La rentabilidad por unidad vendida en la industria automovilística va a tocar techo este 2021.
En plena crisis de semiconductores y camino a otras crisis de materias primas, Toyota alcanzó una rentabilidad del 12,6% en el Q2 de 2021!
En plena crisis de semiconductores y camino a otras crisis de materias primas, Toyota alcanzó una rentabilidad del 12,6% en el Q2 de 2021!
La misma Toyota ha afirmado que espera que 2021 sea, históricamente, el segundo año en el que más va a facturar y más beneficios va a generar.
No es un caso aislado.
No es un caso aislado.
Aunque muchos fabricantes van a tener menos entregas que en otros ejercicios, casi todos están eliminando el descuento totalmente en sus operaciones, lo que está impulsando precios de transacción más elevados y mejorando tanto beneficios como rentabilidad.
Al mismo tiempo y en paralelo, tanto los propios fabricantes como la industria auxiliar están afrontando ERTES y otras medidas equivalentes para mandar a casa a empleados ante los parones de producción.
Esas partes SÍ están sufriendo con esta crisis.
Esas partes SÍ están sufriendo con esta crisis.
La red comercial también "tiene lío". Sin coches para vender (nuevos o usados), los precios suben y la rentabilidad por unidad también, pero "si se quedan sin nada que facturar" acabarán mandando a gente a casa. Temporalmente o de manera definitiva.
Existen además dos "fondos" que planean:
- Puede que parte de la subida de precios actual se consolide "para siempre" (inflación)
- Puede que parte de las redundancias de mano de obra también sean "para siempre" (menos empleo)
- Puede que parte de la subida de precios actual se consolide "para siempre" (inflación)
- Puede que parte de las redundancias de mano de obra también sean "para siempre" (menos empleo)
Y es que la situación (pandemia más crisis de cadena de suministro actual) está sirviendo (no sé si decir como excusa, pero seguro como "razón) para hacer una reestructuración "de fondo y forma" de la estructura laboral y comercial que, por otra parte, era necesaria.
Y es que hay un cambio de modelo de negocio en ciernes, también amparado por las progresivas consolidaciones industriales del sector, que requerían cierres y "despidos", y en esta tesitura se están pudiendo acelerar.
Por cierto, en cifras macro y para todos los que hablan de "la muerte del automóvil": Se espera que en 2022 se fabriquen más coches que nunca jamás en la historia de la humanidad, con un objetivo sobre los 100 millones de unidades.
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