Thread by @DinoDrawer

The Mandalorian está demostrando ser una buena serie basada en el universo Star Wars. Internet ha explotado y aún más con uno de sus protagonistas. Pero, ¿por qué?
Bienvenidos a un hilo en el que explicamos científicamente por qué nos parece mono bebé Yoda.

HILO
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Supongo que muchos de vosotros habéis caído ante los encantos de esta pequeña criaturarita. Pero, ¿cómo un alíen nos puede enternecer el corazón?
La respuesta: la neotenia.

"Natalia, te estás inventando palabras otra vez".
No, queridos fans del Mandalorian. Dejad que os explique.

La neotenia es un cambio en el desarrollo de un ser vivo por el cual adquiere características más propias de un ejemplar juvenil. Es decir, el crecimiento de estructuras se interrumpe, se conservan órganos juveniles, etc.

Un buen ejemplo son los ajolotes que pueden conservar las branquias típicas de los anfibios juveniles en la fase adulta.

El caso es que se sabe que cuando un animal tiene las proporciones similares a las de nuestras propias crías nos genera esa reacción de ternura. Hay una reacción de cuidado parental frente a las proporciones que dan los rostros juveniles.

Los ojos grandes, la nariz cercana a los mismos, una cabeza grande en comparación al resto del cuerpo... Rasgos propios de crías que nos hacen manifestar estos cuidados parentales. Como a nuestro protagonista mandaloriano al ver a esta criatura.

Por estas razones nos gustan tanto los cachorros. Sus proporciones son similares a nuestras propias crías y cambian cuando son adultos.

Pero la cosa no queda aquí y es que los propios seres humanos somos neoténicos.

Simplemente fijaos en las proporciones de un chimpancé adulto frente a las de una cría. ¿A qué notáis una mayor similitud entre las crías de esta especie y nosotros mismos?

Los humanos, en comparación al resto de primates, tenemos unas proporciones craneales más similares a un juvenil de simio que a un adulto. Esto desemboca en un cráneo más grande y, posiblemente, un cerebro de mayor tamaño.
1. Cráneo de chimpancé
2. Cráneo humano

Tan sólo comparad los cráneos anteriores con el de un bebé neonato humano (donde se aprecia aún cartílago entre la soldadura de los huesos) y un niño.

Pero este recurso no sólo se ha explotado en la naturaleza. Tenemos buenos ejemplos de cómo la animación se aprovecha de esto para generar simpatía por sus personajes.
Comparad las proporciones de Mickey Mouse con su contraparte, Mortimer. Mickey es claramente neoténico.

Mortimer en comparación tiene proporciones más propias de un adulto y esto influye en la psicología de los personajes. Te sientes más atraído por el diseño juvenil de Mickey que por el adulto Mortimer. Juegan con nosotros, chavales.

Os dejo con imágenes de unos bebés chimpancés para que proceseis todo esto.
(Y que son muy graciosos).

Y unos bebés Yoda.

Así que ya sabéis, la neotenia está presente en nosotros y a nuestro alrededor. Nos alegra el día con vídeos de crías jugueteando y nos ha permitido tener el cerebro más grande de todos los primates.
Fuente: "El pulgar del panda" de Stephen Jay Gould.

¡Muchas gracias por leer! Espero que os haya gustado.
(Y ved The Mandalorian).
Hasta el próximo hilo.