno por alguien aunque no lo conozcas y si lo conoces, es de tu familia, pues con más razón.
La realidad es este, quizá no puedes cambiar el mundo.
Aclaro que de momento no profeso ninguna religión, creo en Dios: sí, a mí modo.