1. Planteo ahora de otra manera la utilidad (¿importancia?) de presentar los datos de evolución de la epidemia mostrando datos relativos (tasa de multiplicación, incremento porcentual diario, tiempo de duplicación), además de casos diarios y totales, para comunicación de crisis.
2. La epidemia, toda difusión epidémica se mueve en ciclo: implantación, desarrollo, crecimiento, contención, desactivación (llámense técnicamente como sean)
Medida en casos diarios, es el elefante dentro de la boa.
Medida en casos diarios, es el elefante dentro de la boa.
3. Bien. El problema del ciclo es que las apariencias engañan, pero no de manera sistemática, sino en dos fases críticas del ciclo: en la propagación inicial y en la zona en la que se alcanzan el número máximo de casos, el famoso pico.
4. En la parte de desarrollo inicial, la apariencia es que las cosas van bien, porque se habla de decenas o de pocas centenas de casos, sin muertos. Cosa insignificante, despreciable. Y así ha sido despreciada país tras país, a pesar de tener el mensaje de terror de los otros.
5. La apariencia es que todo va bien, que son tan pocos casos que todo está controlado, porque encima se van detectando.
La realidad es que la cosa va mal, porque la inacción deja que el bicho contagie y se multiplique a sus anchas, a su ritmo natural. Nadie lo frena.
La realidad es que la cosa va mal, porque la inacción deja que el bicho contagie y se multiplique a sus anchas, a su ritmo natural. Nadie lo frena.
6. Y es el ruido de fondo, que casi no se ve, pero es real: se multiplica el contagio cada dos-tres días. Cifras totales pequeñas, insignificantes, sí. Son la bola de nieve que hará que al final sea más o menos gigante. La realidad es mala.
7. Luego cuando se disparan los casos ya no hay divorcio: la apariencia es realmente mala, y también los es la realidad. Se siguen multiplicando los casos, y se toman las primeras medidas para limitar contagio, pero los efectos se traducen en freno de nada.
8. En esa fase es facilísimo tomar medidas de contención contra la expansión de la epidemia, porque todo el mundo ve las consecuencias catastróficas.
Pero lo genial hubiera sido tomar esas medidas antes de que explote en la cara, lo más rápido en fase 1.
Pero lo genial hubiera sido tomar esas medidas antes de que explote en la cara, lo más rápido en fase 1.
9. En la fase 3 vuelve a haber una problema de divorcio entre apariencia y realidad, porque las medidas de contención, privadas y públicas ya empiezan a ejercer un impacto real en la reducción del ritmo de contagios del virus, pero la apariencia es dantesca, porque suben casos.
10. Ese divorcio entre apariencia y realidad es también nefasto, porque consume la energía, esperanza de los que sufren las consecuencias del confinamiento, hace dudar de las medidas y mete presión para tomar más medidas a lo loco.
11. Pero la situación ya está para darse la vuelta. Y en la última fase, caen día a día los casos nuevos, y luego un poco más tarde, el de fallecidos. Las cosas parecen que mejoran, y mejoran de hecho.
12. Pues bien, es muy difícil ver que las cosas van mal en la fase inicial, y que empiezan a ir bien en la fase 3 de cambio, si uno mira los gráficos de datos diarios y de datos acumulados (en formato lineal o logarítmico). Ahí van las fases.
13. En cambio, esa información, tanto de que las cosas van mal en la fase inicial, como que las cosas están mejorando en la fase 3 de transición, sí que están en los gráficos de tasa de multiplicación y similares.
14. Es decir, la tasa de multiplicación (y medidas relativas análogas) consiguen casar bien, para cada una de las etapas, la información visual de la realidad, tanto si es ya aparente como si está escondida. Por lo tanto, ilumina el discurso de los expertos y hace que se entienda
15. Volvamos al gráfico de la tasa de multiplicación.
En la fase 1, aunque los casos sean pocos, el indicador te alerta de que la situación está descontrolada: los casos se multiplican ¡por 4! cada 4 días. Es un mensaje claro y rotundo, que debe ayudar a tomar medidas.
En la fase 1, aunque los casos sean pocos, el indicador te alerta de que la situación está descontrolada: los casos se multiplican ¡por 4! cada 4 días. Es un mensaje claro y rotundo, que debe ayudar a tomar medidas.
16. En la fase 2 (rojo), de crecimiento ya visible y constante de casos y de muertes, la gente entiende que 1000 es malo, y que si cuatro días después tienes 3.000, tenemos un problema serio. Políticos y público está dispuesto a tomar medidas.
17. ¿Baja el multiplicador en esta fase de explosión? Sí, porque la gente ya empezó a darse menos las manos y empezó a lavarse más las manos.
Pero el mensaje de la tasa no es que baja, es que el múltiplo está todavía entre 2 y 3. Si no se reacciona, se seguirá multiplicando.
Pero el mensaje de la tasa no es que baja, es que el múltiplo está todavía entre 2 y 3. Si no se reacciona, se seguirá multiplicando.
