Thread by @leogarciamx

A decir verdad no me sorprende, aunque pensé que no podía ser más servil, más zalamero. Pero eso si, cómo le afrenta al ilustre caballero la narrativa adversa que mal llama discurso de odio.

Una cosa es muy clara, segura. El sr López NO gobierna para todos; él cree que solo gobierna para quienes lo apoyan, en su concepción de poder y gobierno no cabe la idea de no ser ídolo salvador querido y aceptado por la figura retórica "el pueblo".

Quien lo quiera y lo idolatre, entonces es ese pueblo bueno que necesita de su salvación. Pero quien lo confronte entonces es parte de aquella oscura figura disforme a la que tiene que combatir y contra la que tiene que defender a "el pueblo".

Eso es disonancia pura y dura.
Lo realmente interesante es que este tipo de demostraciones serán frecuentes por una razón muy simple y muy sencilla:

EL LAS CAUSÓ DE INICIO.

El sr López hizo 18 años de campaña para lograr el puesto que ahora ostenta, donde catalizo el malestar social, real y válido, prometiendo a diestra y siniestra.

Hoy le toca cumplir.

Pero, prometió cosas que, o están tremendamente lejos de ser posibles, o se contraponen entre ellas, o de plano son irreales. Además, prometió que sería en tiempo record.

Él sr López puede desdecirse toooodo lo que quiera, para su mala suerte hoy en esta época de hiperconectividad, el internet no olvida. Hay testigos de TODO lo que prometió y en los tiempos y alcances que ofreció.

Para la mala suerte del sr López el problema no es ese muégano sin forma que intenta hacerse llamar "oposición".

Para la mala suerte del sr López el problema es que su base fiel, ahora incondicional, conforme los beneficios que les prometió no lleguen, irán perdiendo su lealtad.

Y se va a poner todavía más interesante.

Para la mala suerte del sr López, quienes le entregaron total su confianza y fidelidad en forma de voto, conforme la complejidad económica empiece a golpearles la cartera, serán los que más duramente reclamen.

Asi que, seguro la cartera seguirá desbocada sin ton ni son, pero no hay dinero que alcance para cumplir lo ofrecido, prometido y comprometido en semejante campaña.

Mal negocio intentar resolver la disonancia con dinero.