18. Y se reacciona. En comportamiento individual y en medidas públicas de restricciones de movilidad y contacto social. Y pasan los días, y parece que no sirve para nada porque los muertos siguen creciendo. Pero sí, pasa. El multiplicador ya cae por debajo de 2. Fase 3 (amarillo)
19. Es en esta fase 3 donde la tasa de multiplicación vuelve a jugar un papel que puede ser clave en comunicación de crisis: para explicar que sí, que las medidas tienen e impacto previsto, a pesar de las apariencias.
En esta fase hay que taladrar menos con los récords de muertos
En esta fase hay que taladrar menos con los récords de muertos
20. No porque la cifra de muertos y su número creciente sea mentira, sino porque eso es sólo un parte de la realidad de lo que está sucediendo. Porque está sucediendo de verdad: el cambio de ritmo anuncia cambio de ciclo.
21. Y sigo bastante convencido que transmitir esa idea, de que está cambiando la dinámica, es realmente difícil de transmitir con datos y gráficos en términos absolutos. Y que tampoco sirve lo de "confíen en nosotros, vamos mejor". La gente necesita ver.
22. Y lo que nos dice la tasa de multiplicación, o las medidas de incrementos porcentuales es que se puede ver. Que esa herramienta existe, que ayuda a desligarse de las apariencias. Que la tasa no es un truco de manipulación, sino que a contrario es vía para tocar la realidad.
23. Todos estamos aprendiendo todo con esta epidemia, pandemia, su impacto y su gestión. Se está produciendo fecundación cruzada de conocimientos y talentos de una manera y con una velocidad y flexibilidad prodigiosa. También hay que hacerlo en cómo comunicar la crisis.
24. Francesc, ¿estamos en la Fase 3? Yo creo que sí. Es precisamente lo que dicen los epidemiólogos (pendientes eso sí de la evolución en Cataluña).
No sé cuánto estamos de lejos de la Fase 2 y cuánto de cerca de la Fase 4.
No sé cuánto estamos de lejos de la Fase 2 y cuánto de cerca de la Fase 4.
25. Pero estando probablemente en fase 3, es de nuevo el tiempo y la ayuda estratégica que los indicadores de variación relativa de la epidemia pueden jugar para ayudar a gestionar para la opinión pública esta fase y sus cargas, para no acogotarnos más psicológicamente.
26. Y llegará una fase 4, verde en la que la tasa de multiplicación se acercará cada vez más a 1,0, a la meta (recuerdo que el repechón aquí es porque sumaron casos de la provincia entera).
27. Pero en esta fase 4 la tasa de multiplicación ya no jugará ningún papel estratégico, porque la apariencia se alineará de nuevo con la realidad: cada día los nuevos casos y fallecimientos son inferiores al del día anterior. Podremos abandonar la muleta.
28. Es en esos días en los que empezarán a aparecer tuiteros que responderán con un "menuda chorrada lo de la tasa de multiplicación, basta con ver los datos del gráfico de casos diarios para saber que salimos de la crisis. Menudos expertos".
29. Cuando lleguen esos tuits, lo celebraremos.
Mientras tanto, sigo pensando que conviene que los que están comunicando la crisis, además de dar los terribles datos de casos y fallecidos diarios y acumulados, den información sobre evolución en términos relativos. Fin.
Mientras tanto, sigo pensando que conviene que los que están comunicando la crisis, además de dar los terribles datos de casos y fallecidos diarios y acumulados, den información sobre evolución en términos relativos. Fin.
30. He subido este hilo a una entrada del blog, para poder retocar un poco el texto y clarificar algunos aspectos, y para que desde el blog se pueda difundir mejor en canales distintos de Twitter.
smreputationmetrics.wordpress.com/2020/04/01/el-…
smreputationmetrics.wordpress.com/2020/04/01/el-…
31.
En esa fase inicial, a todos les parece que controlan la situación, o que la epidemia pasará de largo (la verdad, ¿por qué va a pasar de largo, si no hay distanciamiento?).
Pero llega fase 2 y allí sí que parece que todos somos iguales.
En esa fase inicial, a todos les parece que controlan la situación, o que la epidemia pasará de largo (la verdad, ¿por qué va a pasar de largo, si no hay distanciamiento?).
Pero llega fase 2 y allí sí que parece que todos somos iguales.
32.
Otra ilustración del problema de la comunicación en cifras absolutas, para esa fase inicial.
8 semanas para pasar de 1 contagiado a 1000: bah, tampoco es para tanto el bicho, y mira qué lento va <- se multiplicaba por 2,4 cada semana. Casi como ahora.
Otra ilustración del problema de la comunicación en cifras absolutas, para esa fase inicial.
8 semanas para pasar de 1 contagiado a 1000: bah, tampoco es para tanto el bicho, y mira qué lento va <- se multiplicaba por 2,4 cada semana. Casi como ahora.
